jueves, 4 de junio de 2015
ENTERATE DE ESTAS FORMAS PARA CURAR EL DOLOR CIATICO
ENTERATE DE ESTAS FORMAS PARA CURAR EL DOLOR CIATICO
El dolor ciático se produce cuando hay una irritación del nervio ciático, que hace que el paciente experimente una fuerte dolencia que va desde la parte baja de la espalda, extendiéndose hasta la parte de atrás de una de las piernas e incluso puede llegar hasta los pies.
Aunque, en ocasiones, esta dolencia no se debe a la irritación del nervio ciático, conserva el nombre de ciática o ataque de ciática por ser muy similar.
La irritación del nervio ciático se produce cuando este se comprime como consecuencia de una presión excesiva. Las principales causas del dolor ciático incluyen estenosis del canal lumbar, síndrome piriforme, fracturas, tumores o embarazo, entre otros.
Las personas que sufren de ciática experimentan especialmente un intenso dolor que puede incluso impedir la realización de sus actividades cotidianas. Este dolor suele venir acompañado de alteraciones de la sensibilidad de la piel que inerva el nervio ciático, además de debilidad muscular y la disminución de reflejos musculares.
Si el dolor ciático te molesta frecuentemente, a continuación compartimos 8 formas naturales de combatirlo para que acabes de una buena vez con esta dolencia.
1. Acupuntura
Una reciente investigación publicada en la Revista de Medicina Tradicional China reveló que en un grupo de 30 personas que recibieron tratamiento de acupuntura para aliviar el dolor ciático, 17 se libraron por completo del dolor, mientras que 10 sintieron mejora en los síntomas durante el proceso de calentamiento de las agujas.
2. Yoga
En otra investigación se descubrió que las personas que sufrían constantemente de ataques de ciática y practicaron yoga durante más de 16 semanas vieron una reducción del 64% del dolor y el 77% de la discapacidad.
3. Masajes
Los masajes son una excelente opción para relajar los músculos y combatir el dolor del nervio ciático. En este caso, lo ideal es utilizar un aceite esencial relajante y enfocarse en las áreas afectadas, teniendo cuidado de no presionar bruscamente para no empeorar el problema.
4. Analgésicos y antiinflamatorios
Ya sean naturales o farmacológicos, los analgésicos y antiinflamatorios pueden ser muy efectivos en el tratamiento del dolor de ciática. Este tipo de tratamiento puede aliviar el dolor hasta 8 horas y se pueden consumir hasta dos días seguidos. En el caso de utilizar tratamiento farmacológico, no se debe abusar del consumo de pastillas porque estas pueden tener efectos secundarios.
5. Aplicar calor
Una bolsa de agua caliente o un baño de agua caliente pueden ser muy efectivos en el tratamiento del dolor de ciática. También se puede poner una compresa caliente en el área afectada y dejarla actuar de 20 a 25 minutos.
6. Aplicar frío
Está comprobado que las compresas de hielo también pueden disminuir significativamente el dolor ciático. Para aprovechar sus beneficios, se debe aplicar en la zona lumbar o área afectada y dejarla actuar de 10 a 15 minutos. Este tratamiento ayudará a reducir la inflamación y el dolor, aunque solo temporalmente. Siempre se debe poner el hielo envuelto en paños y nunca directamente sobre la piel.
7. Plantas
Las plantas con propiedades antiinflamatorias y analgésicas pueden ser de gran ayuda en el tratamiento del dolor ciático. Entre estas plantas puedes elegir, entre otras:
El jengibre.
La cúrcuma.
La pimienta.
El abedul negro.
La lechuga silvestre.
La ruda.
8. Ejercicios
Aunque parezca ilógico, el ejercicio generalmente es mejor para el alivio del dolor ciático que guardar cama. Se puede permitir a los pacientes descansar por uno o dos días después de un recrudecimiento del dolor ciático, pero luego de ese tiempo la inactividad generalmente empeora el dolor. Los músculos y estructuras de la columna vertebral, si siguen sin ejercitarse y sin moverse, pierden forma y se ve afectada su capacidad de apoyar la espalda. Esta pérdida de forma y debilitación pueden llevar a una lesión o a una distensión muscular de la espalda, provocando dolores adicionales. El ejercicio activo también es importante para la salud de los discos vertebrales. Los movimientos facilitan el intercambio de nutrientes y líquidos dentro de los discos, manteniéndolos saludables y evitando la presión en el nervio ciático.
Entre las características comunes de todo programa de ejercicios para la ciática se encuentran:
Fortalecimiento de los músculos del tronco. Muchos de los ejercicios para la ciática buscan fortalecer los músculos del abdomen y de la espalda, para apoyar mejor la espalda. Los ejercicios de estiramiento para la ciática están dirigidos a los músculos que pueden doler cuando se ponen tiesos e inflexibles. Cuando los pacientes participan en un programa de ejercicios regulares de fortalecimiento y de estiramientos leves, pueden recuperarse más rápido de un recrudecimiento de la ciática y son menos propensos a sufrir futuros ataques de dolor.
Diagnóstico específico. La mayoría de los programas de ejercicios serán adaptados a la causa de fondo del dolor ciático del paciente, por ejemplo una hernia discal lumbar o una estenosis vertebral. Hacer los ejercicios que no debe puede empeorar el dolor ciático, así que es importante obtener un correcto diagnóstico antes de iniciar un programa de ejercicios para la ciática.
Estiramiento de los músculos isquiotibiales. Sea cual sea el diagnóstico, en la mayoría de los casos de la ciática es bueno hacer, de manera rutinaria, ejercicios de estiramiento de los músculos isquiotibiales. Los músculos isquiotibiales son músculos de la cara posterior del muslo. Cuando son demasiado tensos, los músculos isquiotibiales aumentan la tensión en la parte inferior de la espalda y muchas veces empeoran, o hasta causan, algunas de las afecciones que llevan a la ciática.
Ejercitarse correctamente. Como corolario de uno de los puntos anteriores, aun al hacer los ejercicios indicados, si no los realiza de la forma correcta puede hacer que los ejercicios sean poco eficaces, y es posible que hasta continúen o aumenten el dolor. Generalmente es aconsejable aprenderse los ejercicios bajo la dirección de un profesional médico debidamente capacitado, tales como un fisioterapeuta, un quiropráctico o un médico especialista en medicina física y rehabilitación.
Ejercicios aeróbicos. Además de ejercicios para la ciática específicos, también se puede recomendar el acondicionamiento aeróbico para mejorar el estado físico general. Caminar es una excelente forma de ejercicio para la parte inferior de la espalda porque es de relativamente bajo impacto, pero proporciona todos los beneficios del ejercicio aeróbico. De ser posible, lo mejor sería ir progresando hasta lograr caminar 3 millas cada día a un ritmo enérgico.
Cuidarse cuando tiene ciática debe considerarse parte integrante de la vida cotidiana, no una mera adición a la rutina al final del día. Además de realizar una rutina de ejercicios, los pacientes con ciática deben reducir al mínimo posible las agresiones cotidianas a la parte inferior de la espalda; es decir: utilizar la postura ergonómica correcta al levantar cosas pesadas, mantener una postura correcta, asegurarse de que la parte inferior de la espalda esté bien apoyada al sentarse y evitar mantenerse sentado o mantenerse de pie por períodos prolongados.
Antes de comenzar cualquier programa de ejercicios, los pacientes deben hacerse examinar por un profesional médico para obtener un correcto diagnóstico de la causa del dolor y para eliminar la posibilidad de que se trate de un problema más grave. Los ejercicios indicados varían según la afección subyacente causante del dolor ciático; así los pacientes no deben intentar tratar la ciática por sí solos, sin antes consultar con un profesional médico.