miércoles, 17 de noviembre de 2010
SIXTO PAZ WELLS - EL VIAJE A MORLEN
EL VIAJE A MORLEN.
SIXTO PAZ WELLS.
Habían transcurrido dos meses desde la experiencia de Enero y la invitación seguía en pié, siendo reiterada una y otra vez por los guías a través de las comunicaciones. Se insistía sobre la debida preparación que debía acompañar a una aventura de semejante magnitud. La premura de los guías señalaba a fines de Marzo como fecha prevista para la cita.
Viviría una nueva y extraña experiencia al lado de los guías, visitando una colonia que alberga a seres humanos de todas las razas, y de diferentes momentos de la historia. En aquella ciudad sabía que se hallaba el consejo de los Doce Menores de Morlen, por lo que debía esperar consecuencias trascendentales de dicho periplo. A través de diversos antenas se había estado recalcando la necesidad del viaje y la conveniencia de la fecha escogida, por lo que traté de disponerme lo mejor posible para marchar hacia el desierto.
Reflexionando sobre ciertas cosas vinculadas a la experien¬cia, recordé como en el año de 1974 en la puerta dimensional Xendra, los guías me explicaron que no me llevaban físicamente pues podría querer quedarme y ello no debía ser así; ahora trece años después, ellos me insistían para que les acompañara física¬mente. Pienso que ahora sí tenía demasiadas razones para quedarme en la Tierra, y la madurez alcanzada me hacía ver que el gran compromiso estaba aquí.
En el camino rumbo a Chilca presentía y visualizaba todo cuanto se daría, como si estuviese viéndolo por anticipado. Era una situación extraña que me permitía sobrellevar el aconteci¬miento sin ser víctima de la tensión. Quizás debido a la prepara¬ción integral que mantenía, pude tomar todo como algo natural. Llevaba una dieta de una semana de frutas, y el día anterior estuve en ayuno de limpieza interior; también había descansado perfectamente y temprano durante las noches previas.
Los guías me habían pedido que fuese sólo a la cita, por lo que no debía llevar a nadie conmigo a la quebrada en el desierto. La reunión exigía mucha reserva y discreción, pero tanta era la preocupación de Marinita porque no fuese sólo al lugar, que ella se permitió comentarlo con Tito Boceta, ofreciéndose él a llevarme en su movilidad. Me negué, pero fue tanta la insistencia de mi esposa que al final accedí siempre y cuando me dejara y se marchara.
Llegados al lugar el día 30 de Marzo de 1987, avanzamos en el automóvil por las riberas del cauce seco del río Chilca adentrándonos por la inmensidad del montañoso paisaje, La tarde había caído ya y eran necesarios los faros encendidos para atravesar el polvoriento camino.
Detenido el coche me quise despedir de mi eventual compa¬ñero de viaje, pero él se mostró insistente en querer acompañar¬me en parte del recorrido a pié. Al final lo dejé caminar a mi lado un buen rato, sin poder conseguir que se retirara.
Subimos por una colina hacia la quebrada lateral que se abre al lado izquierdo del cauce seco, y al querer recordarle la necesidad de que avanzara y sólo, él me decía... "Un poquito más".
Teníamos buen camino recorrido cuando entre las sombras de la noche se empezaron a multiplicar los fogonazos y resplando¬res, en un cielo nuboso y cerrado. Seguimos subiendo cuando nuestros cuerpos se empezaron a iluminar con la conocida tonalidad azul brillante; pero curiosamente, así como despedía¬mos luz, hacíamos sombra. Era difícil entender lo que ocurría mientras el calor corporal ascendía a extremos no soportables, mi compañero fue el primero en percatarse que adelante de nosotros se estaban materializando las siluetas de alrededor de cinco seres altos y espigados, de un color plomizo brillante, como cortándonos el paso para que no siguiéramos avanzando. El temer hizo presa en Tito, quien me dijo: ¿Estás viendo lo que yo?... ¡Son varios y nos cortan el paso!
- Sí, y ya es hora de que te regreses... Tú no debes estar aquí. - Fui categórico, no queriendo ofenderle, pero sabía que su presencia exponía el buen éxito de la salida.
- Creo que tienes razón. Disculpa que te deje solo pero pienso que es mejor que me retire. -Tito estaba nervioso y las frases entrecortadas así me lo revelaron. Se alejó entonces, volviendo por donde habíamos venido, y hasta que no encendió las luces de su coche y partió, yo no seguí.
Una vez solo en el lugar, volví al camino pero ya las proyec¬ciones habían desaparecido. A cada paso que daba por entre las piedras y la polvorienta cañada, crecía mi entusiasmo y percibía que me acompañaba una fuerza increíble que me daba una gran seguridad y serenidad. Me sentía atraído hacia las faldas de unos cerros al final de la quebrada.
Mi cuerpo nuevamente se iba transformando en una especie de lámpara de la que se desprendía una intensa brillantez. Por momentos dejaba de percibir el suelo bajo mis pies, mi paso era a un solo ritmo, concentrado en evitar las piedras y los desniveles del terreno. Vestía para tal oportunidad: un pantalón vaquero azul, camisa blanca, abrigo plomo y tenis blancos; Además cargaba conmigo una mochila pequeña marrón, donde incluía entre otras cosas un cuaderno de mensajes, otro de recopilación de símbolos una Biblia pequeña y una cámara fotográfica senci¬lla. Al llegar a un recodo del cañón, los resplandores en el cielo se multiplicaron exageradamente, y entonces hizo su aparición entre las nubes un potente haz de luz amarillo que se proyectaba oblicuó a Tierra. De entre las nubes que se iban abriendo formando un círculo dejando entrever las estrellas, asomó una llave que era la que mantenía el haz sobre el suelo.
Se encontraba a unos quinientos metros de donde yo me hallaba y caía de una altura de un centenar de metros, salió algo... Era como un ser humano, por la silueta que era lo único que yo podía distinguir. Se empezó a movilizar en línea recta hacia mí, como flotando, sin tocar el suelo.
Confieso que en aquel momento me puse nervioso, y temero¬so a pesar de todo. Aquella forma humana era imprecisa. Al acercarse a mí, pude apreciar que no tenía rostro evidente; me observó por unos instantes y luego se me aproximó extendiendo sus probables brazos, tocándome los hombros; escuché entonces que me decía: ¡Acompáñanos! Se dio la vuelta y regresó inme¬diatamente por donde vino. Fui detrás de éste ser hacia aquella columna de luz, a donde se había vuelto la proyección, el ambiente se hallaba inundado de una fuerte vibración, sin que se pudiese distinguir ningún otro ruido.
Cuando estuve frente a la luz, decidí ingresar en ella. A gran altura veía un objeto discoidal que parecía girar sobre sí mismo, aunque bien podía ser el efecto de decenas de pequeñas luces que se prendían y apagaban intermitentes en todos los bordes de la base. Cálculo que el objeto tendría entre 15 a 20 metros de diámetro.
Dentro de la luz, sentía que mi cuerpo se expandía percibien¬do también una fuerte presión y calor. Al cabo de unos segundos me vi sometido a la ingravidez, siendo succionado hacia arriba por la fuerza que acompañaba la luz.
Como en una experiencia anterior, debajo de mí se fue cerrando como una escotilla y al bajar la intensidad de la luz queme contenía, fui depositado sobre la misma. En esta oportunidad la habitación circular abovedada se hallaba iluminada, pudiendo distinguir con toda claridad el cristal suspendido en el techo desde donde manaba la fuerza centrípeta elevadora; también apreciaba el piso que reflejaba como un espejo. Al frente mío se encontraban cinco seres todos ellos en apariencia varones, de similar estatura y raza. Mi impresión inmediata fue que eran oriundos de Ganímedes.
Aquellos individuos estaban todos parados formando un semicírculo alrededor de una consola blanca y rectangular, que les llegaba casi hasta la barbilla y de ancho, era algo más gruesa que el cuerpo de un hombre. La cara que lucía hacia mí era totalmente lisa, y no se veía que debajo de ella hubiese ruedas o algún mecanismo de transporte.
Uno de los guías levantó el brazo y escuché su voz hablándo¬me que me pedía me acercara, a lo cual respondí caminando hacia ellos. Me detuve a escasos dos metros de esta gente y los miré detenidamente. Con voz firme y de afán, uno de ellos que identifiqué como OXMALC me dijo: -Has venido para ser testigo de cómo la esperanza activa da frutos. Esta llegando el tiempo en que las palabras deben dejar paso a los hechos.
No hay tiempo que perder, todo él, es aprovechable para lograr lo que se propongan.
Ponte este traje, la nave partirá inmediatamente.
Me extendió en aquel momento un traje similar al de ellos, corno aquel que había usado dos meses antes en la experiencia de la Base Submarina.
Estaba bien doblado y lo había extraído de un cajón de la consola. Al cogerlo con las manos observé que era un pijama enterizo, como aquellos que usan los niños en el Invierno, y que incluía hasta el gorro.
Me explicaron que debía quitarme toda la ropa rápidamente no había cuarto de baño o lugar reservado para cambiarme, por lo que tuve que hacerlo delante del grupo. Introduje mi cabeza por el cuello del traje qué era de una sola pieza, y de un material elástico que no se deformaba.
Cuando me desprendía de mis ropas, dos de ellos cogían mis cosas y las introducían en la especie de escritorio- máquina.
Esto me preocupó pensando en que pudiera ser en esta ocasión como una especie de incinerador, y por lo tanto cómo volvería a casa. Me quité el reloj de pulsera, pero no lo puse entre mis cosas sino que lo oculté en el puño de mi mano, fijándome bien la hora que marcaba. Traté de que ellos no se percataran del mismo; incluso hasta traté de bloquear mi mente para que no lo descu¬brieran en mis pensamientos. Suponía que tendrían muchas cosas en que pensar para fijarse en ciertos detalles, pero era mucha mi ingenuidad.
Me sentía ridículo con aquel traje con gorrito, que me daba la sensación de una armadura livianísima.
Estaba distraído arreglándome el traje, cuando los seres se empezaron a retirar del recinto. Uno de ellos mantenía la palma de la mano delante de la consola, con el dedo pulgar ligeramente separado del resto de los dedos, los cuales permanecían juntos. Con ello el guía lograba que el aparato se deslizase ligeramente sobre el suelo y avanzara como flotando.
Seguí a la comitiva por la rampa lateral que unía la planta baja en donde nos hallábamos, con una puerta ovalada en la parte superior, que conducía hacia la habitación hexagonal que ya conocía.
OXMALC estaba a cargo del objeto rectangular que había trasladado hacía el extremo izquierdo del salón de mandos, ingresándolo en un lugar de la pared al final de los escritorios blancos llenos de discos brillantes. El aparato atravesó la pared y desapareció. De inmediato el guía se dirigió al Centro de la habitación donde se hallaban dos cilindros romos, puso sus manos a cierta altura sobre ellos y empezaron a reflejar una intensa luz.
Los demás se habían colocado frente a los escritorios del lado derecho y se sentaron sobre sillas plegables que extraían de debajo de los mismos.
Al final de los escritorios del lado izquierdo había un asiento de marroquín negro que había sido colocado allí, en la misma ubicación de la experiencia anterior, y Oxmalc con su mano me hizo la indicación de que fuese allí y me sentara, lo cual hice rápidamente.
Me encontraba de espaldas a la pared y mirando hacia el centro de la habitación, donde Oxmalc seguía como en una especie de trance. De sus manos salía un ligero resplandor que a veces se confundía con la luz que despedían los cilindros. Su acción terminó y se encaminó a sus compañeros, colocando la palma de la mano derecha frente a las pantallas, con el brazo flexionado. Yo sólo veía cuanto acontecía en las tres filas de pantallas que tenía delante de mí sobre los escritorios. Las panta¬llas cinco por fila- medían según mis cálculos unos ochenta centímetros de largo por unos sesenta de ancho, separadas entre si unos veinte centímetros.
Los que estaban sentados extraían de debajo de los escritorios unos tubitos largos que parecían de vidrio, y los iban colocando por encima de los discos brillantes sobre los paneles, viendo cómo se iban derritiendo o achicándose. La intensidad de la luz de la habitación decreció y Oxmalc vino a mi lado, extrayendo un asiento parecido al mío pero con un símbolo en el espaldar que mi silla no tenía. El símbolo era un triángulo grueso con un círculo pequeño en su interior de un color blanco.
Las pantallas encendidas empezaron a rotar en la pared, arrojando imágenes de un punto blanco que se iba acercando en contraste con un fondo totalmente oscuro.
Un sonido muy intenso que parecía provenir de fuera me puso nervioso, por lo que el guía me colocó la mano sobre el hombro buscando serenarme, mientras me susurraba en voz baja y en perfecto castellano:
- ¡Tranquilo, cálmate...! Ah, y cubre bien tu reloj bajo la ropa no lo saques por ningún motivo, porque si no la alta vibración en la nave te lo va a descomponer.
Me avergoncé del pequeño secreto entre manos, pero ya mismo lo estreché contra mi pecho para que no resultara dañado. No sentí sensación alguna de movimiento en la nave, pero por lo que veía en los monitores, aparentemente nos estábamos desplazando en el espacio. Y mientras el punto crecía y se acercaba, el techo hasta hace poco compuesto por pirámides invertidas de ancha base cuadrangular, se tornaba completamen¬te liso, como masa de cristal ahumado. Luego se transformó en una cúpula por dentro y finalmente se hizo totalmente transpa¬rente creando la sensación de estar flotando en el espacio; a esto se le sumó el que todas las pantallas se unieron dejando de rotar, formando tres imágenes largas y diferentes según el nivel en que se encontraban, para finalmente agruparse todas y consolidar una vista única, como una sola gran pantalla. En medio de la penumbra de la habitación, la sensación visual de vacío fue impactante.
De pronto la luz blanca era un objeto de increíbles proporcio¬nes, que lucía un frente atiborrado de luces multicolores, como crestas sobresaliendo del fuselaje. Debajo se destacaban venta¬nales múltiples y una gran compuerta que estaba rodeada de potentes reflectores.
La nave en que iba, parecía estar ingresando-según la imagen que se me proporcionaba-dentro de una nave base. Por dentro era como un hangar, pero mayor al que había observado anterior¬mente en Enero antes de ir hacia la estación Submarina. Sobre los lados había inmensas terrazas en donde se observaban objetos más pequeños y de diferentes formas, todos allí estacio¬nados. Me sorprendió admirar al fondo del hangar dos objetos que considero debían ser inmensos, en forma de esferas lisas y metálicas, como suspendidas en el gran espacio central, y en medio de ellas otro objeto, que sí era una nave, era la cosa más extraña que hubiese visto jamás pues tenía forma piramidal y aunque se veía que era metálica, en algunos momentos parecía traslúcida por los reflejos de luz.
El disco en que me hallaba comenzó a maniobrar para aterrizar en uno de los grandes estantes o terrazas existentes del lado izquierdo. Las terrazas no eran todas iguales y describían semicírculos de tal manera que las que se hallaban en la zona media eran más retiradas que las que aparecían en las zonas altas y bajas. En la parte baja se observaba gente trabajando a manera de un gran taller o fábrica.
En el momento mismo en que la pequeña nave aterrizó, el falso techo volvió a aparecer en su forma original que según me explicó Oxmalc posee además de las pirámides visibles, otras no visibles en un entre-techo que complementan estructuras rom¬boidales como octaedros.
Al irse normalizando todo internamente en el salón hexagonal que ya lucía iluminado, pensé que todo el viaje que habría de hacerse dentro de la nodriza, no demandaría mayores sensacio¬nes. Pero estaba equivocado.
Al cabo de unos minutos, cuando me aprestaba a iniciar un diálogo con mi compañero de al lado, me sobrevino una sensa¬ción terrible; era como si algo me subiera a gran velocidad desde los pies hasta la cabeza. Sentí un gran calor en el rostro y las manos, acompañado de un fuerte golpe sólo en estas partes que permanecían descubiertas de mi cuerpo y fue tan instantáneo y violento que me hizo perder el sentido.
Después de un buen rato reaccioné, mientras a mi lado el guía me acariciaba con respeto y cariño. Al ir recobrando el sentido, mi vista fue aclarándose pudiéndole ver, sorprendido por lo acontecido le pregunté: -¿Dónde estoy? ¿Qué me ha ocurrido? - Estas con nosotros, en la nave... Hemos salido del planeta, y todos tus átomos y moléculas han sido alineados y ajustados a energías cósmicas.
Ha habido una transferencia mediante grandes cristales y fuerzas electromagnéticas, encontrándonos ahora en los conduc¬tos de líneas de fuerza que atraviesan y entrelazan éste sistema solar.
La conmoción experimentada por tí nunca más la volverás a sentir, y a lo largo del viaje te irás adaptando a las ondas vibratorias de influencia de cada uno de los planetas por donde "fluimos".
-¿Cómo pueden recorrer las increíbles distancias que nos separan?
No es difícil si existe la sintonía y el conocimiento necesario Depende mucho con cual de tus vehículos quieres viajar, qué tipo de percepciones y emociones buscas o esperas tener. Si pretendes viajar con todos tus cuerpos, incluyendo el material es_ importante que sepas que el Universo es como un cuerpo humano que posee su sistema nervioso, en el que todo se mueve por impulso y a través de dichos impulsos llega la información, Depende del ser consciente, la forma y la velocidad con la que quiera llegar a tal o cual lugar en ésta u otra dimensión.
El universo completo está atravesado por líneas de fuerza que son autopistas cósmicas, que permiten enlazar puntos distantes y alcanzar distancias enormes con un mínimo esfuerzo de energía.
-En el espacio entre las Galaxias existen pliegues que funcio¬nan como atajos; y son las naves madres, aquellas capaces de efectuar los viajes interplanetarios, ya que cuentan con fuentes de poder alimentadas por las energías de las estrellas y retro ali¬mentadas en planetas como el tuyo.
Poseen la tecnología para actuar como condensadores dé la energía cósmica que abunda irradiada por cientos de miles de billones de calderas termonucleares, a la espera de ser recepcionada y destilada.
Una nave madre crea una atmósfera artificial y un cinturón energético capaz de captar y aprovechar todo cuanto existe allí en el espacio aguardando su utilización.
Mantenía mi reloj con el puño cerrado, tratando de librarlo del problema que me decía el guía, podría llegar a producirse. Sólo al llegar a Morlen pude verificar que aquel increíble viaje desde la Tierra a la luna de Júpiter se había realizado en ¡Tres horas terrestres! -¿Llegan ustedes a la velocidad de la luz?
- Sí pero en esta oportunidad no la utilizamos. habitualmente la sobrepasamos reimpulsándonos en el mismo momento del ingreso. Ello nos permite traspasar puertas dimensiónales e ingresar en otro tiempo y espacio que es controlable desde dentro.
Cuando un cuerpo alcanza velocidades superiores a la de la luz, se transforma en una unidad bioplasmática, esto es, en una 'materia diferente a la densa de la tercera dimensión, participan¬do de otro estado vibratorio.
- ¿Se requiere una preparación especial para quien viva tal experiencia?
- Ciertamente que sí. Es más fácil para alguien que tenga conciencia de su continuidad existencial y de la atemporalidad de la evolución, sobrevivir a experiencias como éstas, pues, debe enfrentarse a la ruptura de las concepciones espacio-temporales y sujetarse a cambios físicos.
- Me podría alcanzar mi equipaje?, tengo allí anotadas cientos de preguntas que quisiera hacerles. Además les pediría me permitieran sacarles una fotografía, si es que me facilita la cámara.
- No te podemos acercar nada, pues todo ello está siguiendo su propio proceso.
- ¡No me vayan a estropear la cámara por favor!
- Si la sacáramos en este momento se estropearía. Además no te saldrán las fotografías por cuanto las condiciones de la nave hacen que la luz lo atraviese y penetre todo. Tu rollo ya está velado...
- Bueno, cambiemos de tema... A ver, díganme ¿Cuando ustedes se comunican con nosotros telepáticamente están en ese instante en el otro lado de la línea, o sea ustedes, están atentos?
-Se me ocurrió consultar.
Mientras estamos cerca o en la Tierra participamos de su temporalidad; pero en otros momentos los mensajes están en el ambiente como grabados, y al estar en esa condición quien recibe los comunicados se hallará en la situación pasiva que imposibilitará el intercambio de conceptos. En la comunicación hay un doble juego en el que deben conciliarse la elevación vuestra y posición en el nivel de sintonía, mediante las prácticas de respiración, relajación y concentración, con el envió de nuestras emisiones. La fluidez del mensaje depende del estable¬cimiento de un puente que podemos llamar comunidad mental. Y así como puede y debe funcionar entre ustedes, y nosotros, también deben procurarlo entre ustedes, mismos; lo que les permitirá una comunicación integral.
- No sé que preguntarles. Tenía anotadas tantas cosas, pero ahora me encuentro bloqueado. Quisiera saber tanto!, es que necesitamos saber, sobre todo.
- Relájate y visualiza imaginándote en tu mente, el cuaderno donde anotaste tus inquietudes. Míralo e imagínalo abierto en gas páginas. Mentalmente lee las preguntas...
-¡Ya lo vi,! o mejor dicho, ya lo imaginé...! Sí funciona.
- Abrí los ojos, maravillado de poder ver tan claramente con la mente en mi memoria. El poder de la voluntad y una actitud positiva son capaces de permitirnos alcanzar lo que buscamos.
Al momento de abrir los ojos, la habitación estaba envuelta en una luminosidad verdosa y un arco de luz se formó entre dos cilindros del centro hexagonal.
- ¿Desde cuando se han venido manifestando en la Tierra? - Desde antes de que el hombre existiese en la faz del planeta. y no sólo nosotros, sino muchas civilizaciones bajo el patrocinio de los 24 ancianos.
- ¿Quiénes fueron los primeros en venir?
- Los de la Constelación del Cisne. A ellos les pueden llamar¬ aunque ya hay quienes lo hacen, "los padres antiguos" (el concepto de Padres Antiguos se confunde mucho en las escuelas y organizaciones esotéricas de tu mundo) quienes más tarde se hibridaron con la humanidad y les enseñaron conocimientos.
Los de la Constelación del Cisne descendieron en el planeta cuando éste aún se hallaba compuesto por mares ácidos, se instalaron en Colonias Submarinas en lo que hoy correspondería a la Antártida, pero cuando ésta se ubicaba en el Ecuador Terrestre.
Esta primera humanidad en la Tierra fue llamada humanidad Antártica y con sus experimentos contribuyeron con la naturaleza, sembrando vida y esporas en los océanos ácidos, y ayudando a su transformación poco a poco en mares alcalinos mediante reacciones químicas provocadas.
- ¿Siguen aún con nosotros en la Tierra?- No..., llegó el tiempo que marcharan pues el programa del planeta exigía aguardar a que la mano de la naturaleza hiciera lo suyo. Además la Tierra era muy inestable para acomodar aún una civilización en sus fangosos continentes y delgada y quebradiza corteza.
- ¿Ustedes, intervinieron en las historias que narra la Biblia?
-Sí, y no sólo nosotros... La Tierra es el resultado de más de un proyecto y experimento genético; hibridación y mestizaje; colonizaje; naufragios estelares y hasta deportaciones...
- ¡Cierto!, en todos los libros sagrados, tradiciones y leyendas existe mención explícita de ello. Pero la Biblia la consideramos en mi mundo un conjunto de libros que sintetizan la verdad inspirada por Dios a través de los profetas...
¿Ustedes qué opinan al respecto? ¿Poseen algo similar? - ¿Qué es lo que entienden ustedes por Biblia? Preguntó el guía. - Bueno, la Biblia es la recopilación de alrededor de 72 libros según sea la religión que se identifica con ella, porque hay iglesias que reconocen unos y rechazan otros, considerándolos apócrifos, esto es no canónicos o inspirados.
La Biblia está dividida en dos partes claramente diferencia¬das: El Antiguo Testamento y el Nuevo Testamento. El nombre "Biblia" surge del término "Biblón" que en griego significa "Libro", y deriva del nombre de una importante ciudad de comerciantes fenicios llamada "Biblos". Los diversos libros que componen el Antiguo y Nuevo Testamento fueron escritos en diferentes épocas, e incluso de cada libro hay varias fuentes y traducciones, por lo que cada día son más los estudiosos que coinciden con la opinión de que la Biblia ha sido mal interpreta¬da, fragmentada, adulterada y distorsionada a conveniencia o por falta de rigor, a lo largo de su accidentada historia.
-Recuerdas muy bien todo lo que has aprendido a través de tu cultura, pero sabrás que para nosotros la verdad inspirada de Dios, está en todos los libros sagrados de todas las religiones y culturas, y en ningún lugar en particular. Y sobre tu pregunta de que si tenemos algo similar, te diré que sí y está aquí...
El guía dirigió su mano izquierda hacia el centro de su pecho, como a la altura del esternón.
- Ahora comprendo y siento aquello de que "Dios no ha dejado de hablar al hombre, sino que es el hombre el que no termina de aprender a escucharle".
- ¡Gracias por la explicación!.
En la Biblia se mencionan manifestaciones de Yahvéh o Jehová muy violentas y contradictorias; ¿Son ustedes o los otros visitantes, culpables de estas demostraciones de fuerza? Han tenido ustedes participación directa o indirecta en lo que ha desencadenado ahora la humanidad?
- Ustedes, están teniendo una magnífica oportunidad para que a la luz de la experiencia del contacto de Misión Rama, como de otros grupos de contacto, puedan llegar a entender cómo se comporta la naturaleza humana y cómo surgen los mentalismos, o sea los afloramientos del subconsciente, las manifestaciones disfrazadas de la personalidad y el ego inferior, las influencias negativas del ambiente y hasta la acechanza de los bajos astrales.
Todo esto significa que hay una gran distancia entre lo que realmente ocurre, lo que el hombre cree e interpreta que ocurre y cómo lo acomoda cuando quiere transmitírselo a los demás.
Ustedes los terrestres tienen una habilidad única para com¬plicarse la vida y dejar que se la compliquen los demás, y sabemos que en ello paradójicamente tenemos parte nosotros.
Lo que te quiero decir es que la historia es desfigurada por intereses y errores de percepción. Las cosas no ocurrieron exactamente como han sido escritas y narradas en los libros sagrados.
Reflexioné unos minutos dándole la razón al guía, por cuanto sabía que los libros del Pentateuco (los primeros cinco libros de la Biblia), adquirieron su forma definitiva trescientos años después de Moisés, en las manos de los escribas de Salomón; y en tantos siglos la visión del pasado tiende a redondearse exagerándose su carácter épico, moralista, etc.
Y en Rama ciertamente se habían producido errores garrafa¬les durante todo su proceso, producto de la ausencia de espíritu crítico, inconstancia en el trabajo interior, relajamiento de la disciplina de vida o debido al interés de imponer o manipular las ideas y opiniones.
Siempre existe la sombra de los mentalismos en las recepcio¬nes, en tanto, no tomemos conciencia, de que la posibilidad de cometer errores es algo latente y potencial en nosotros. Estar atentos y observadores nos librará de los peligros que esto trae consigo.
Se necesita voluntad para seguir, y madurez para extraer las enseñanzas de todo esto.
La Biblia fue escrita por hombres, y por ello está cargada de mentalismos, sin negar desde ya, su riqueza espiritual que ha iluminado la vida de tantas personas. Estos mentalismos han permanecido en los textos sagrados sin que con el paso de los siglos nadie se atreviese a cuestionarlos ó cayendo en los extremos, al hacerlo con vehemencia y de manera destructiva se ha caído en excesos de tensión, discrepancias, divisiones, dis¬torsiones con respecto a las enseñanzas originales. También se ha dado el caso de que por querer justificar lo injustificable, entender lo incoherente y explicar lo absurdo, se ha llegado a explicaciones ingeniosas y forzadas.
Todo mentalismo adolece de defectos que lo podrían hacer fácilmente reconocible si existe la ecuanimidad, objetividad y criterio necesario para cuestionar lo humano que contamina las cosas espirituales y sagradas.
Generalmente el mentalismo es la contradicción de la filo¬sofía profunda del plan cósmico basado en el amor. Todo lo que atenta contra el amor y la justicia, no puede provenir de las mismas entidades generadoras de enseñanzas de comprensión, respeto y tolerancia máximas; por igual, aquello que procura el beneficio personal de alguien, o que explota la alabanza o el desprecio hacia otros, descarta la posible realidad de aquellos mensajes. -¿Todo lo negativo es producto del juego de nuestra mente egoísta?
-¡No!... no todo lo es, ustedes están sometidos a acechanzas de fuerzas igualmente superiores polarizadas hacia lo negativo y destructivo, estas fuerzas son las que muchas veces les ponen las trampas para destruirles y desviarles del camino correcto de la evolución y la conciencia, porque ellos y los que están detrás de ellos les temen.
La hermandad oscura ataca a través de los bajos astrales, que son entidades reclutadas entre aquellos seres humanos que se han dejado arrastrar por sus bajas pasiones e instintos, y que se han quedado atrapados en el mundo astral por su condición extrema-damente densa; también se incluye en éste contingente de esbirros, a otros seres creados por la Hermandad negativa.
Este poder siniestro que gobierna en la Tierra sabe bien que el hombre tiene la llave, aunque éste no recuerde que la posee ni de qué llave se trata. Hace lo imposible entonces por mantener la ignorancia y la inconsciencia, aunque ya hay quienes se están acercando (peligrosamente para el caos instituido) a las puertas del umbral.
La llave - como ya se te explicó antes - es la cruz, pero no como símbolo de muerte sino de la vida; es el equilibrio y el ascenso voluntariamente asumido. Es el riesgo de amor hasta el sacrificio, muriendo para renacer inmediatamente. La muerte ya a entiendes como renovación y trascendencia.
La puerta que es tu misión cósmica necesita del autoconocimiento, y del valor para asumir la llamada muerte mística del ego.
- Perdone que vuelva a la pregunta que hice hace un rato, pero me podría decir: ¿Quién o qué era Yahveh o Jehová.?
- ¡Quiénes eran, preguntas... Las dos palabras representan a la misma acción realizada por un grupo de entidades provenientes de la Constelación de Tauro, pertenecientes a la quinta dimen¬sión.
- ¿Cómo se explica tanta agresividad e intolerancia en la Biblia?
- Dicha agresividad e intolerancia es propia del hombre en la Tierra, sujeto a la influencia de su inestable planeta, así como por la acción de fuerzas que al no poderlas controlar lo dominan. También se da el que muchas veces se quieren identificar estas actitudes en quienes ustedes asocian con la divinidad para entrar en el terreno de la justificación de acciones; pero ello no es así. Hay palabras y actitudes que se ponen en boca de Yahvé que nunca fueron dichas ni hechas así.
El hombre ya te lo dijimos antes -, crea sus dioses a imagen y semejanza de sus propias debilidades; y al final termina él, destruido por la traición y descuido progresivo de los valores.
Pero al verdadero Dios no lo ve, no lo llega a apreciar ni sentir; evita más bien el sentirlo y enfrentarlo, pues teme verse envuelto en su amor que lo obligaría a cambiar.
Las enseñanzas fueron dadas por los mayores, venidos desde tiempos inmemoriales que las transmitieron, y por los que las recepcionaron como herederos de los llamados profetas inicia¬les. Con el tiempo el conocimiento se iba diluyendo, sustrayén¬dose sistemáticamente la luz de las fuentes mismas, en beneficio de constituir y luego mantener una casta élite de privilegiados sacerdotes quienes en vez de continuar su nexo con las esferas superiores y la divinidad, acercando los hombres a la conciencia de su trascendencia, se constituyeron en estorbo y bloqueo de toda relación consigo mismos y los demás.
- Pero no se puede generalizar. Hay religiones muy positivas y muchos religiosos ejemplares y admirables.
- Ciertamente toda generalización es injusta, y hay buenos hombres y mujeres trabajando por la luz y el amor en todas las religiones y fuera de ellas también, existiendo una interrelación entre ellos al nivel de la Gran Fraternidad Blanca. Y gracias a ellos el mundo aún existe, pues sus oraciones, pensamientos y acciones han creado condiciones de positiva esperanza.
Las estructuras formales de las religiones vienen cayendo una tras otra en el juego de quienes realmente dominan el mundo, éstas deberán cambiar hasta romper las barreras y estructuras rígidas que han venido limitando la espontánea espiritualidad, hasta constituir una única gran religión, la del Amor y la Paz.
La única religión que habrá aprendido a no desunir sino más bien integrar a toda la creación.
- ¿Se puede hablar realmente de una historia sagrada?
- La vida de los seres es de por sí sagrada, y en consecuencia su historia que refleja la búsqueda parar llegar a reconectarse conscientemente con su Creador, lo es.
La historia de la interrelación cósmica operada en la Tierra viene desde mucho antes de que hubiese vida sobra la faz del mundo, y ha continuado incrementándose esa relación a medida que las condiciones han sido propicias, hasta llegar a una conexión directa a lo largo del desarrollo de la civilización, pero procurando evitar crear dependencias. Así tenemos el ejemplo del proyecto sumerio, el Egipcio, El Hebreo, El Olmeca, El Maya, El Tiahuanaco, Chimú, Azteca, Inca entre otros.
- ¿Si han existido tantos proyectos o experimentos, dónde queda aquello del pueblo escogido?
- La Tierra y la humanidad han sido seleccionadas pero no así un pueblo. El caso de Israel no es el del pueblo elegido, sino más bien, en un principio, una selección individual y relación directa con la persona de Abraham.
Es el típico caso de alguien programado y escogido con base a sus aptitudes para canalizar parte del Plan Cósmico en su versión terrestre y programar a su vez a su descendencia, perpetuando sus cualidades de inteligencia y guía.
- Voy comprendiendo... Abraham pertenecía a un clan semita instalado en Siria y a una familia que emigró hacia Ur de los Caldeos.
¿Pero, qué tan especial podía ser la persona de Abraham?
- Alguien fuera de serie como dirían ustedes. Un ser especial preparado en anteriores reencarnaciones sin perder la humildad de quien es necesario para las grandes tareas; era un antena por antonomasia, que supo canalizar conceptos, y hacerlos suyos a pesar de ser demasiado avanzados para su época, algunos de los cuales se cuentan hoy entre las concepciones de vanguardia, en materia de teología en la Tierra. Por ejemplo: el concepto recibido y transmitido por Abraham a su parentela sobre la existencia de un solo Dios, espiritual, invisible, sin apariencia alguna, incomprensible e inabarcable frente a tantos otros dioses conocidos de aquel tiempo que eran adorados en colosales templos.
- Sí, templos dedicados a Astartés, Moloc, Marduk, Bal, Ptah, Osiris, Horus, etc.
Centros religiosos que por su estructura y la de sus descomu¬nales y monstruosas estatuas invitaban a traducir miedo en devoción.
Mi mente se transportó a los conocimientos que tenía refun¬didos en mí, cuando estudiaba historia, tratando de recrear la ambientación que envolvió la vida del patriarca bíblico para entender el proceso que se me estaba explicando.
Resulta ser que 3.000 años antes de Cristo, los semitas emigran de Arabia Saudita debido a cambios climáticos opera¬dos en la zona, instalándose una serie de clanes a lo largo de la media luna fértil que iba desde Canaán hasta Caldea. La familia de Abraham era uno de dichos clanes, el cual se instaló en lo que hoy corresponde a Siria, en la región de Arampadam en el pueblo de Haram. Posteriormente Teraj padre de Abraham (que era el nombre original de Abraham), emigra hacia Ur de los Caldeos, metrópoli de aquel entonces, en donde Abraham tendrá contacto con las imágenes bíblicas del Génesis, en versiones bastante distorsionadas propias del tiempo y de la herencia recibida por los Caldeos de los Sumerios y Acadios.
Más tarde llegará a tener contacto directo con ángeles o extraterrestres según la concepción de aquel tiempo, gracias a su sensibilidad y apertura mental. Este contacto le pondrá en ante¬cedentes sobre una versión más cercana al relato original y a los acontecimientos. Así por ejemplo el Noé Bíblico no se detendría en el Monte Nisir en el Kurdistán, según la versión de la Epopeya de Gilgamesh, sino que terminaría por aparcar su arca en el Monte Ararat en Armenia, en la frontera entre Turquía y la Unión Soviética.
Una quiebra "económica" que es mencionada en el Talmud en forma anecdótica, llevó a Teraj a regresar a Haram, en donde a su muerte, su hijo es conectado para que se desplace hacia Canaán; zona programada para llevar a cabo algo...
- Un plan de actualización del despertar de la conciencia humana. -Ahora entiendo.... Abraham se instalaba en Canaán entre pueblos pequeños, comprando tierras y siendo acogido con sincero aprecio por la gente del lugar. Pero rápidamente estable¬ce distancias en cuanto al comportamiento de las tribus locales, por cuanto las costumbres incluían sacrificios humanos en lo alto de los montes.
- Esa sangre derramada alimentaba energéticamente a la Jerarquía Negativa y aumentaba el Karma colectivo de la zona condenándola a acontecimientos nefastos futuros.
Permíteme terminar tu historia... con el tiempo los mensajeros extraterrestres le anuncian que va a tener un hijo y que Sodoma y Gomorra, ciudades donde habita su sobrino Lot serían destruidas.
¿Por qué destruyeron Sodoma y Gomorra? ¿Cómo pueden hablar de amor cuando se prestan a exterminar pueblos ente¬ros?... !
- Ustedes tienen un equivocado concepto del amor y del respeto a la vida. Ponen grandes reparos en sancionar la maldad en alguien, pero no ponen reparo en aplastar un insecto por puro gusto, matar un ave por placer, coleccionar cabezas de animales en una sala, extinguir especies por deporte o por establecer una nueva moda. Sus "leyes" muy "humanas" están permitiendo que se extienda la semilla del mal en la Tierra, siendo benévolos con él, poderosos e inflexibles con el débil.
Entre nosotros existe una visión más equitativa y práctica de la justicia, basada en las leyes y principios universales. De acuerdo con esto, una vida o muchas pueden ser canceladas sólo si es estrictamente necesario para proteger el bien común, y en estricta defensa del orden y la libertad de la mayoría.
- ¡Me sorprende tanta frialdad!
- A nosotros nos sorprende tanta hipocresía en la Tierra, sólo se explica en la existencia de intereses creados. Nadie podría amputarse un dedo de la mano sin los dolores que esto supone y la tristeza que de ello deriva; primero por el dolor en sí y segundo, por quedarse sin un dedo; pero si en ello está involu¬crado el que pueda perder la mano, el brazo o la misma vida.... Es cuestión de sentido común.
Cuando se conocen las leyes universales se puede actuar con justicia sin remordimiento alguno, en cuanto hay que aplicar una limpieza en función de un plan mayor.
- ¿Y cuál fue ese plan mayor?
- Canaán había sido seleccionado para colocar allí a la persona de Abraham para que allí se multiplicaran sus cualidades de guía espiritual a través de su descendencia. Esto porque Canaán es como bien lo sabes, un puente natural entre Asia y África; un lugar de paso a través del cual, muchos pueblos se movilizarían y debían ser influenciados ideológicamente, durante su tránsito.
- Entiendo, es como cuando alguien quiere anunciar un producto o vender una revista, procura hacerlo en aquellos lugares de mayor concentración de gentes, como en un aero¬puerto o una estación de buses. ¿Canaán era algo así? ¡Un punto de encuentro!
- Ciertamente, y en cuanto a lo de Sodoma y Gomorra, no se podía permitir que aquel lugar se contaminara vibratoriamente con la degeneración.
- ¿Y quién habría sido Noé?
- Hay la suma de dos relatos distintos en el tiempo y en el espacio que se confunden alrededor de la persona de Noé o Ushnpitztin. Uno, era un sobreviviente atlante de la gran heca¬tombe que sumió a Poseidonis bajo la terrible violencia de las olas en el fondo del Atlántico, quien se dirigió a través de las columnas de Hércules (el estrecho de Gibraltar), hacia el mar Mediterráneo. El otro personaje es un patriarca que logró atraer la atención sobre sí de los Directores del Plan, luego de reorga¬nizar a grupos humanos, después de gravísimas inundaciones que acaecieron en Mesopotamia hace unos seis mil años.
Ambos acontecimientos distantes entre sí fueron causados por el mismo cuerpo celeste errante.
En una oportunidad anterior, ustedes me explicaron acerca de lo que se menciona en la Biblia en lo relativo al paraíso, como que todo ello había sido parte de un experimento cósmico a cargo de siete entidades llamadas los Elohim (nosotros ó los dioses según algunos traductores). Me interesaría conocer la versión completa del asunto, si fuese posible.
-Bien sabes que la Vía láctea como ustedes la llaman es una gran galaxia del tipo espiral y que posee más de 400.000 millones de estrellas. Ella gira sobre sí misma y se desplaza en él cosmos.
Esta galaxia es una, en millones de similares, y orbita junto con otras alrededor de una principal que los científicos de la Tierra han identificado con el nombre de Andrómeda ó M-31. Esta galaxia principal con sus satélites ustedes la conocen como el grupo local, nosotros como el universo local.
La Vía Láctea posee un gobierno compuesto por 24 entidades llamadas los 24 ancianos de la galaxia, pertenecientes a una sexta dimensión que constituye la regencia sobre todas las civilizaciones que en este cúmulo estelar, posee la capacidad de ayudarse y ayudar a otros que están en vías de evolución. No representan a civilizaciones específicas sino a la evolución misma.
Así como la Vía Láctea tiene su consejo, así también el centro del Universo local tiene su gobierno, llamado el Consejo de los 9 de Andrómeda, en el que las galaxias circundantes poseen representación, incluyendo los 24 ancianos. Esta fraternidad existente entre quienes han asumido roles gubernamentales se conoce como "la gran Hermandad Blanca de la Estrella", sim¬bolizada por la estrella de seis puntas símbolo de la ley de correspondencia.
Existe también una jerarquía que está por debajo de los 24 ancianos compuesta por: Ingenieros Genéticos o Sembradores de Vida, llamados también los Elohim; les siguen a continuación los Guardianes y Vigilantes, y finalmente los instructores ó guías.
Los sistemas solares como comprenderás sobre pueblan una galaxia, la mayoría de ellos está conformado, por dos estrellas y sus respectivos planetas...
-¡Son binarios!- Acoté vanidosamente como si mi aporte fuese importante. -Exactamente, y también los hay de una estrella como el de ustedes. Es ésta clase de sistemas -los de una sola estrella-, los escogidos para realizar en ellos, experimentos para mejoramiento de la vida en el universo conocido. Pero sólo uno, de cada diez sistemas como el tuyo, y uno, de cada diez planetas, es seleccionado para algo mayor. - ¿Somos realmente un experimento?.
-Más bien, un "proyecto". El mismo que ha estado sujeto a múltiples interrupciones, eventualidades diversas, modificacio¬nes sobre la marcha y adaptaciones de último minuto.
-¿Un proyecto de quién y para qué? ¿Acaso de Ustedes? -¡No!, no somos nosotros tan conscientes, como pasa concebir tal clase de iniciativas; pero sí tenemos la capacidad para ejecutarlas y llevar a cabo proyectos de tal naturaleza. Existen autoridades de otras dimensiones y otros universos, que disponen el lugar, el momento y las condiciones para actuar. Ellos son los que saben el por qué profundo.
Pronto sabrán de quien realmente procede el programa, y el por qué y para qué de todo el drama humano.
-¡¿Es entonces un drama?!....
-Tiene de todo, pero de lo que más posee es de Poema Épico... Pero déjame continuar y volver al punto de tu pregunta sobre el relato original.
Los 24 ancianos designaron a 7 seres, como responsables de la aparición material de la primera humanidad nativa del Planeta Tierra. Ya hemos hablado antes, de una primera humanidad de origen foráneo como fue la Antártida, a ésta se le sumarían otras más que vendrían a dar su aporte.
Cuando fue dispuesto el gran proyecto Tierra, modificación de vida y sistemas operativos de enseñanza, tu planeta era aún una masa informe de fuego con resquebrajadas costras de lava fundida enfriándose, flotando sobre un mar ígneo. No había aún ningún ser viviente.
Desde la que conocen como la constelación del Cisne, llegó el primer grupo de exploradores, investigadores y analistas científicos, los cuales se instalaron mucho tiempo después en una Tierra que dejaba vislumbrar tímidamente las primeras masas de líquido. Habitaron ellos, los océanos primigenios. Ellos se marcharon luego que su intervención aceleró los proce¬sos naturales para la aparición de la vida. A éstos les siguieron los primeros colonos extraterrestres, los cuales se instalaron en la zona superior norte del planeta, por lo cual se les llamó; "Hi¬perbóreos" ( Hiper = superior; y boreal = norte). Esto ocurrió en lo que ustedes conocen como Era secundaria.
Siendo la Tierra un planeta muy inestable, y temiéndose un accidente Cósmico por impacto de un cuerpo celeste, aquellos humanos instalados en estas colonias y cuyo centro o capital fue llamado Tule ó Tollán, empezaron a emigrar, quedando muy pocos cuando se produjo aquel desastre que precipitó el cambio de Era y la muerte de la mayoría de los grandes saurios, modificando violentamente la geografía de aquella novel isla del océano cósmico.
Será durante el Terciario que llegan en forma definitiva los "Sembradores de Vida ó Ingenieros Genéticos", llamados los "Elohim". Venían a finiquitar el proyecto, pues anteriormente habían reparado la gran mortandad y depredación producida por el accidente estelar. La idea ahora, era apurar la aparición de elementos humanos propios del planeta, que pudieran modifi¬car poco a poco las condiciones operativas vigentes en el universo circundante, con la intención de beneficiar a la colec¬tividad de civilizaciones.
Las modificaciones, alternativas nuevas y disminución de la violencia natural del planeta serían controlables a partir del dominio que podrían desarrollar los mismos seres.
-¡¿El Mundo se hace más estable cuando más estables son sus habitantes?! - Sí, pero ello no descarta el efecto que produce en la dinámica del cambio generado por los seres voluntaria¬mente, los procesos naturales. Todo absolutamente está sujeto a modificación continua, pero controlable y previsible para los potenciales del ser humano.
Los siete Elohim se encargaron de llevar a cabo modificacio¬nes genéticas en Proto-homínido, antepasados del hombre, en lugar seleccionado para ello, al sur de África y un continente hoy fragmentado y en gran parte desaparecido, llamado la Lemuria. Allí una gran nave espacial descendió procurando crear las condiciones artificiales en un gran ambiente propicio para la experimentación, para la aparición del hombre. Era una nave invernadero que contenía plantas, insectos y animales de diver¬sos lugares para introducirlos aquí, y así incrementar la flora y fauna, con miras a hibridar y multiplicar las especies nativas.
Fueron varios los seres prehumanos incorporados al experi¬mento, y que fueron sometidos en una primera etapa a modifi¬caciones que procuraran una mayor adaptación a las exigencias del proyecto.
-¿No eran un Adán y una Eva?
-¡No! Eran varias parejas seleccionadas... Los Elohim tenían pensado adaptar una variedad de Andróginos al medio externo, por lo cual se experimentó con un primer grupo. Esto conseguiría la ventaja de que toda la energía sexual no estaría sujeta en un futuro a un desperdicio. Los seres sujetos al experimento podían controlar más sus pasiones, y más fácilmente podían desarro¬llarse en lo espiritual y trascendente.
-Es cierto que el sexo, la mayoría de las veces actúa como un freno o estorbo para un desarrollo superior. No por nada, los santos de la cristiandad y los yoguis de la india, preferían el celibato.
-Amado hermano, el sexo es en su realidad, la más maravi¬llosa experiencia de intercambio energético, y la mejor oportu¬nidad para brindar amor con desapego al intentar entregarse mutuamente.
El ambiente de sensualidad fomentado por las fuerzas oscuras en la civilización terrestre, procura contaminar lo sagrado, corromper lo natural y perder al hombre en el vórtice de sus pasiones desenfrenadas.
Todo lo que se lleve a cabo con control, con el uso de la voluntad bien canalizada de forma constructiva, y con real amor, es sagrado.
-Hoy en día se presentan muchas opciones para trabajar con la energía sexual. Hay quienes hablan de trasmutación sexual, otros celibato, etc.
¿Cuál de ellas sería la opción correcta?
-Nadie podrá alcanzar la realización espiritual por el sexo, pues éste es sólo uno de los aspectos de la vida, como lo son el dormir, el comer, el respirar, etc. Son las actitudes que cada cual mantenga de acuerdo al nivel de conciencia adquirido frente a todo lo que constituye el diario vivir, lo que le permitirá avanzar y realizarse.
La verdadera trasmutación de la energía sexual en energía psíquica y espiritual se consigue no dejando que sea el deseo egoísta el que gobierne el coito en la pareja; y en el caso de quienes son célibes voluntarios, asumiendo con alegría su re¬nuncia, y canalizando sus potenciales al servicio de la colecti¬vidad en el nombre del amor.
Cada ser es libre de manifestarse en este sentido, pero respe¬tando el derecho de los demás y respetando su propio templo interior. No hay que olvidar que en el acto sexual se halla inherente toda la fuerza de la creación, lo cual exige conciencia y respeto mutuo, por cuanto constituye una verdadera comunión sagrada.
Volviendo a los primeros seres del experimento, estos andró¬ginos podían hacer las veces de macho o hembra. Pero ésta fase del proyecto no prosperó pues como te dije antes eran demasiado delicados y débiles para lo agresivo del plano. Se decidió entonces dar marcha atrás. A través de operaciones quirúrgicas... -¡La famosa costilla de Adán!
-Sí, a través de dichas operaciones se restituyó el orden inicial y volvieron a ser machos unos y otras hembras definitivos y definidos.
Dentro de la nave laboratorio sus antepasados fueron reunidos y aleccionados sobre cuál habría de ser su comportamiento. Se les dijo en aquella ocasión: "De toda planta, de todo fruto o semilla podréis comer sin que ello os contamine, pero por ningún motivo probaréis de las plantas que se encuentran en el área reservada, porque aquellas especies de vegetales son plantas alucinógenas, las cuales podrían provocar a ustedes visiones y percepciones para las que no están preparados aún, e impedirían que en un futuro cercano, desarrollaran las facultades que les corresponden para dominar y controlar, aquello que va más allá de vuestros sentidos físicos. Además, consumir estas plantas traería consigo el deterioro de las neuronas (células cerebrales), iniciando un proceso irreversible de muerte y destrucción celu¬lar, que ni aún nosotros podríamos detener. Sus auras serían igualmente afectadas al quedar rasgadas y estarían a merced de entidades que siempre están al acecho...
Los Adanes y Evas aceptaron humildemente las restricciones, acatando las ordenanzas de los ingenieros genéticos. Pero uno de los Elohim, llamado "Gadriel", no estaba de acuerdo con las limitaciones del proyecto, además que fue influenciado por la entidad Lucifer. Buscó entonces reunir aparte a los terrestres y les dijo: "Probad de aquellas plantas, de las que se os recomendó guardar reserva. No hagáis caso a mis compañeros que son temerosos de que rápidamente podáis conseguir poder y conoci¬miento. Además, como avanzaría la ciencia sin la experimen¬tación".
-¿Es esa la Serpiente Antigua?
-El conocimiento no es malo, lo que es malo es ser inescru¬puloso, indisciplinado o irrespetuoso frente a los procesos dis¬puestos por jerarquías superiores. Así este ingeniero genético, transgredió el orden; se extralimitó y actuó egoístamente, con-virtiéndose...
-¡En una suerte de Dr. Frankestein!
-En una traba y primer tropiezo del género humano terrestre. -La serpiente es símbolo desde muy antiguo del conocimiento.
También se le vincula a la energía alojada en la base de la espina dorsal, que es la llamada a despertar los centro energéti¬cos (chakras), con la forma de una serpiente enroscada, llamada Kundalini. La energía llamada así puede ser despertada y con¬trolada a través de una preparación integral que incluye una vida equilibrada y metódica, que parte de ejercicios de respiración y continúa con una dieta alimenticia natural, gimnasia y medita¬ciones. Propiamente todo lo que había aprendido en la Yoga en 1973.
-¡Y lo aprendiste bien!. Mantén la constancia, es lo único que te falta.
-Volviendo al relato, quisiera preguntar: ¿Cómo un ser supe¬rior pudo caer en semejante tentación y a la vez seducir a quienes eran su responsabilidad?.
- Se vio influenciado por el medio en que actuaba y por aquel ser ultraterrestre del Universo Mental.
-¿La Tierra tiene malas influencias y fuerzas desbocadas? -¡No!, sólo que aquí las fuerzas de la naturaleza y la creación se hallan concentradas de tal manera que es comparable con un animal salvaje, que requiere ser domesticado. Si no aprenden a dominar las energías planetarias, estas terminarán por dominar¬los y quizás hasta destruirlos.
Y volviendo al relato te diré que tus antepasados consumieron de aquellas plantas, seducidos por la curiosidad, y allí se llevó a cabo la primera experiencia por consumo de drogas que registra tu historia.
-¡Quién lo hubiera dicho, ni manzanas, ni fruta, ni sexo!... ¡Eran alucinógenos!... La Biblia no estaba muy lejos del relato original, quizás lo que faltó fue un poco de imaginación para proyectarse a través de las figuras simbólicas. Obviamente el mito y la leyenda que llegaron hasta el pueblo hebreo, procedían originalmente de Sumeria, y no de una revelación Cuando los seis sembradores restantes se enteraron de lo ocurrido, pero no al detalle (no supieron inmediatamente que su compañero había boicoteado el proyecto), consideraron que la curiosidad del hombre era tan peligrosa que hasta podría poner en peligro la propia existencia de ellos.
Su trasgresión podría encumbrarlos hasta donde fueran prácticamente incontrolables, por lo que temiendo lo imprede¬cible, decidieron expulsarlos del invernadero y colocaron unos robots cuidando la zona reservada del laboratorio-invernadero. -¡¿Los querubines con espadas de fuego?!
-Tú lo dices... Al salir al exterior se dieron cuenta de que no eran los únicos sobre la Tierra y se mezclaron.
- Entiendo, a ello es lo que se refieren los libros sagrados cuando hablan de que Caín huyó hacia el país de Nod, límite con Edén donde halló a su mujer con la que se desposó.
Pero, ¿qué significado tiene el episodio de Caín y Abel? -La lucha entre los primitivos pueblos agricultores y los pastores, que va a marcar la historia de tu mundo.
-¿Y qué pasó con Gadriel, quien fuera el organizador de todo el desbarajuste?
- Cuando los seis Elohim se enteraron de la acción de su compañero, decidieron llevar a cabo una sanción, que consistió en dejarlo aquí en el planeta; convirtiéndose en el primer caso de deportado que ustedes conozcan.
-¿Y cuánto tiempo permaneció aquí?
-Algún tiempo, hasta que los Elohim regresaron para reco¬gerlo y evaluar cómo había seguido el proceso humano terrestre. Los experimentadores habían perdido el control sobre el experi¬mento, por lo que éste seguía su dinámica propia.
-Ustedes me hablaron de mentalismos en la Biblia, ¿me podrían especificar algunos?
-Recordarás lo que veníamos hablando acerca de Abraham y de como su esposa Sara por medio del cuidado y regeneración de órganos por parte de los visitantes, (los tres ángeles del encinar de Mambré en Hebrón), pudo concebir a Isaac el hijo de la promesa. Bueno, resulta ser que Abraham se sintió influenciado por los cultos locales de los cananeos, quienes sacrificaban a sus dioses, sus hijos primogénitos en lo alto de los montes; y sintió la necesidad de probarse a sí mismo, hasta qué punto es capaz de amar a su Dios que él sabe, que es el verdadero. No hablamos aquí de un Dios extraterrestre sino del verdadero Padre Universal al que Abraham tuvo acceso por fe, y se le fue corroborando a través de su contacto.
Abraham creyó escuchar que en aquel momento se le pedía que demostrara su amor y su fe sacrificando a Isaac. Librándose internamente una batalla en la que no se descarta la influencia de las fuerzas negativas, que siempre acechan la vida de las perso¬nas que pueden influenciar positivamente a un amplio colectivo.
En el monte Moria, Abraham prepara el holocausto de su hijo, hasta que aparece una canépla o visor electrónico de las naves, y allí es reprendido y comprende que ese sacrificio no es necesario.
-Pero sí hubo un sacrificio, el de un animalito!
-Hay que ponerse en la mentalidad de aquellos hombres, hace 4.000 años.
La forma que ellos tenían de entender su relación con la divinidad, seguía los patrones de su vida diaria. El sacrificio era un presente.
Con la persona de Abraham y su descendencia, no se quiso crear una élite de gentes o un pueblo diferente, mejor que el resto sino más bien un grupo humano programado para el servicio a los demás; conscientes de su misión, de ser sabios guías espirituales y ejemplos de vida, como sacerdotes de la humanidad. Pero como se hizo caso omiso a las recomendaciones de mantener la pureza de la sangre, la programación genética empezó a sufrir distorsiones y con el tiempo el mensaje trasmitido sobre la base de actitudes, perdió la fuerza de su universalismo, desuniendo a los hombres, alentando mayores diferencias y elitismos.
-¿Y qué pasó con los 40 años en el desierto con Moisés? ¿Acaso no era injusto castigar a todo un pueblo a vagar por el desierto casi medio siglo?
-La cuarentena era necesaria, porque después de 400 años de esclavitud y cautiverio, el pueblo de Israel se había acostumbra¬do a vivir sin libertad. Los cuarenta años representan la oportu¬nidad para que aislados nacieran generaciones de personas libres que amaran la libertad y no desearan volver a la esclavitud de Egipto. La idea era que el pueblo aprendiera a organizarse y desarrollara su propia identidad. Recuerda que las condiciones no eran las mismas, cuando salieron Jacob y sus hijos de Canaán, eran un grupo de 60 a 80 personas, y volvieron casi 600.000 personas. El panorama era diferente, pues los pueblos cananeos ya no eran pequeños grupos aislados y primitivos, se habían organizado y crecido en torno a ciudades fortificadas.
-En la Biblia se mencionan castigos para el comportamiento humano, que son muy violentos. También se habla de la ley del Talión, ¿qué me pueden aclarar al respecto?.
-La Ley del Talión es la misma ley cósmica de Causa-Efecto. Refleja esta ley que todo en el universo es orden, por lo que cada cual cosecha lo que ha sembrado en actos, pensamientos y omisiones.
Moisés en lo alto del Horeb en el Sinaí, recibía "sugerencias" reveladas de lo alto por hermanos de las pléyades asignados en esa misión. Luego las retransmitía a Aarón -su hermano-, quien se las hacía llegar al pueblo a manera de imposiciones, para que la gente cambiara sus hábitos y aceptara nuevas y básicas reglas de conducta, higiene y convivencia.
Moisés, educado en Egipto como un príncipe e iniciado en conocimientos ocultos, entendía el mensaje a su manera, expre¬sándolo así a su hermano quien lo interpretaba de acuerdo a sus concepciones hebreas, y se lo informaba a la gente como consideraba mejor, distorsionándose en mucho el mensaje ori¬ginal.
-Aarón se las ingeniaba en complicar las cosas!..., le metía miedo a la gente, como muchos sacerdotes que en la actualidad apelan a la habilidad de intimidar con supuestos castigos divi¬nos, para que la gente acepte cosas sin discernimiento; para que no piensen ni cuestionen su fe en el orden a establecerse. Recuer¬do por lo leído, que Aarón ya tenía sus malos antecedentes cuando no pensó dos veces (ante la presión colectiva) en hacerles un becerro de oro para que la gente lo adorara.
¿Y ese iba ha ser el sumo sacerdote, representante del clero hebreo? -Comenté bastante contrariado.
-Aquello que entorpece y embrutece al hombre es el miedo.
Por miedo o por coacción no se puede alcanzar realizaciones trascendentales.
-Acabo de recordar que en la Biblia se relata acerca de una revelación sobre reglamentaciones sanitarias entre las que se incluía lo novedoso de lavarse las manos antes de comer. Todo ello sugerido, como bien dices, habría sido impuesto por quienes actuaban de intermediarios del mensaje.
¡Qué forma de complicarnos la vida, y dificultar lo sencillo! - Evitar las bacterias para impedir la disentería y la colitis, así como diversas enfermedades e infecciones que proceden de la insalubridad, y que allí en el desierto habrían sido fatales; recomendaciones que fueron mal interpretadas o por falta de cultura, omitidas y transformadas en rituales sin sentido ni explicación coherente.
- Recuerdo en un pasaje evangélico interrumpí yo nuevamen¬te, que los fariseos criticaron a Jesús porque los apóstoles no se lavaban las manos a la hora de comer, y él mismo les contesta "Ustedes enseñan como mandamientos de Dios los preceptos de los hombres".
Ahora me doy cuenta de cómo la falta de entendimiento de la gente había llevado a que por no poder explicarles las razones fundamentales de cada cosa, se omitieran dichas explicaciones, y se las impusieran como órdenes; o quizás se menospreció la capacidad de la población de entender razones y hubo quienes se guardaron las razones profundas para sí de forma egoísta, como si ese conocimiento fuera el sustento de un nuevo Status.
Las enseñanzas impuestas como órdenes crearían nuevos hábitos a manera de una forzada disciplina interior sin concien¬cia. Esto sólo originaría el que muchas cosas fueran adulteradas con el paso del tiempo y se convirtieran en tradiciones y rituales.
Quisiera recapitular para verificar si entendí bien, cuanto me han informado: resulta ser entonces que Israel no supone la idea de crear un pueblo diferente' sino crear genéticamente una comunidad de seres que pudieran ser guías espirituales. Y que Canaán como zona programada, pre-establecida, era el lugar indicado para que desde allí se centrara la difusión de un mensaje de cambio espiritual y de esperanza.
- Y no te olvides que los seres de las Pléyades que intervinieron durante todo el Éxodo nunca patrocinaron campañas milita¬res, aunque no descuidaron el ayudar al pueblo cuando se, encontraba en apuros o en momentos de grandes decisiones. La sugerencia de ellos fue siempre evitar los conflictos directos a tal punto que si analizas la historia, verás que se dieron grandes rodeos para evitar las más importantes plazas fuertes de la época. En todo momento se rehuyó la lucha directa y en campo abierto. Pero cuando no hubo más remedio se trató de fortalecer su moral para que no desaparecieran en manos de otros.
Tuvimos tema para rato, pues fueron dos horas muy bien aprovechadas. De pronto ante una señal de los que estaban en los paneles. Oxmalc que permanecía a mi lado, me tocó el hombro pidiéndome en voz baja que lo siguiera. Al ver mi retraso insistió que me levantara, por lo que le conteste:
- ¡No puedo, estoy atrapado por el asiento!
Me volvió a repetir que me levantara, que hiciera el intento de imaginarme que estaba parado. Lo hice, y cual no sería mi sorpresa al abrir los ojos, de hallarme parado sin que hubiese hecho esfuerzo alguno ni sintiera mayor movimiento. Las pier¬nas me funcionaban bien, y no sentía adormecimiento alguno, pero sí un peso caliente que bajó súbitamente de la cintura a los pies, para luego sentirme perfectamente normal.
Fuimos caminando hacia la pared lisa al frente de la puerta de ingreso a la habitación hexagonal, de pronto se abrió la pared dejando apreciar un pequeño corredor de unos tres metros de largo, que se iba estrechando, y terminaba en un semicírculo de ventanillas amplias con un escritorio al pié.
Se acercó primero el guía, extrayendo de debajo del escritorio dos sillas de las ya conocidas. El se sentó y me dijo que me sentara a su lado. A continuación escuchamos el ruido del motor de un funicular, a continuación un sonido muy agudo que me sorprendió. Sentí algo de temor y miré hacia afuera, contem¬plando las paredes del hangar conformadas por hexágonos de aluminio. De pronto las paredes empezaron a abrirse y la nave se fue desplazando hacia afuera, hallándonos rápidamente en espacio abierto, impresionándome la observación de un abismo insondable de profunda oscuridad.
Me encontraba absorto en las impresiones y sensaciones, cuando observé por el rabillo del ojo derecho las escenas más increíbles y emocionantes de mi vida. Allí delante de mí iba asomándose la visión espectacular de dos lunas que Oxmalc me confirmó eran de Júpiter. Una era de un color ocre rojizo con manchas como cráteres de un tono arcilloso y con intensas capas de color blanco azulino brillante, era Ganímedes o Morlen. La otra, más pequeña y a la distancia, se apreciaba de un color rojizo anaranjado.
Estaba atento a la observación cuando sentí una ligera presión sobre el rostro y las manos, algo de calor, como producto de la cercanía a los campos gravitacionales. Se produjo allí un brusco movimiento hacia la izquierda, quedando la imagen de Ganímedes sobre la parte superior derecha de las ventanillas. Pero me daba cuenta de que la mayor parte de la impresión se percibía visualmente, pues dentro de la nave no se percibían los movi¬mientos.
Fuimos acercándonos a una velocidad vertiginosa, descendien¬do sobre la superficie accidentada de aquella luna; y estando ya muy cerca se desaceleró la nave aterrizando tan suavemente que se hacían imperceptibles los desplazamientos si uno cerraba los ojos.
El contacto con el suelo fue extraordinariamente suave. Cuando habíamos estado descendiendo vi cómo la curvatura de Morlen se perfilaba, destacándose debajo de nosotros, montañas bajas en pequeñas cadenas.
Y a lo lejos, masas de hielo y cráteres, con un cañón profundo de donde se veía que provenían reflejos de luces y destellos. Mire a mi compañero de al lado, quien había estado al parecer evaluando todas mis reacciones; entonces él me dijo:
- ¿Sí, allí se encuentra una de nuestras ciudades. Las ciudades están alejadas unas de otras, pero permanecen unidas en un solo espíritu y mente.
Cada una guarda autonomía propia, y están tan bien organi¬zadas, que cada una sin competir con las otras, aporta lo mejor de sí.
El aterrizaje se produjo sobre un lugar marcado en una extensa llanura de color marrón, destacándose una gran punta de flecha o triángulo que me hizo recordar de inmediato las figuras existentes en Nazca al Sur del Perú.
La última vez que vi el cielo desde las ventanillas de la nave, observé su forma exterior, la cual parecía una aspiradora anti¬gua, con luces en los extremos.
Ya en el suelo me sobrevinieron una serie de sensaciones propias del nerviosismo, como fueron sentir un nudo en la garganta y mariposas en el estómago. Me imaginaba las cosas que allí me esperaban. Observé mi reloj sacándolo de debajo de la manga y vi que marcaba solo tres horas desde nuestra salida de Chilca.
Oxmalc me pidió que me levantara y le acompañara de retorno por el pasadizo, al salón hexagonal. Allí observé cómo los otros compañeros del extraterrestre guardaban los tubitos de vidrio debajo de los paneles y escritorios. Luego todos se reunían sobre el lado derecho de la habitación, atravesando una puerta descorrida, paralela a la que comunicaba con el punto de ingreso a la nave por el haz de luz.
Ingresamos juntos en un pequeño cuarto rectangular, cerrán¬dose la puerta detrás de nosotros, quedando unos segundos allí, mientras éramos irradiados por luces rojas y azules que salían del zócalo, luego se abrió una compuerta y apareció una rampa extendida hacia adelante que llegaba hasta el suelo. Bajando por ella percibí la atmósfera exterior un poco pesada, como si me faltara oxígeno.
Sabía que allí en Morlen no había una atmósfera respirable, pues las grandes masas de gas metano lo impide; pero también sabía que los guías habían acondicionado a través de la tecnolo¬gía y de su poder psíquico, atmósferas artificiales sobre sus ciudades muchas de las cuales se extienden en forma subterrá¬nea, ellos no necesitan de grandes cúpulas de cristal o plástico para impedir que los gases se escapen, ni para cuidarse de meteoritos, basta según ellos de un gran poder mental colectivo positivo. Hasta el clima puede ser alterado por los estados mentales, me dijeron ellos.
A mis espaldas, y ocupando unas veinte veces el firmamento con relación al Sol como se ve en la Tierra, aparecía Júpiter el planeta gigante; la segunda estrella de nuestro sistema que nunca llegó a ser. Lo veía como un espejismo de colores y manchas no definidas. Al frente mío se veían muy pocas estrellas, y me puse a buscar entre ellas, a la Tierra, cuando en ese momento Oxmalc se me acercó y me mostró con su mano estirada una luminaria pequeña de un brillo azulino, diciéndome:
- ¡Esa es la Tierra!
La sensación que se produjo en mi interior fue indescriptible. Me sobrecogió una extraña y profunda melancolía. Me fije que hacia la izquierda, al borde de una cadena montañosa, se veía una estructura trapezoidal a manera de pirámide trunca. Oxmalc me explicó que eso era la sede de los Doce Menores de Morlen, el Consejo y gobierno de las Colonias; y que se encontraban allí, pendientes de la colonia terrestre, ya que la ciudad era la ciudad "Confraternidad", donde se hallan cerca de 12.000 personas extraídas de la Tierra en los últimos 300 años, evacuados algunos por su voluntad, otros rescatados de pasos dimensiónales que los atraparon, como es el caso de el " triángulo de las Bermudas", y algunos hasta rescatados de las manos de civilizaciones extrate¬rrestres que tomaron gente con fines de investigación o manipu¬lación.
- ¿Cómo son y qué buscan aquellas civilizaciones no positi¬vas?
- Hay de todo en el Universo, y algunos pocos planetas tecnológicamente avanzados, no han podido superar sus ambi¬ciones expansionistas y otros con un interés científico puro e inescrupuloso, que les ha llevado a extraer no sólo muestras de planetas como la Tierra, sino también animales y seres humanos para sus propios fines. En la actualidad, como ya te hemos informado, tu mundo esta protegido por rola cuarentena de aislamiento establecida por la confederación de Mundos de la Galaxia, en la que no cualquier civilización puede actuar ni intervenir.
- ¿Y qué me puede decir de aquellos que se perdieron en el Triángulo de las Bermudas, y ahora están con ustedes? Pregunté mientras íbamos caminando por una amplia vereda en la llanura, acercándonos hacia el cañón.
- Como bien sabes, en la Tierra se abren puertas dimensiónales, umbrales en el espacio tiempo de manera natural, similares a los Xendras. En la actualidad esos vórtices se han multi¬plicado en el planeta, siendo siempre más conocido, el que se encuentra entre las Bermudas, Puerto Rico y la Florida, zona donde el índice de desapariciones es mayor por un mayor tráfico marítimo y aéreo.
- ¡Exactamente pero si vieras, el ser humano por la misma potencialidad psíquica que posee, puede abrir y cerrar éstas y otras puertas dimensiónales. Los niños muy pequeños de tu mundo así como adolescentes en plena pubertad, liberan y canalizan tal cantidad de energía psíquica que logran abrir pasos entre las dimensiones corriendo el riesgo de perderse en ellos.
¡Quiere decir que aquellas personas que han desaparecido en el mundo no necesariamente habrían sido secuestradas, asesi¬nadas o fugadas de sus hogares sino que podrían simplemente haber cruzado un umbral!?
Estarían atrapados en puertas generadas por ellos mismos! ....¬O por sus compañeritos de juego...
¡Esto es increíble!.... ¿Y los gobiernos saben algo de todo esto? ¿Han hecho algo al respecto?
- Los Estados Unidos como nación poderosa del mundo han seguido experimentando con puertas dimensiónales desde su famoso Proyecto Philadelfia (5),
(5) En 1988 se cumplieron los 45 años del Proyecto Philadelfia, y con motivo de una rueda de prensa los periodistas bastante inquisitivos consiguieron que el presidente Ronald Reagan confesara que éste experimento había sido real.
Como se recordará, por las múltiples informaciones filtradas, éste proyecto consistió en la creación de campos magnéticos envolventes en una barco de la armada norteamericana recién salido de los astilleros llamado el U. S. Elrich. En el año de 1943 se iban a instalar dos potentes generadores uno en la proa y otra en la popa de la embarcación; para activarlos después y procurar hacer desaparecer el barco no solo a la vista y paciencia de los demás navíos de la Marina sino también hacerlo esfumarse de las pantallas del radar.
El proyecto tuvo un éxito inicial que superó las expectativas, y cuando el barco volvió a aparecer, la tripulación registró el desastre de cuerpos quemados por radiación; individuos que seguían apareciendo y desapareciendo intermitentemente hasta volverse locos. A nadie de esta tripulación se le permitió retornar a sus hogares; y a pesar de lo terrible de los acontecimientos, el gobierno norteamericano continuó investigando y experimentando los pasos dimensiónales.
En la actualidad, el cerro del Yunque en Puerto Rico, es un área reservada para sus fuerzas militares, han seguido desarro¬llando dicho proyecto con la intención de lograr viajes a través del tiempo y del espacio. Esto como es natural, ellos lo mantie¬nen en un secreto riguroso.
- ¡Cómo muchas cosas!... Pero, ¿Por qué no devuelven a las personas que se pierden en el triángulo?
- Hay bases en el mar, cerca de Puerto Rico de donde salen las naves que en momentos de peligro, realizan los rescates.
-¡Cómo salvavidas en una playa de verano ¡
- No siempre estas puertas dimensiónales están abiertas; generalmente dependen de la concentración de energía electro¬magnética en el lugar. Y mucha de la gente atrapada sufre alteraciones en su constitución bioenergética, de tal manera que si se les devolviera inmediatamente después del rescate, podrían morir prematuramente pues de registraría un envejecimiento celular acelerado. Además las centrales de inteligencia de las grandes naciones los harían desaparecer eliminándolos en cen¬tros militares de alta seguridad, internándolos allí, porque su sola presencia sería el testimonio definitivo de nuestra presencia en la Tierra y de la existencia de las puertas dimensiónales.
¿Y si ustedes no los llegaran a rescatar, a dónde se irían estas personas con sus barcos y aviones?
- Podrían aparecer en cualquier punto del espacio y del tiempo, perdiéndose indefectiblemente.
Me imagino que de pronto una sonda espacial terrestre va por el espacio, y el tremendo susto y desconcierto que le causaría, el ver flotando en el cosmos un barco o un avión de la segunda guerra mundial....
Íbamos caminando hacia el borde del cañón cuando me detuve un instante y no pude evitar inclinarme en el suelo al ver dos piedras con las que me sentí seguro de poder confirmar mi estancia en ese lugar. Las sujeté fuertemente en la mano dere¬cha, quizás porque no quería que mis eventuales compañeros se dieran cuenta. Estas piedritas tenían múltiples colores, com¬binándose sobre todo el marrón, verde y plomo; por su estructura parecían cristalizadas.
Oxmalc, mientras caminaba giró su rostro hacia mí y con una mirada seria me transmitió una idea que capté intensamente en mi cerebro; "No quieras demostrar a nadie nada. Si no, serás víctima de tu intento. No puedes ni debes convencer porque sería un esfuerzo inútil, nunca tendrías pruebas suficientes. Además no estás aquí para eso. Tu experiencia concreta no servirá a nadie mas allá de lo meramente anecdótico; lo que interesa es el mensaje de la experiencia interna, y eso no requiere ni de pruebas ni de piedras. Si te llevas eso que tienes entre manos serás prisionero de ti mismo y víctima en muchos sentidos de los demás.
Sentí y visualicé simultáneamente la realidad de los pensa¬mientos del guía, entonces comprendí que no podía aferrarme a la aparente seguridad y tranquilidad que me podrían brindar dichos guijarros.....
Acercándome más hacia el borde del cañón, con las debidas reservas por mi temor aún no superado a la altura, pude observar en el interior de éste accidente geográfico, una ciudad. Había terrazas que iban descendiendo hacia la parte más baja y profun¬da; dichas terrazas eran ocupadas por construcciones esféricas, domos y conos truncados, que se repetían a ambos lados de las laderas. Se podía apreciar a simple vista que la ciudad no era muy grande externamente, pudiéndose extender probablemente en forma subterránea sobre los lados a donde iban a parar unos puentes a manera de cilindros o tubos transparentes sujetos a recias columnas, que atravesaban el cañón de lado a lado, terminando en los taludes laterales. Se veían rampas que des¬cendían de los andenes hacia la zona más profunda, en la que se apreciaba una profusa vegetación.
Cuando me encontraba mirando la extensión de la ciudad, Oxmalc me llamó en voz alta para que me reintegrara con ellos. Fui directo hacia ellos, observando sobre el lado izquierdo disimulada en el suelo, la entrada de un subterráneo. La puerta comunicaba con una especie de ascensor en forma de cilindro, el cual se cerró con nosotros dentro, y descendió con movimientos atípicos verticales y horizontales combinados; esto lo podía apreciar por una mínima inercia que se sentía.
Al abrirse este ascensor nos encontramos en un entramado de túneles de gran tamaño revestidos de unas lozas claras y brillantes que iluminaban el lugar. El suelo era de un material diferente ligeramente más blando y de color verdoso. Los cuatro seres que nos acompañaban a Oxmalc y a mí, se separaron, despidiéndose mientras mi compañero me indicó que siguiéramos solos.
Saliendo al exterior aparecimos en el fondo del cañón rodea¬dos de vegetación, y sobre nosotros veíamos cúpulas construidas sobre las terrazas artificialmente aplanadas. El verdor a nuestro alrededor parecía haber sido extraído en su mayor parte de la Tierra; aunque naturalmente yo mismo no conozco todas las variedades y especies de plantas que existen en nuestro mundo.
Íbamos caminando sobre un empedrado muy sencillo y artís¬tico, desde donde se veían decorativos cursos de agua que se combinaban con bosquecillos, flores y plantas diversas, que me hacían recordar los jardines japoneses. Desde aquel lugar Oxmalc me señalaba los diferentes lugares y los distintos ambientes locales, con su distribución y utilidad. Al estar mirando hacia arriba, vi pasar distintos tipos de naves, y en especial como un pequeño enjambre de objetos esféricos que se elevaban desde un lugar cercano. También observe a la gente que pasaba por los puentes, deteniéndose algunos a mirarnos, como si estuvieran concientes de la presencia de alguien nuevo. Mi reacción fue entonces levantar el brazo y saludar, algo que fue correspondido de inmediato por un grupo de personas que se habían reunido y a las que se les seguían sumando otros. Se nos acercaron entonces un grupo de seres altos, delgados y calvos de tez marrón rojiza que me hicieron recordar a Mardorx. Sus cabezas eran ovaladas, sin orejas visibles, con brazos bastante largos, vistien¬do algunos unos trajes pegados al cuerpo, escamados algunos y otros lisos de color azul; había también quienes vestían túnicas largas blancas.
Al tenerlos frente a mí los reconocí como seres de Xilox. La delegación conformada como por unos quince individuos, se acercó rodeando a un anciano menudo de venerable apariencia quien vestía también una túnica blanca, con una especie de mantilla y un sombrero muy singular, que se parecía al que usan las holandesas, del mismo color que la ropa. El viejo hombre parecía de unos ochenta años o más y caminaba con las manos muy juntas.
Oxmalc me dijo que se trataba de Joaquín, uno de los Doce Menores de Morlen, y que los otros seres eran los instructores de la comunidad terrestre. Me explicó que el propósito de su presencia allí, era la de preparar a la gente que deberá ser devuelta a la Tierra, para ayudar a la humanidad en el proceso de cambio y transformación.
A todos los seres que se habían acercado, les extendí la mano para saludarles, a lo cual no reaccionaron; más bien me observa¬ron fijamente, sin gestos que delinearan la menor sonrisa o señal de aprobación, lo cual me obligó a bajar mi mano.
Todos se veían tan serios, a excepción de Joaquín que mos¬traba un rostro afable.
De pronto Oxmalc se disculpó despidiéndose, dejándome sólo con aquella comitiva; también los de Xilox cruzaron sus brazos sobre su pecho y se retiraron. Joaquín aprovechó ese momento para indicarme que era necesario mantuviera suma discreción sobre lo que recibiría allí y lo que me dirían; debido a que la falta de preparación de la gran mayoría de quienes me escuchaban, podía distorsionar las informaciones y reaccionar negativamente al no entender el significado profundo de lo dado.
¡Cuánta razón tuvo Joaquín cuando me advirtió la necesidad del silencio y la discreción! Tiempo después me arrepentiría de no haber sido cauto y haber contado abiertamente la experiencia por insistencia de algunos compañeros de los grupos, generando incredulidad y rechazo en propios y extraños.
Mientras conversaba con Joaquín, se nos acercaron alrededor de dieciocho personas acompañadas de un hombre alto de raza negra, con pelo algo encanecido y de rasgos bastante finos. Aquel hombre de apariencia terrestre era Xendor, uno de los 49 guías de la misión; hijo de terrestres nacido en Morlen, y que por su alto nivel de desarrollo psíquico como moral, fue integrado en último minuto dentro del equipo de guías. Reemplazó a la guía Xanxa de Apu, quien fue relevada de sus funciones, al haber trasgredido ciertos límites en la comunicación con antenas de la Tierra.
Esta mujer extraterrestre se equivocó al no guardar la distan¬cia necesaria en su relación con los terrestres, y se dejó involu¬crar en asuntos personales.
La compañía que rodeaba a Xendor la conformaban personas de diversas razas, quienes al acercarse a mí me hablaron en varios idiomas; pero al contestarles en castellano todos accedie¬ron a expresarse así, cosa que me facilitó tremendamente la conversación.
La gente que se encuentra en la ciudad Confraternidad regis¬tra diferencias en cuanto a su progreso y evolución, como ocurre en la Tierra, quedando a las generaciones venideras, adquirir colectivamente el nivel de desarrollo orgánico que lo facilite.
Me vi rodeado del grupo de personas, quienes se mostraban espontáneos y comunicativos; conmoviéndome cuando algunas personas me decían:
¡Animo, ya falta poco!
¿Poco para qué? - Pregunté sin poder ubicar a los autores de aquella frase.
- Para la evaluación antes de la gran transformación...- Dijo un hombre de unos cincuenta años de apariencia europea, que se adelantó hasta mí cogiéndome con su mano izquierda el cuello, mirándome con una paz que me penetró internamente.
- El mundo está convulsionado; ciego y sordo frente a los mensajes... Dije yo, algo entristecido.
- ¡Está tal como había sido anunciado!. Pero cada vez hay más bien que mal en el mundo! - Expresó entusiasmada una joven mujer.
¡Que gracioso es escuchar que a uno le recuerden lo que tantas veces yo le he dicho a la gente!. El mal está mejor publicitado, y el bien no es noticia que venda.
Me pueden decir, ¿Cómo se sienten al estar aquí?. Debe ser muy duro, ¿eh?
- ¡No lo es tanto, sabiendo todo lo que conocemos ahora! Contestaron en dúo dos personas del grupo.
- Y qué es lo que saben? _
- Conocemos lo que viene, por qué viene y para qué servirá - ¬refirió con seguridad una señora de cierta edad bastante canosa. - ¿Qué es lo que viene - Pregunté haciéndome el que no sabía a qué se refería.
- Eso lo vas a tener claro por ti mismo y ahora... Contestó interceptando la conversación el guía Xendor.
En ese momento un joven de apariencia y acento sudameri¬cano me preguntó entusiasmado e ingenuo:
¿Cómo van las cosas por mi Tierra?...
- Supongo que ustedes. Sabrán bien como van las cosas por nuestros países.
Además me dijeron que hay extraterrestres que viven entre nosotros con una gran cuota de sacrificios evaluando permanen¬temente el proceso de la humanidad, e informando sobre los cambios positivos y negativos que se producen.
- ¡Interceptamos también todas las transmisiones de las tele¬comunicaciones y la vía satélite! - Habló con una gran seguridad un hombre que parecía ser militar.
¡Estamos preparados para volver!- proclamaron en coro una pareja de jóvenes.
Ante una señal de Xendor, el grupo se despidió deseándome la paz.
Nos quedamos solos con Joaquín.
No hay que perder tiempo... no se debe descuidar la preparación y el propósito para el cual se ha llegado a éste lugar dijo Joaquín como hablando para sí mismo, con la cabeza gacha y moviendo rápidamente las manos. - ¡Esa gente que has conocido se está preparando para volver y empezará a hacerlo a partir de Agosto de este año terrestre.
- ¿Pero qué mundo encontrarán?
- Un mundo en cambio mediante el trabajo de muchas personas como ustedes.
Cuando ellos lleguen deberán apoyarse mutuamente. Los que retornan se infiltrarán en el mundo con un estado mental superior que contribuya a sostener los cambios promovidos.
- ¿Será suficiente nuestro trabajo? - Pregunté dudando de nuestra capacidad.
- ¡No, no será suficiente, pero habrá que insistir con el concierto de muchas personas que se van comprometiendo.
- ¿Y cuantas personas serán necesarias para revertir el orden de las cosas?
-.La clave numérica la conocen y es la necesaria para crear una alternativa diferente y variar definitivamente el futuro.....
Serían necesarios 144.000 personas comprometidas y conscientes.
Veras que el número 9 está allí intrínsecas con su significado como número de nacimiento _y creación.
- Pareciera que no fuera mucho hallar 144.000 personas.
- No son muchos en relación con la cantidad de seres humanos que hay en la tierra, pero no creas que es fácil completar ese número con gente constante y conciente, que tenga la convicción de que puede "Crear lo que se cree"
- ¡Esa es la primera ley o principio universal del Mentalismo!. - Ciertamente que lo es, y para tu consuelo el futuro ha empezado a variar, y ciertos acontecimientos no se van a cumplir o van a ocurrir de otra manera, aminorados, reorientados en una forma positiva o acelerados. Esto porque cada vez hay más gente que va dándose cuenta poco á poco de la necesidad de crear un estado mental colectivo armónico que altere el destino al que la inconsciencia y el egoísmo han venido conduciendo.
¿Se ha empezado a alterar el futuro?
- ¡Sí, en una millonésima de grado!, pero lo suficiente como para que ya no necesariamente las cosas ocurran tal cual han sido profetizadas...
- Las profecías entonces no han sido dadas para que se cumplan sino para que no se cumplan. Esto es una gran noticia, y más escucharlo de ustedes.
- Tú ya lo habías venido escuchando, y te lo confirmamos: "El hombre puede y debe modificar el futuro, sembrando causas nuevas que generen nuevos efectos en la historia, y reorienten los acontecimientos."
- Ahora voy entendiendo para qué querían que viniera.
- Sí, ahora empiezas a saberlo... Y en verdad te digo, no volverás como viniste. Volverás identificado con el optimismo de quienes desde aquí se están preparando; porque habrás visto era de tu mundo cómo es que han empezado a operarse cambios que no tardarán en evidenciarse, y que representarán luces de esperanza.
- Creemos y confiamos en ustedes, ahora son ustedes, los que deben confiar en ustedes mismos.
Hasta ahora la Confederación ha venido manteniendo contacto con los gobiernos de las grandes naciones de la Tierra a través de sus cosmonautas para permeabilizar las frente al mensaje y la advertencia de un desenlace terrible que puede abatirse de un momento a otros sobre tu mundo. Sé que ya te han hablado de todo esto, pero bien sabes que no es nada fácil combatir al gobierno interno negativo, en su terreno y fuera de él, pues hay control psíquico sobre cierto sector de la humanidad, manipu¬lando a quienes detentan el poder tanto en la política, la economía, la cultura y la religión.
- Sí me permite preguntarle, ¿Qué va a pasar finalmente?
- ¡El cambio!,¿No te has dado cuenta todavía. Ya llegó el tiempo para la humanidad y para ustedes como grupo....
- Pero, ¿El cambio del planeta, de la humanidad, de la misión....
No me podría explicar más claramente.
- ¡No hay tiempo! Velo por ti mismo...! Síguenos:
Joaquín se dio la vuelta y apuró el paso mientras Xendor que había permanecido silencioso, después de mirarme fijamente siguió al anciano; yo fui detrás de ellos. El ambiente de la ciudad, era de una indescriptible paz, con una música muy suave que inundaba todo con color y luz.
Mientras caminábamos pregunté si el retorno a la Tierra era lo que provocaba la ansiedad y excitación que veía en las personas del lugar.
El retorno más importante y trascendental: El del Cristo del universo material!... Sí Jesús resucitado, aquel que vivió en la Tierra hace 2.000 años, ¡Vuelve! y estará en Ganímedes al lado de los 24 ancianos, entre los meses que corresponden de tu tiempo a agosto y diciembre refirió Joaquín con entusiasmo pero sin perder la seriedad que había asumido.,
- ¿Y de dónde vuelve, dónde estuvo todo éste tiempo?
- En el centro de la Galaxia Principal de éste grupo local, esto es en Andrómeda. Esta Galaxia espiral actúa como punto de gravedad de las Galaxias Satélites como la Vía Láctea.
El vuelve de la séptima dimensión del Universo material respondió Xendor ante una indicación de Joaquín.
¿Y por qué de allí?
- Porque en el centro de las Galaxias se abren puertas dimensiónales entre los planos físico, mental y espiritual. Son puertas abiertas de arriba hacia abajo, no de abajo hacia arriba; recién con Jesús se produjo la doble conexión.
¡El en representación de toda la humanidad! - Siguió contes¬tándome aquel moreno alto de contextura robusta, mientras el anciano maestro asentía con la cabeza y una sonrisa de satisfac¬ción, parecía celebrar el conocimiento del discípulo.
- ¿Y cuál es la razón de su retorno?
- Vuelve para evaluar el cambio y la transformación de la humanidad. Su sola presencia sellará una etapa....
- Pero, ¿Su cuerpo es el mismo con el que resucitó?
- Es su cuerpo glorificado y que naturalmente no podía ser exactamente como el que tuvo antes, por ello trajo consigo problemas de identificación posteriores en los discípulos y seguidores.
Cuando María de Magdalena y los Apóstoles vieron al Maestro resucitado, lo vieron en un cuerpo revitalizado, con una aparien¬cia juvenil. Ellos lo recordaban avejentado por el sufrimiento y por él conocimiento que tenía de su futuro martirio. Además al haber muerto como bien sabes, el cuerpo astral y el mental inferior también mueren, donde se encuentran la personalidad y el carácter; cuando él resucitó lo hizo sobre su mismo cuerpo el cual había sido elevado vibratoriamente a la cuarta dimensión, pero vuelve sin astral ni mental inferior, directamente con su mental superior ¡Su real ser¡
Llegamos por senderos adoquinados de piedra hasta el extre¬mo opuesto del cañón, empezando a subir por unas rampas bien pronunciadas, hasta uno de los andenes superiores.
- ¡Hermano!- interrumpió el silencio breve y reflexivo, el guía Xendor- Es importante que no desaprovechemos ni un instante en que podamos compartir las enseñanzas que te llevarán a estar en mayor capacidad de resolver situaciones; pero deja, que nosotros seamos los que respondamos a las necesidades de información, porque éstas son relativas. Hay mucho a lo que aún no están preparados a saber y deben prepararse. Cuánto quisié¬ramos decirles y darles a conocer, pero como aún no superan actitudes de impermeabilidad y superficialidad frente a los conocimientos, sería peligroso para ustedes, e irresponsable para nosotros, comprometerlos si no están listos.
Deben evitar distraerse con aquello sin importancia, valoran¬do lo que sí la tiene. También deben desarrollar la capacidad de amar, mediante el servicio con desprendimiento, sólo así sabréis recibir para dar.
Deberán entender que a mayor disposición frente al amor, mayor comprensión y como consecuencia aflorará el conoci¬miento en ustedes, proveniente de su real ser y recibirán de nosotros y de otros, mayor información.
Es importante que a través de las antenas en la Tierra formulen sus preguntas descartando aquellas malas recepciones, incompletas y mentalizadas. El vínculo de la comunicación exige mantener una armonía y vibración especiales que requie¬ren a su vez, al grupo trabajando, analizando y cuestionando con crítica constructiva. La comunicación les mantendrá unidos y activos; ello también les permitirá verificar nuestra cercanía.
Experimentando y arriesgándose al fracaso con objetividad podréis distinguir cuando la pregunta preparada de antemano no recibe la respuesta idónea y coherente.
Nada ganan acumulando mensajes y teniendo antenas recep¬tores, si no hay conciencia real de la responsabilidad de lo que reciben, pues todo aquello que se recepcione en perfectas con¬diciones de preparación está sujeto a ser aplicado. Por ello les insistimos sobre la necesidad de prepararse para amar, para dar, y no den sin antes haberse preparado para hacerlo. De otra manera nadie aprovecharía lo recibido y compartido, sería mal interpretado y se desparramaría el conocimiento sin provecho alguno.
¿Cómo podré recordar todo cuanto me dicen? ; ¿Cómo podré transmitir todo lo que estoy captando y sintiendo, cuando regrese a la Tierra?
- Queda grabado en tu subconsciente... Cuando regreses habrás de ejercitarte en el retroceso consciente que has apren¬dido. Además en tu cabeza existe un pequeño cristal que fue introducido con tu consentimiento para ser ubicado, en el se graba mucha información y cuando lo activas, la inspiración que recibes no es más que la conexión directa.
- Según la invitación que nos hacen: ¿Podrán responder a todas nuestras preguntas?
Entenderán todas nuestras respuestas? ¿Estarán preparados para romper todos sus esquemas mentales y cuestionar todo lo que creen y saben?
Después dijo esto Xendor, le contesté de inmediato con sumo respeto: -podemos intentarlo, pues todo es mejor que la oscuridad; además cada vez hay más personas dispuestas a una mayor entrega, lo único que se necesita es saber por dónde caminar qué ruta seguir, cómo hacerlo y cuándo hacerlo.
- El problema de ustedes es que buscan en un orden equivocado. Primero deberían buscar dentro de ustedes mismos a través del contacto interno, donde encontrarán la esencia de todas las respuestas; y luego fuera de ustedes, allí obtendrán, observando, la forma de todas las respuestas. Así tendrán también elementos de constatación. Y la forma es lo de menos, porque fundamen¬talmente depende de la intención y actitud en lo que hagan. Hay muchas formas con las que puedes probar hasta encontrar la síntesis que te convenga y acomode, pero no olvides que es más importante la fe y la convicción en el trabajo.
¿Disculpen mi necesidad, pero ¿Cómo puede lograrse el conta¬cto con nuestro yo superior, el real ser de cada uno?
- ¿Acaso no lo sabes? - intervino Joaquín sonriéndose..
Me di cuenta que estaba insistiendo por gusto en algo que yo mismo sabía. Queriéndome asegurar de lo evidente. Así murmu¬rando dije:
- Quizás siempre lo hemos sabido pero nos cuesta enfrentarlo porque exige el esfuerzo de la auto-observación diaria y continua.
Exige valor para verse tal cual uno es, significa conocerse, aceptarse, perdonarse, respetarse y querer cambiar; y para ello no se necesita mayor ayuda que procurar estar consciente, ser responsable de cada acto, pensamiento e intención, dándonos cuenta que estamos viviendo y que la dinámica del universo es cambio y evolución.
¡Buscamos que nos recuerden a cada rato algo que ya sabemos ¡...
- Y se lo recordaremos una y otra vez, pues para ello existen misiones como ésta.
Ante una seña de Joaquín, quien al parecer había sido el que más había disfrutado de la conversación, nos apuramos, recibí en ese instante un sorpresivo y cariñoso abrazo de aprobación por parte de aquel gigante que era Xendor.
Para que fuera aprovechando más la caminata, Xendor me narró sintéticamente el proceso de colonización del lugar y las dificultades que tuvieron al principio, así como el objetivo de reunir precisamente allí gente para ser preparada, fuera de la influencia vibracional de nuestro planeta.
Mientras ascendíamos veía el rostro de Joaquín, quien permanecía en silencio; y observaba su serenidad aún cuando me dejaba sentir algo así como una preocupación. Llegamos a un local de forma cónica que remataba en aparte superior y exterior, con una pirámide de cristal. Al cruzar la puerta de ingreso fuimos recibidos por tres personas de apariencia muy terrestre, uno de los cuales era un hombre al parecer japonés de unos 48 años según lo que le calculé, quien al hacer una venia me recordó los modales ancestrales de su raza y nación, los cuales obviamente no había olvidado ni perdido. Las otras dos personas eran un matrimonio de apariencia Europea el cual me refrió que llevaba sólo doce años en Morlen, y que habían desaparecido en la Zona de las Bermudas en un pequeño yate antes de una tormenta. Ellos me dijeron que estaban al tanto de las vicisitudes que en la Tierra habíamos pasado los del grupo y otras fraterni-dades.
El señor japonés con su relato supe que lo era, me contó con mucho orgullo y con el ánimo de confraternizar, y después de que terminó de hablar la pareja, que él había desaparecido en el Pacífico durante la segunda Guerra Mundial. El era un oficial que tripulaba un avión Zero. Durante la Batalla habían diezmado su escuadrilla cuando algo pasó con los controles; sin que él hiciera nada especial vio como todo el paisaje aparecía al revés y el avión como si estuviese de cabeza y una nube de color verdoso que se le aproximaba a gran velocidad, o lo arrastraba hacia ella (esto no lo recordaba bien), luego una fuerte sacudida no recordando nada, hasta que se halló en el interior de una nave espacial, donde otras personas de origen terrestre lo tranquili¬zaron y le explicaron la situación.
Me pidieron que ingresara al local en cuyo interior una luz verdosa cubría la habitación cónica. Una vez dentro, los cinco se cogieron de las manos, dejándome en el centro del círculo formado por ellos, quedando exactamente debajo de la pirámide del techo que proyectaba sobre mí un haz de luz que inicialmente veía blanco, luego cambió a dorado, siguió con rosado, verde, celeste y terminó con un violeta brillante, mientras esto sucedía Joaquín que estaba con el rostro iluminado y los ojos cerrados en actitud de concentración, sin su habitual gorro, dijo en voz alta: "EL QUE AMA LA LUZ HA DE VIBRAR EN EL QUINTO DE RAHMA. El que se entrega al plan del Altísimo conocerá sus designios; interpretará sus mandatos y realizará su existencia...El Quinto de Rahma es el tiempo de una humanidad predestinada al cambio y a la redención cósmica; a la muerte y al nacimiento. Su protección será el nivel de conciencia que obtenga y el amor que irradie. Su misión será trabajar responsablemente la restauración del orden cósmico y de la dinámica de la evolución... El que vibre en el quinto de Rahma sabrá que tiene el poder de cambiar el destino de su propia humanidad personal."
Terminó de hablar el anciano maestro, y la habitación quedó envuelta en un impenetrable silencio, hasta que tomó la palabra Xendor:
- El Quinto de Rahma es el despertador que ya sonó para que reaccionen quienes aún seguían dormidos para desarrollar su misión...
El cinco es el número de la magia; es el símbolo de la pro¬tección con la que cuentas. Dicho esto nuevamente se hizo silencio.
- ¡Esta es la quinta humanidad, poderosa e ingenua, joven y bien intencionada! Habló el piloto japonés mientras mantenía los ojos cerrados y esbozaba una sonrisa de genuina alegría.
_ ¡Han nacido los nuevos esenios!. Dijo la mujer con visible entusiasmo.
¡Los profetas del Nuevo tiempo! Los que se prepararán para ser los depositarios del conocimiento antiguo.... Afirmó el esposo de aquella mujer.
Nuevamente sobrevino el silencio así como una penumbra de misterio que me estremeció profundamente. De pronto la luz apareció sobre mí, tímida y gradual; y junto con ella, una hermosísima y lejana música que parecía encerrar en su melodía un coro de voces; me puse a buscar con la mirada el origen de dicha música, y entonces me percaté de que me hallaba comple¬tamente sólo, al parecer mis acompañantes se habían marchado aprovechando que me hallaba absorto.
Poco a poco la penumbra fue dejando ver en un extremo de donde me encontraba una especie de soporte como de cristal, en el cual se hallaba el mismo libro que observara en el interior de la nave en la que subí, el 18 de Abril de 1986. Fue en ese momento que escuché la voz de Joaquín que decía:
- Acércate hijo mío que a través tuyo y de todos los que por amor empezaron a morir a sí mismos, hoy empieza a cumplirse la misión Humanidad... -.
Acércate al libro y aliméntate de él... Este libro es parte de lo que hay en tu planeta y especialmente en Sudamérica, en el lugar en que las fuerzas positivas libran una gran batalla contra la oscuridad.
Tócalo, que a partir de éste momento, la Misión y los que en ella trabajan quedan consagrados al Profundo y a la Hermandad Blanca..... El Puente empieza a ser restablecido.
Me vi impulsado a tocar cada una de aquellas láminas de metal con una gran reverencia, mientras en mi pecho sentía como un fuego abrasador. Estaba maravillado, y no podía creer que estuviera allí, en aquel momento, viviendo tal experiencia.
A través de mis manos percibí impulsos como eléctricos y extrañas sensaciones así como imágenes que se multiplicaban en mi cuerpo y mente a gran velocidad, un gran calor, presión en la cabeza; muchas cosas se iban produciendo. Y mientras esto sucedía, nuevamente toda la habitación se encendió en luz verde brillante y delante de mí, en una pared de cristales se abrió un pasadizo.
Dejé el libro sintiéndome saturado de informaciones que demoraría mucho en dilucidar, y me fui adentrando tímidamente por aquel túnel. Habría avanzado unos diez metros cuando me encontré en una habitación octogonal de cristal, que tenía en el centro dos catafalcos o sarcófagos también de cristal traslúcido, separados unos tres metros uno del otro. En el interior de ellos se veían los cuerpos perfectamente conservados de dos ancianos de apariencia similar, vestidos con unas túnicas y mantos gruesos blancos. Sus rostros lucían espesas barbas y estaban enmarcados por cabellos blancos largos que resaltaban de una avanzada calvicie.
En los pedestales que sostenían las cajas mortuorias (se veía claramente que estaban muertos), había símbolos perfectamente reconocibles, idénticos a aquellos que los guías permanente¬mente manejan.
Escuché nuevamente la voz de Joaquín que me decía: "Estos son los dos testigos... Henoc y Elías, aquellos que han venido cumpliendo su labor en otros cuerpos y momentos"
- ¿Por qué están aquí? - Pregunté en voz alta.
Esos son sólo lo que fueron sus vehículos físicos, temporales; envases de cuando fueron extraídos de la Tierra. Son parte de la historia de tu mundo, y de la verdad de un proceso que no ha sido entendido.
En aquel instante, en el lado derecho de la habitación se descorrió una pared de espejos, dejando al descubierto un salón circular que contenía centenares de esferas del tamaño de un puño adulto, suspendidas en el aire, a una altura de metro y medio por un haz de luz que salía del suelo, debajo de cada esfera. El techo parecía como el de un planetario pues mostraba la distribución de estrellas, sistemas y Galaxias, en las paredes de la habitación que se fue iluminando poco a poco, apareció una pantalla que daba vueltas completas en 360 grados al cuarto, mostrando imágenes de lugares diversos que no eran la Tierra.
Después la imagen desapareció, oscureciéndose el lugar y volviendo a aparecer el techo estrellado. Empecé a caminar por en medio de las esferas y pregunté:
- ¿Cuál es el significado de todo esto? Escuché una voz que no pude relacionar con la de Joaquín ni con la de Xendor, que decía: ¿-Qué ves?
El cosmos y muchas esferas suspendidas por columnas de luz. - ¡Tú lo has dicho! Todo mantiene el orden cuando se halla suspendido por la luz... El orden fue roto y la luz habrá de ser restituida. Buscad dentro de vosotros mismos la fuente de la luz, el valor y la fuerza; podréis restituir dicho orden con el amor que os caracteriza... ¡Esa es vuestra misión y destino! -Dijo la voz, sin poder hallar su procedencia.
- Pero,... ¿Por qué nosotros. Acaso todos los extraterrestres que nos visitan no poseen el mismo ó mayor amor que el que la humanidad de la Tierra posee?
La pantalla circular que rodeaba la habitación volvió a encenderse mostrando las imágenes de lo que parecía ser la estratosfera terrestre, e inmediatamente la escena de lo que parecía ser una persecución de un objeto o nave espacial pequeña por parte de otra un poco más grande.
¡Hay gran violencia en los cielos....! Sí, no todos los seres que llegan a tu mundo vienen con buenas intenciones..Algunos, que jamás han negado su simpatía a la disidencia y rebelión de los Oriones, han tratado de ingresar en el planeta para ayudar a que puedan fugarse aquellos que permanecen prisioneros en una cuarta dimensión. A través de la fertilización de seres humanos terrícolas, ellos podrían conseguir que reencarnaran aquellos que ejercen el poder siniestro. La Confederación como bien sabéis han dispuesto una cuarentena sobre este mundo para evitar la evasión. Ellos no pueden encarnar en la Tierra porque el común de los terrestres no poseen el nivel vibratorio que les facilitaría encarnar.
- Pero... ¡Un momento! En las biografías de aquellos consi¬derados santos de la Antigüedad por parte de la Iglesia, se habla de que eran acechados por los demonios que querían posesio¬narse de sus cuerpos. ¿Esto es posible?
- ¡Tú lo has dicho! Así es. Pero han sido pocos casos aislados los que se han producido en que no se ha podido controlar el que lleguen y traspasen el bloqueo.
- O sea que aquellas naves que se han estrellado en nuestro mundo como las de Nuevo México y otras habrían sido derriba¬das por ustedes.
- ¡Pronto recibirán más información que complementará lo que has sentido a través de tu contacto con el libro! Habrán de vivir experiencias que les harán recordar conocimientos que reposan en vuestro interior, y finalmente, después que los recuerdos y las revelaciones los predispongan, recibirán el libro de la HISTORIA del PLANETA de TERCERA DIMENSIÓN... "EL libro de las Vestiduras Blancas"
La pantalla que había mostrado hasta hacía poco el estallido del pequeño objeto, se apagó... Salí de la habitación como impulsado por una fuerza interna, llegando fuera de aquel local cónico, encontrándome allí con mis cinco acompañantes.
- Entiendo todavía muy poco, de todo cuanto se me ha venido transmitiendo, y además demasiadas piezas sueltas.- Declaré con cierto tono de reproche frente a la situación.
- ¡Exijan el conocimiento cuando merezcan esa responsabili¬dad! Prepárense, trabajen con ustedes mismos... Habló Joaquín serio y tajante.
Las personas que allí estaban se fueron despidiendo arengán¬dome a que no desfalleciéramos en el esfuerzo... Joaquín tam¬bién se despidió agitando la mano derecha y moviendo la cabeza hacia los lados, diciendo:
¡Has visto y ya no eres ciego! Guía, guiándote!... Amor y Paz. Xendor me cogió el brazo y me invitó a seguirlo, bajando por las rampas que descendían hacia la parte más baja del cañón. Seguimos por los pasadizos de la ciudad rumbo a la zona de aterrizaje y despegue de las naves, en la parte lateral superior del valle.
Durante el camino Xendor me explicó que lo que faltaba recibirse como historia de la Humanidad, para asegurar el que no se volviese a repetir los errores del pasado por desconocimiento, iba a ser dado, cuando se produjera el contacto físico con la Hermandad Blanca de la Tierra, y cuando hubiesen sido eslabo¬nados y conectados aquellos 144 y 24, que trabajarían en el conocimiento a recibirse. Me dijo también que no debíamos preocuparnos del cumplimiento de los detalles que no fueran nuestra responsabilidad, sino solo de aquello de lo que de nosotros dependía, haciendo eco de consejos anteriores.
Llegamos a la zona inicial, en la llanura desértica a través del mismo ascensor. A la distancia se veían entre resplandores, tres naves en forma de campana, con luces intermitentes en sus bases, con poderosos faros naranjas y verdes en la parte superior de una especie de cápsulas que lucían ventanillas azulinas.
Fuimos caminando hacia allí, cuando del interior de una de estas naves, se abrió una puerta o escotilla a la altura de las ventanillas. De la compuerta se asomó un ser de apariencia venusiana, con rostro triangular. tenía el brazo en alto y entonces Xendor se detuvo, giró sobre sí y cogiendome con las manos los hombros, trató de agacharse para acortar la diferencia de altura y mirándome me dijo:
- ¡TELL- ELAM!... Diles a todos que les amamos y confia¬mos en ellos, y en la esencia divina que yace en cada uno. QUE TENGAN VALOR FRENTE AL CAMBIO. Estas naves vuel¬ven a la colonia de Venus, son de Romelta. Harán escala para dejarte en la Tierra, si no, tendrías que quedarte varios meses aquí con nosotros, hasta que coincidiera con otro viaje de cambio de tripulaciones.
Recuerda a la gente con la que trabajas y a las personas a quienes llegas con tus palabras y sentimientos, que pedimos estar en ésta época tan trascendental y en este trabajo.
Hemos sido bendecidos con la conciencia; actuaremos en concordancia con lo que sentimos y con lo que sabemos. Cada día se sabrá más de acuerdo con la responsabilidad asumida. Amor y Paz!
- ¡Amor y Paz! -fue lo que le contesté a este gigante que me dio un sentido abrazo a desigual altura. Luego se alejó. En el cielo asomó una espectacular nave en forma de desmesurado cilindro, todo él iluminado por decenas de luces azules.
Me acerqué a los aparatos que se hallaban sobre la explanada, saliéndome al encuentro tres seres de apariencia venusiana, dos de los cuales por sus definidas formas femeninas se veía que eran mujeres. Su estatura como 1.70 mts., con pelo brillante rubio y ojos extremadamente claros. El varón tenía el pelo color cano platinado e igualmente largo. Me pidió él que les acompañara por una rampa que se extendía hasta la pequeña puerta de la nave. Así lo hice introduciéndonos en el interior de una estrecha habitación circular rodeada de pantallas. Había asientos dis¬puestos al lado de mostradores o escritorios en el centro había un desnivel o piso hundido también circular que comunicaba con otra habitación más abajo.
Una compuerta se abrió al frente nuestro, dejando al descubierto un cuarto o espacio más reducido aún; fuimos hasta allí caminando alrededor de éste como salón de mandos. Por la puerta descorrida pude ver que había apoyados en la pared unos tres cilindros o torpedos transparentes un poco más grandes que el largo y ancho de un hombre normal. El guía varón abrió esta cápsula, pues en medio de ella le recorría un sello de bronce de unos quince centímetros de ancho, lo removió escuchándose el ruido de apertura de un vacío.
Fue en aquel momento que este ser se identificó con el nombre de Oniac, me pidió que le diera el buzo que llevaba puesto y que me acostara en el interior del cilindro. Ya sin mayor pena, me desnudé y me acosté dentro de la cápsula, la cual cerró presuroso el extraterrestre transmitiéndome con la mirada y mentalmente, que estuviese tranquilo y me relajara. Me encontré en breves segundos flotando ingrávido en aquel recipiente, sintiéndome bastante extraño, mientras pensaba y hacia un recuento de todo lo que habían significado aquellas intensas horas vividas. Al cabo de un rato la presencia de una pequeña esferita amarilla anaranjada que salió de la pared, y empezó a recorrer por fuera del cilindro toda la longitud de mi cuerpo me produjo un incontenible sueño. No sentí más nada hasta que despedía ya vestido, la nave a la distancia a pleno sol, en medio del desierto de Chilca al sur de Lima en el Perú.
Los días siguientes serían muy duros para mí tratando de asimilar aquella experiencia; quería profundizar su contenido y retener conscientemente cuanto había vivido. Marinita me ayu¬dó a superar el choque que significaba el conciliar realidades tan brutalmente distintas como era lo cotidiano y doméstico, con semejante experiencia. Ella como siempre fue la fuerza que me permitió, mediante el diálogo y el interés respetuoso y compro¬metido con la verdad, descubrir el significado profundo del despliegue realizado, pudiendo al final de aquel análisis llegar a identificarme más con el rol que me correspondía en el proceso de la misión.
Nunca podré agradecer debidamente el amor de Marinita que con eficiente labor crítica y humildad, me ayudó a controlar el ego y a cuidar mi cordura.