jueves, 24 de noviembre de 2011

NOSOTROS Y EL MUNDO
Raquel Perez

Las puertas se están abriendo, pero sobre todo las puertas espirituales.

Recordemos que hace más medio siglo, a los europeos les llegaron noticias de que en América estaban los tesoros más grandes del planeta y en su búsqueda vinieron con violencias y mentiras.

Ellos fueron avisados pero equivocaron la información.Claro que había oro, plata, riquezas.

Pero en América, estaba la otra riqueza, el otro tesoro, el más grande que pueda existir y que no supieron interpretar, ver o escuchar.

Nosotros tenemos las puertas a la sabiduría, a la historia planetaria y universal que tanto se ha buscado hasta hoy.

Sabido es que esa historia fue escondida, muy escondida como el más preciado "tesoro" al llegar los invasores para que no se destruyera.

Ahora, llegado ya el momento de la gran revelación, gracias al gran esfuerzo y trabajo de muchos habitantes de este amado planeta, ese tesoro se acerca cada vez más a la humanidad.

Recordemos que los europeos de 1400 "eligieron" o "fueron enviados" a nuestro territorio- lo que hoy es nuestro país-porque acá estaba la "puerta"para llegar a aquel otro lugar que era el "corazón".

Y hoy nos dicen los guías que debemos trabajar, energizar, "abrir" la conexión de nuestro lugar con el otro, con el de la selva, con el de Perú, con el resto de América del Sur, donde sabemos que se encuentra la verdadera historia cósmica a disposición de quien lo quiera recibir en su corazón limpio, puro y latiendo con muchisimo amor por la humanidad.

Por el agua vinieron a buscar sus tesoros. Por el agua se unen todas las piezas del rompecabezas que es el planeta y por eso es que los guías nos piden que desde nuestro terruño trabajajemos con ella, energizándola, usándola en nuestro interno, como canal para llegar una vez más con el corazón al Paititi y desde allí a todos los puntos del planeta y a la humanidad.

Ya se sabe también que nuestros indígenas fueron remanentes o descendientes de aquellos primeros habitantes del planeta y que tenemos pruebas de ello; vestigios se vienen encontrando y no es fantasía, huesos prehistóricos, animales que no sabemos por qué están sus esqueletos aquí, rocas con miles de años de antigûedad que nos están hablando que también pertenecimos a una cultura muy antigua y sabia a la cual respetar y comprender para llegar a un futuro digno para nuestra querida humanidad.

Somos la puerta abierta a una realidad que nos conducirá a la sabiduría planetaria y comprensión universal. por eso es que debemos tener siempre presente la unión, el respeto, el trabajo en grupo más que el individual para hacerlo con más fuerza y que las vibraciones sean más intensas.

Desde este humilde rincón y desde lo más profundo de mi corazón invito a todos los hermanos en misión a no bajar los brazos y apoyarnos cada vez más estrechando los lazos, estemos donde estemos, porque somos uno con el Profundo Amor de la Conciencia Cósmica y él está siempre con nosotros.

Un abrazo inmenso con mi mejor energía para todos.

Raquel