CAPITULO VII: LA MONTAÑA DE MONTSERRAT
“En un lugar de Cataluña, hay un macizo rocoso,
de insólita apariencia y peculiar ubicación.
A la distancia asemeja como unas manos con sus dedos orando al cielo.
Esta montaña aserrada o dentada tiene cuevas ,
y ha sido escenario de extraordinarios hallazgos
como el de la Virgen Negra con el niño, llamada la “Morenita”.
Las trovas medioevales sitúan en ese lugar poblado de hermitas y monjes,
el Monte de Salvación, lugar donde fuera depositado el Santo Grial”.
Estamos todos completamente relajados. Ningún ruido, ni aún la voz que están escuchando interfiere el proceso de relajación, sino por el contrario todo nos ayudará a relajarnos más y más. Mantenemos la respiración lenta y profunda, por la nariz.
Y aprovechando de ésta relajación muy profunda, vamos a concentrar nuestra atención en el entrecejo, en nuestra frente. Y vamos a proyectarnos a través de un túnel mental, de tal manera que al final del mismo visualizamos, nos imaginamos que nos encontramos delante de una montaña muy especial. Parece una sierra, esto es que su superficie es aserrada, con muchas puntas, como si las rocas fueran dedos que salen de la tierra y apuntan al cielo. Vamos a ubicar un sendero que sube la montaña. El suelo es de tierra roja, de una arcilla muy colorada. Empezamos nuestro caminar llevando con nosotros como apoyo un cayado. Ni bien hemos avanzado un trecho, en el suelo nos encontramos una piedra o un cristal que nos llama la atención. La tomamos entre nuestras manos y nos fijamos bien que forma tiene, su color y la llevamos con nosotros.
Más adelante, e igualmente sobre el camino, nos encontramos con un ramo de flores silvestres, que al parecer alguien dejó o se le cayó . Lo tomamos entre nuestras manos, y nos fijamos bien el color de las flores. Llevamos también las flores con nosotros . Seguimos nuestro andar, observando a izquierda y a derecha bosques, peñas, roquedales y abismos; y en una curva del camino, de entre las piedras y matorrales, sale un animal que se cruza delante nuestro y nos mira sin inmutarse, siguiendo su andar y desapareciendo de nuestra vista. ¿Qué animal es ? Al acercarnos donde estuvo el animal vemos que en suelo hay una pequeña esculturita del mismo animal. Observamos de qué material esta hecha la estatuita, llevándola con nosotros.
Cada vez estamos más alto. Las formaciones rocosas nos llaman la atención por ser paredes grisáceas que adquieren toda suerte de formas insólitas. De pronto, en el sendero aparece un nuevo objeto. No detenemos y agachamos para agarrarlo , y nos fijamos bien qué es, ¿de qué se trata? Observamos bien su color, su forma, el material del que esta hecho, terminando por llevarlo con nosotros.
En el proceso de ascenso observamos colgando de la rama de un árbol una bolsa o alforja; nos acercamos a ella, la tomamos entre nuestras manos fijándonos bien en su color y material, y si tiene algún detalle o diseño. Sentimos que esa bolsa fue dejada a propósito para nosotros por lo que colocamos todo lo que encontramos en el camino dentro de la bolsa.
En una parte alta de la montaña comenzamos a divisar la presencia de rústicas ermitas; pequeñas casas de piedra de monjes. Al pasar cerca de una de ellas, sale de su interior un monje o una monja , quien nos saluda y nos hace entrega de un rosario. Nos fijamos bien de que material es éste rosario, su color y diseño (nos fijamos si es un rosario católico, budista o musulmán) Se lo agradecemos, y continuamos nuestra marcha hacia un monasterio en lo alto de la montaña, donde llegamos después de un rato. Nos ubicamos al pie de una escalera tallada en la piedra y ni bien cruzamos unos arcos de piedra, nos ubicamos en una pequeña plazoleta al aire libre delante de la fachada de la catedral. El suelo esta marcado con la rosa de los vientos. De pronto en el interior del templo encontramos cantidad de lámparas y velas encendidas , esculturas y pinturas religiosas asi como un impresionante altar donde se encuentra la imagen de una Virgen Negra acompañada del niño. Avanzamos ingresando en el santuario justo cuando el coro de los monjes y de pequeños niños terminan de cantar y se retiran. Nosotros humildemente nos acercamos al pie de la mesa del altar, y colocamos en el suelo nuestra bolsa llena de todo lo que encontramos en el camino, oramos y de pronto, uno de los niños del coro se acerca hacia nosotros y nos dice que todo lo que colocamos en la bolsa se ha fundido en un único objeto , incrédulos levantamos la bolsa y al recogerla nos damos cuenta que dentro de aquella bolsa realmente solo hay un objeto. Como si todos se hubiesen transformado en uno. Vamos viendo qué es, de que se trata ese único objeto.
Vamos a ir volviendo…Vamos dejando atrás el altar, la iglesia, la plazoleta, los arcos…Vamos a ir volviendo a través del túnel mental , dejando detrás nuestro la montaña sagrada de Monserrat.
Al término de tres habremos vuelto , estaremos completamente concientes, libres de todo tensión, en perfecta paz y armonía. Tomamos una inhalación lenta y profunda, inhalamos…Retenemos…Y al exhalar visualizamos en nuestra mente el número uno, y nos encontramos volviendo a través del túnel mental, tomando conciencia poco a poco de nuestro cuerpo. Tomamos una segunda inhalación …Retenemos…Y al exhalar visualizamos en nuestra mente el numero dos, de tal manera que vamos tomando conciencia del lugar donde nos encontramos . Tomamos una tercera inhalación, inhalamos…Retenemos…Y al exhalar visualizamos en nuestra mente el numero tres, abriendo lentamente nuestros ojos encontrándonos en paz.
El significado del ejercicio.
La montaña representa el camino espiritual, la expansión y la elevación de la conciencia. El recorrerla por sus senderos simboliza la aventura del alma. El báculo representa lo que nos sirve de apoyo en nuestro caminar, mientras que los objetos que uno ha ido encontrando, simbolizan un mensaje por cada uno de nuestros siete cuerpos.
Los aspectos que debemos trabajar en nuestro cuerpo fisico y en la vida material, se encuentran representados en la piedra o el cristal que encontramos al principio. Su forma, color y tamaño son mensajes que debemos saber desentrañar.
Las flores simbolizan el mensaje para nuestro segundo vehículo que es el astral, el cuerpo de las emociones y los deseos. El tipo de flor y su color son muy importantes , también si son de un solo color o de varios nos habla de cómo debemos enfocar el amor en nuestras vidas; hacia dónde orientarlo.
El animal simboliza el mensaje para nuestro tercer vehículo que es el carácter y la personalidad. ¿Cómo debemos trabajar nuestro carácter o qué aspectos de la personalidad debemos potenciar? Se encuentran representados en el animal, por eso es importante definirlo bien. Y la estatuita que encontramos a continuación , su color y material también complementan el mensaje.
El siguiente objeto que encontramos en el camino es el mensaje para nuestro cuarto vehículo “el mental superior”; y simboliza qué debemos hacer o sobre qué aspecto debemos enfocarnos para desarrollar nuestro potencial psíquico.
Seguimos subiendo la montaña y nos encontramos con una bolsa o morral colgando de la rama de un árbol. Esta bolsa, su material, sus colores y detalles es el mensaje para nuestro quinto vehículo como es “el alma”. La bolsa simboliza nuestra misión en la vida. Dentro de ese morral colocamos todos los objetos que encontramos en el camino lo cual representa cómo nuestra alma se nutre de todas las experiencias de vida.
En la parte alta de la montaña vemos salir de una ermita a un monje o una monja que nos regala un rosario. Ese es el mensaje para nuestro sexto vehículo “el espíritu”. Es importante ver si el monje es hombre o mujer , porque allí hay un mensaje también ; si es hombre hay que actuar de inmediato, mientras que si es mujer hay que sentir y meditarlo bien el mensaje. El rosario que nos regaló el monje, es un mensaje espiritual por lo que es importante ver sus detalles, el material del que esta hecho, su color y ¿de que religión es? Cada religión representa un aspecto determinado: el católico, la fe; el musulman, la palabra; el budista el desapego.
Finalmente el objeto que aparece en el interior de la bolsa y en el que se funden todos es el mensaje para el séptimo cuerpo “La Esencia”. Es por así decirlo el mensaje esencial final que engloba a todos los anteriores.