domingo, 29 de noviembre de 2009
ENTREVISTA A FERNANDO BENDEZU ALTRISTA
Entrevista a Fernando Bendezu Alatrista
URITORCO MAGICO",
Por medio de preguntas y respuestas vamos a ir conociendo a Fernando, un hombre simple y sencillo, que lucha por sobre todas las cosas para esclarecer la verdad, verdad que al hombre buscador y comprometido lo encadena hasta el final en una cruzada por la LUZ y el AMOR.
De común acuerdo con Fernando Bendezu decidimos publicar en dos partes esta entrevista donde nos muestra aspectos diferentes del contacto y la misión.
Fernando Bendezu Alatrista
Fernando, se que desde muy temprana edad has tenido tu primera experiencia de contacto con un grupo de boy scout.
Uritorco Mágico: ¿Cómo fue tu primera experiencia de contacto y de qué manera se dio?
Fernando: Realmente fueron dos las experiencias que viví a los 11 a 12 años de edad. Ambas se dieron en el lapso de meses de un mismo año. Una de ellas fue mientras habíamos sido convocados cerca de 50 niños pertenecientes a un grupo scout, los cuales fuimos llevados a Salcedo, lugar que se encuentra a 20 minutos de la ciudad de Puno. Cerca de las 10 de la noche, 3 de los niños nos salimos del campamento a recorrer la zona, era una noche despejada cuando a los pocos minutos detrás de uno de los cerros salió un objeto cilíndrico, emitiendo poderosos flashes de luz de un naranja intenso; el objeto en completo silencio pasó sobre el campamento y varios más lo pudieron ver, incluso los adultos responsables del grupo.
La segunda oportunidad fue una tarde mientras retornaba del colegio con Fernando Morales Giraldo a nuestras casas por una calle angosta y muy transitada, el cielo se mostraba de color azul eléctrico profundo, los primeros luceros aparecían en el firmamento, cuando de pronto algo llamó nuestra atención: Un lucero muy grande, se desplazaba de norte a sur, era muy luminoso y su movimiento era muy evidente, pues avanzaba en un perfecto zigzag, tanto Fernando como yo al instante y como primera reacción empezamos a gritar llamando la atención de los demás transeúntes, juntamente con la gente presente de la calle observamos como el objeto en completo silencio avanzaba en medio del espacio por un par de segundos, cuando de pronto se expandió su luz brillante y de él salieron 5 objetos más pequeños que empezaron a orbitarlo y escoltarlo en ese mismo movimiento de zigzag. Unos segundos más y estos luceros más pequeños se unirían al mayor para luego salir en línea recta despedidos a una gran velocidad en direcciones opuestas. El objeto más grande dejó de zigzaguear y tomó el curso de línea recta y a velocidad constante, así lo vimos perder en el horizonte. Todo el fenómeno fue visto por nosotros y por una treintena de personas que estaban en la calle. Aquellas experiencias darían inicio a una suerte de sueños permanentes con objetos como los que vi en esas dos oportunidades, y con ello una inquietud profunda sobre el fenómeno.
Como cerrando un circulo de curiosidad extrema, un día en el colegio vi una revista llamada “Lo Insólito” la cual era de Lima-Perú y mencionaba las impresionantes experiencias de un grupo llamado RAMA. A esa edad recuerdo muy bien, estaba en la azotea de mi casa con un ejemplar de esa revista en la mano y me dije a mi mismo: yo quiero estar en RAMA.
Esta experiencia fue acompañada de amigos de la infancia.
Uritorco Mágico: ¿Cómo afecto esta experiencia tu vida y qué pasó a lo largo de los años en la vida de tus amigos?
Fernando: En aquellos años comprendería que los sueños que tuve previos al avistamiento no eran producto de la imaginación, eran ya parte del contacto mismo y aunque a esa corta edad poco se podía tratar el tema, muy dentro mío tuve la certeza de la existencia de otras realidades, cosa que se los transmitía constantemente a mi familia y que pasados los años ellos también tendrían la oportunidad de confirmar mis apreciaciones. Desde entonces sólo busqué respuestas al respecto, tanto en mi adolescencia como etapa de la universidad siempre tuve los ojos y mi mente en las estrellas sin llegar a presagiar que un día estaría frente a frente con esa realidad.
Con el paso del tiempo y ya en la adolescencia volviste a tener contacto con ellos pero de una manera diferente.
Uritorco Mágico: ¿De qué manera se dio ese segundo contacto? ¿Estabas solo o acompañado? ¿Perduró en el tiempo?
Fernando: Bueno, realmente no podemos hablar de un primer y segundo contacto, pues entiendo que el contacto extraterrestre viene desde el preciso instante que nacemos, y sólo lo “recordamos” en las experiencias que nos toca vivir.
Era 1994, y lo recuerdo como si fuera ayer, reinicié la “búsqueda”. Cursaba los últimos días en la universidad, en la carrera de Derecho. Durante la secundaria conocería Toño Cisneros con quien se dio una amistad que buscaba las mismas respuestas con respecto al tema. Así nos incluimos en un grupo como de 30 personas que trataban diversos temas esotéricos. Así como muchas personas nos dijeron que RAMA ya no existía más. A pesar de ello, en mi interior me repetía a mí mismo: Yo quiero Rama, no otras cosas…
Hasta entonces lo único que sabía de Rama, era mi recuerdo de cuando era niño y la revista que compré con mis propinas (sacrificando algunas golosinas de entonces). No sabía que perseguía, así como que era la meditación, relajación ni NADA en absoluto.
En el mes de octubre mientras las reuniones se daban, unos sueños llamaron mi atención: me veía caminando en medio de un desierto, en una noche clara, y de pronto en medio del firmamento como en luces de neón se formaba la palabra CHUSCHUCO. Aquello le comente a Toño, y juntos al grupo. El sueño se repitió una y otra vez, hasta cuando ya no sólo veía aquella palabra sino que empecé a oír una voz que me decía: “Ven al lugar”.
Producto de ello, reuní al grupo que semana a semana debatíamos el tema y les propuse la idea de ir a ese lugar “Chuschuco”. La respuesta fue de lo más variado y no nos pusimos de acuerdo. Con ello mi deseo de ir a ese lugar se había convertido en una necesidad.
El día llegó: 26-11-1994 (2+6+1+1+1+9+9+4=33), fecha y número por demás simbólico. Sólo 4 personas de todo el grupo llegaríamos a la cita: Charo Ruiz, Toño Cisneros, Roberto Vargas y yo.
Llegamos a Chuschuco, 6 de la tarde, en medio de un frío y una niebla total, alguien propuso hacer una relajación, cosa que yo jamás había hecho. Cerramos los ojos y al instante una luz cubrió el lugar. Sentí como mi cuerpo era “examinado” por una luz azul, y recorría desde mi entrecejo y base de la nuca, por toda mi columna vertebral. Entonces tuve miedo, el cual iba en aumento, y producto de ello me resultaba difícil respirar. Una quemazón por toda mi piel, sumada a una clara sensación de mareos e ingravidez hizo que entrara en pánico. Finalmente un temblor en mi cuerpo me llevó a una crisis total. El pánico había hecho presa de mí. Decidí entonces interrumpir aquella “relajación” me faltaba el aire y estoy seguro…, estaba por sufrir un desmayo. Abrir los ojos fue mi decisión para salir de aquella crisis, así lo hice. Entonces me encontré en medio de la noche y total neblina, mis amigos ya no estaban, con los ojos abiertos y creyendo mejorar mi situación, vi que estaba dentro de una cúpula de color dorado que pulsaba constantemente, sobre el lugar una nave a unos escasos 30 metros sobre nosotros, y lo mágico es que había creado un agujero perfectamente circular en toda esa niebla densa por donde se podía divisar la nave y las estrellas. Y frente a mí un enorme personaje de casi 3 metros de altura, con una túnica blanca y un cabello adiamantado que le caía por los hombros, de mirada penetrante y pómulos salidos que hacían que mi cuerpo temblara; éste personaje me sonreía y yo sentía que las fuerzas me abandonaban. Entonces oí una “voz” que salió del ser; una voz que aunque no vi mover sus labios, muy claramente oí decirme: “No temas” y este confundido mortal, al oír aquellas palabras, recuperó las fuerzas y me permitieron contemplar al gigante.
- ¿Quién eres?
- Soy Godar
- ¿Para qué he venido?
- Para recordar, quién eres y para qué has venido... Prepárate para dentro de 8 meses...
Aquellas palabras se referían a una invitación para estar con ellos el 28 de julio de 1995, una segunda experiencia que al preguntarles a quien debía llevar conmigo (pues me daba miedo ir solo) fue Toño Cisneros a quien mencionarían, amigo con el cual viajaría a Molen.
Aquel 26 de noviembre de 1994, cerraría un círculo que había comenzado cuando tuve 11 años, junto a mi amigo Fernando Morales. Desde entonces ser el mismo es imposible. Comprender que lo que comenzó con un sueño cuando era niño, era una maravillosa realidad, es algo que modificó sustancialmente mi vida.
Me gustaría que amplíes el siguiente concepto:
Uritorco Mágico: ¿Cómo es eso de que el contacto viene desde el preciso instante en que nacemos y que solo lo recordamos?
Fernando: Creo que el contacto es al igual que diversos aspectos de la vida, parte de ésta. Las personas que han tenido la experiencia, ha sido como la confirmación y el final de un determinado trayecto, o sea, en su interior esta posibilidad nunca fue imposible. El contacto tiene vida propia y está más allá del tiempo y espacio como nosotros lo conceptuamos, como te decía, es parte de la vida y como tal solo debemos estar abiertos de mente para que ello ocurra. La experiencia en sí no la debemos entender que se da entre 2 personas o seres, es mucho más que eso, es entre DOS universos, dos realidades diferentes, entonces ocurre una retroalimentación beneficiando no sólo a la persona(s) sino a las especies que como tal, llegan a interactuar entre sí. Este contacto no lo podemos ubicar ni geográficamente ni en un tiempo determinado, está mas allá del tiempo-espacio como lo conocemos, quizá mucho antes de nuestro propio nacimiento. Si miramos retroactivamente podremos ver que nuestra experiencia se debía dar, y por tanto nuestras vidas “han sido guiadas” por fuerzas que nos llevaron a vivir tal o cual experiencia. Eso sucede en nuestra vida misma, lo que pasa es que quizá no todos llegamos a ver y comprender ello, generalmente esa “guía” funciona en nuestras vidas sin que nosotros seamos plenamente conscientes de ello.
No puedo imaginarme lo que el ser humano puede llegar a sentir al experimentar un encuentro físico con un ser que nos es terrestre y más con las dimensiones físicas que llegan a tener alguno de ellos.
Uritorco Mágico: ¿Entre este primer contacto físico con Godar y los sucesivos encuentros, recibieron alguna otra comunicación en sueños o de una manera diferente?
Fernando: El 2 de enero de 1995, sin saber como era, recibí la primera comunicación psicográfica, medio por el cual al igual que los sueños, fueron dándose como instrumentos de comunicación y desarrollo. Desde entonces tanto la psicográfica (escritura automática) como los sueños han interactuado de forma paralela y contundente. Puedo decirte que el año 1995 fue muy intenso en tanto la presencia de las naves como las mismas experiencias se nos fue dando. Dentro de las cosas que nos fueron diciendo fue la de no mezclar las energías, en ese momento no comprendí a que se referían, pero con el pasar de los años vemos el hambre de conocimiento de la humanidad y la variedad de información que hay, y de no haber el discernimiento apropiado podemos confundirnos en el camino. El SENTIR sería la herramienta eficaz para filtrar lo que tenemos en frente y así tomar la decisión justa para el momento que estamos viviendo.
Más de medio año debía de pasar para ese próximo encuentro con estos seres.
Uritorco Mágico: ¿Se prepararon de alguna manera en especial para aquella cita fijada para el 28 de julio de 1995?
Fernando: Realmente creo que la verdadera preparación que necesitamos es la de ser sinceros con uno mismo. En aquella oportunidad a la invitación me la hicieron a mí solo, pero debo reconocer que la primera vez fue tan fuerte la impresión, aun estando acompañado que tuve miedo de asistir solo, así que les pedí que me permitieran llevar a alguien, la respuesta no se hizo esperar y me sugirieron que fuera Toño Cisneros, a quien luego de hacerle saber de la invitación no dudó en aceptar.
Uritorco Mágico: ¿Cómo fue este encuentro y en qué lugar?
Fernando: Salimos el 28 de Julio de 1995, y el panorama fue más que sugestivo, pasaron cerca nuestro caneplas a unos dos metros de distancia y hubo cerca de unas siete a diez naves muy cerca realizando todo tipo de maniobra, lo que hizo que sólo contempláramos el panorama sin emitir palabra alguna. Hubo un objeto que se detuvo sobre nosotros a unos setenta metros y nos lanzó una luz blanca-anaranjada que iluminó todo como de día pudiendo ver el fuselaje con ventanas y todo, dimos un salto de susto ambos y quedamos paralizados viendo el objeto suspendido emitiendo esa luz intensa que aun siendo fuerte no dañaba la vista. Luego el objeto de desplazaría lentamente dejando plasmada su luz naranja en medio del espacio.
Retomamos el andar y llegamos a la zona de Chuschuco, en medio de esa noche clara y de unos 5 objetos a baja altura que se situaban sobre el lugar de la primera experiencia (26 del 11 de 1994) vimos como un cúmulo de niebla azulina gris iba posándose sobre el suelo formando un círculo como de unos cinco a siete metros de diámetro, no sabíamos de que se trataba, cuando oí una voz en mi mente que me decía "Entren allí" tanto Toño como yo estábamos paralizados, el temor nos tenía mudos, y casi de forma mecánica fuimos acercándonos al lugar, pude ver que sobre la niebla y a varios metros de altura había un objeto circular estático, prendiendo y apagando sus luces.
Así decidimos entrar en la niebla (aún no sabíamos nada de xendras) y vi un túnel dorado y a dos personas como de 1.80 de estatura que salían a nuestro encuentro, uno de ellos me tomó del brazo y se identificó como Oscim, de ahí sólo recuerdo estar parado con él frente a una puerta que se abrió y daba a un salón con una mesa en forma media luna y a 12 seres sentados (¿cómo supe que eran 12?, simplemente lo sabía) entonces Oscim me dijo que estaba frente al Consejo de Menores de Morlen... Todas las palabras no serán suficientes para expresar lo vivido.
Me parece por sobremanera interesantísimo esto que me estas contado y al mismo tiempo es como estar parado a tu lado viendo esta escena.
Uritorco Mágico: ¿Por favor, podrías continuar el relato de tan magnánima experiencia?
Fernando: De hecho, el contar aquello, es como si hubiera pasado ayer. No hay día desde entonces que no venga a mi memoria aspectos de las experiencias.
Volviendo al relato, me encontré frente a esos 12 seres, de quienes 3 se pusieron de pie y comenzaron a hablarme dándome una serie de información, fue ahí en donde les dije que no recordaría tanto, a lo que su respuesta fue que aquello no era para ese tiempo sino para después, para las generaciones futuras que había de conocer.
Dentro de lo más resaltante que me dijeron fue de que el SENTIMIENTO humano, viene del futuro por ello cuando nos “conectamos” con él podemos “intuir” y hasta “ver” lo que ha de venir. En si el propósito de ello es que los seres humanos logremos ANTICIPARNOS A LOS ACONTECIMIENTOS, intensificando aquellos momentos positivos y modificando si se da el caso de los momentos negativos… si nos “conectamos” con ese REAL SENTIR entonces sacaremos enseñanza y aprendizaje de ambos, pues comprenderemos que el SENTIR está más allá del bien y del mal.
En este campo, puedo decir que el contacto cumple la función de RECORDAR ese sentir que no es otra cosa que LIBERTAD. Trayendo consigo el rompimiento de esquemas mentales y sociales, trascendiendo las fronteras, permitiéndonos “ver”, “comprender” y “confirmar” que la REALIDAD en que vivimos no lo es TODO, más bien coexiste dentro de otra de MAYOR alcance.
Al final fue uno de esos 3 seres que se identificó como Oxmuz, luego reaparecía Oscim quien me llevó a un ambiente circular con un ventanal (por así decirlo) al acercarme pude ver el espacio a través de ella, y varias naves, diría cientos, Oscim que estaba a mi lado derecho en todo instante me dijo que esas naves estaban viajando hacia la tierra para el GRAN DIA que sería en el desierto de GOBI, y que tal día dependería del recordar del hombre; de QUIEN ES Y PARA QUE HA VENIDO.
Acto seguido me tomo del brazo como al principio y me llevó por un túnel el cual reconocí que era de salida, lo que confirmó cuando vi de nuevo el desierto de Chuschuco, al voltear hacia el túnel, vi aquella media luna de niebla azulina y dorada y parado en medio a OSCIM quien levantó un brazo despidiéndose diciendo: “Recuerda, que vuestra misión es ser puente entre las nuevas generaciones y los seres de luz”.
Entiendo que durante muchos años has viajado a diferentes partes del Perú, Bolivia, Chile... ahora te invito a que viajemos hacia el presente, al año 2009 donde realizaste tu primer viaje a Argentina visitando dos de nuestras provincias.
Uritorco Mágico: ¿Este viaje marcó un antes y un después en tu vida? Si es así, ¿podrías contarnos el por qué?
Fernando: Definitivo es que en los 15 años que tengo haciendo viajes, cada uno, cada salida, marca muy profundamente en quienes lo hacemos, este viaje a Capilla del Monte no fue la excepción; pues primero fue anunciado por un sueño en el cual yo me veía en la cima de un cerro y de pronto vi salir de un costado del cerro una nave enorme la cual proyectó una luz sobre mi…, entonces pregunté: ¿Qué lugar era ese? y la respuesta fue: el CERRO URITORCO... lo interesante de todo es que yo olvidé por completo aquel sueño de hace casi 2 años antes de ir, y fue Charo quien anotó aquel episodio y lo mantuvo en una libreta. Cuando me llega la invitación de Argentina es que me recuerda el sueño, y sorprendidos vimos como una vez más aquello se cumplió.
El viaje en sí fue acompañado de una rara atmósfera y las vivencias que allí tuvimos fueron dando señales certeras de que el viaje fue programado confirmando una vez más que los guías nos "guían" hacia el encuentro entre gente que estábamos esperando "reencontrarnos" desde hace tiempo. El avistamiento contundente que tuvimos en el mismo lugar donde me hospedaba (sin contar la propia experiencia en el campo) fue la confirmación total de que nuestros pasos son guiados, los cuales abrieron puertas a nuevas interrogantes y respuestas sobre la estadía de la Hermandad Blanca y de "ingresos" a estas bases que desde hace mucho están compartiendo la geografía con la humanidad, no está demás resaltar que los que fuimos a ese encuentro no volvimos a ser los mismos, particularmente, en mi caso el hecho de conocer personas que están tan comprometidas con el cambio hacen de combustible necesario para seguir adelante en este camino...
El viaje a Argentina guardaba también un aditivo emocional muy especial, pues propició a recibir una invitación en la provincia de San Luís para dar una conferencia, la cual guardaba para mí el gusto de poder reencontrarme con Fernando Morales, médico de profesión y que junto a él a los 11 años de edad tuviéramos aquel avistamiento el cual marcó y dio inicio a mi vida a dedicarme a tratar de entender el contacto. Con Fernando nos volveríamos a ver después de más de 25 años, y pude confirmar que el tiempo no había pasado, pues con el mismo sentimiento recordamos aquellos momentos en donde por vez primera, veríamos un objeto luminoso no identificado, (aunque para nosotros estaba claro que era extraterrestre) el cual marcaría nuestras vidas con sueños y experiencias, no pudiendo volver a ser los mismos y desde siempre buscando respuestas. (Continúa)