miércoles, 9 de febrero de 2011

La ciudad perdida de Erks


El Dr. Angel Cristo Acoglanis (El portero de ERKS) :

Las historias que rodean a ERKS entregan pautas importantes, y trazan un camino para el buscador sincero que desee transitarlo. Sin embargo, la senda hacia ese enclave intraterreno, no está exenta de obstáculos, y muchas veces el polvo suele empañar hasta la lente más brillante.

ERKS, una ciudad intraterrena habitada por seres cósmicos

Lo que sigue es solo una aproximación a un tema que se desarrolló en el libro titulado "La Ciudad Perdida de Erks".

Sin embargo en este capítulo describo los puntos más relevantes de una historia que sería difícil de creer si no existieran tantos testimonios de quienes presenciaron las ceremonias de los Terrones, así como los datos ofrecidos por los discípulos más cercanos al Dr. Acoglanis.

Por otra parte, importa señalar que la causa judicial por el asesinato de Acoglanis fue llevada a cabo por la jueza Servini de Cubría, y estuvo sospechada de irregularidades por la Cámara de Diputados de la Nación, junto con el llamado Yomagate.

Otro dato importante: el asesino de Acoglanis se suicidó en 1993, se llamaba Rubén Antonio, y era hermano del financista Jorge Antonio, amigo y protector del General Juan Domingo Perón.

Sarumah

Muy cerca de la sierra del Pajarillo, en una de las faldas del Cerro Uritorco, el tiempo y la acumulación de sedimentos formaron extrañas formas donde hoy se pueden adivinar perfiles de seres humanos, obeliscos, y la silueta difusa de una ciudad perdida. Ese conjunto de tierras rojas, casi piedras, se llama los Terrones.

En ese lugar, ubicado a unos 19 kilómetros del centro de Capilla del Monte, las noches más claras de principios de la década del 80, Sarumah, acompañado por sus seguidores y un grupo de invitados exclusivísimos, realizaba una ceremonia muy singular. Mientras sus seguidores rodeaban a Sarumah, quien extendía sus brazos al cielo e invocaba en una lengua que recordaba lejanamente al quechua, a los hermanos del cosmos.

Según el profesor Guillermo Terrera, que participó de esas ceremonias, esos eran mantras en idioma cósmico o tibetano antiguo. Mientras una testigo, iniciada por Sarumah en los misterios de esas luces, asegura que éste le dijo que se trataba del Irdin, el 51 sánscrito original, lengua original de los extraterrestres.

Un fragmento de esas oraciones se transcribe a continuación:

Guana Imanuak
Guana Igikuna
Guana cuanti
Manuana iku
Naguana y mu
Maiuma guana
Ene gu naiuk
Guana iguaikuana
Guana guanta

Luego Sarumah dirigía su mano hacia un punto del cielo, y pedía que se prestara atención a los mensajes que emitían unas luces que unos segundos antes parecían simples estrellas.

Lugar donde aparecía la ciudad de ERKS

Las luces comenzaban a titilar de una manera extraña, y los más sorprendidos eran aquellos que conocían perfectamente el mapa estelar, y sabían que esas luces no podían ser estrellas. De inmediato, Sarumah bajaba el brazo para señalar un lugar oscuro en el valle, entonces exclamaba, mientras movía lentamente su mano frente a los ojos: “Los hermanos intraterrenos de Erks van a mostrarnos su ciudad”. Y donde antes no había más que vegetación y oscuridad, comenzaban a encenderse las luces de una ciudad, con sus edificios y sus calles. Sarumah satisfecho daba por terminada la ceremonia y emprendían el regreso. Sarumah hacía estas cosas porque era el portero de la ciudad perdida de Erks.

El Doctor Acoglanis

El doctor Angel Cristo Acoglanis era griego y se especializaba en técnicas de acupuntura, dígitopuntura y quiropraxia. Según se sabe había realizado estudios de metafísica en oriente.

Luego en la Argentina se dedicó a sus tareas curativas, convirtiéndose en un profesional respetado y exitoso.

A partir de la década del 70 compró una casa en Quebrada de Luna, muy cerca de los Terrones, donde pasaba la mitad de la semana. El resto de los días los dedicaba a atender pacientes en su consultorio de Buenos Aires.

Sarumah y Trigueirinho

En 1985 Sarumah visitó al escritor brasileño Trigueirinho que se encontraba en Buenos Aires dictando una serie de conferencias.

De ese encuentro el brasileño escribió en su libro Erks, mundo interno, “percibí que nos conocíamos desde siempre. Tanto es así que ninguno de los dos preguntó nada sobre el otro.

Sarumah traía consigo algunos papeles y un gran sobre, que colocó ante mí. Era como si aquel encuentro se hubiera estado preparando hacía miles de años”. Luego, en otro encuentro, Sarumah le dijo con aire de broma a Trigueirinho:

“ Soy el portero de Erks, mi tarea es conducir a Erks a los que deben entrar allá. Al respecto, desde el punto de vista terrestre, este nombre -que por otra parte, es una sigla- puede significar: Encuentro de los Remanentes Kósmicos Siderales”.

En esa misma obra Trigueirinho dice que Sarumah le describió la misión que debía realizar: “la evacuación masiva de millones de seres humanos que se efectuará cuando llegue el momento correcto. Ya se ha evacuado a un número reducido de personas. Durante el último terremoto de la ciudad de México, por ejemplo, fueron llevados hacia Erks 5.000 individuos entre los considerados desaparecidos”.

Las ceremonias

El doctor Acoglanis era el encargado de invitar a diferentes personas a las ceremonias de Los Terrones o al Valle del Silencio, como también se suele llamar a esta zona. Estas invitaciones se realizaban luego de una atenta y cuidadosa selección.

Según un testigo presencial, en el Hotel Roma de Capilla del Monte se realizaba una charla previa con los elegidos, a quienes se los invitaba a partir en coches hacia los Terrones a las 22 horas. Si bien este lugar es privado, Acoglanis poseía una llave del candado de la tranquera, y los automóviles, en fila india, remontaban la cuesta hasta llegar a la playa de estacionamiento del paseo.

Allí se realizaban las ceremonias donde Acoglanis se vestía con una túnica blanca, y sus discípulos más cercanos lo llamaban Sarumah.

Un habitante de Capilla del Monte, muy riguroso para juzgar estos fenómenos, como también estudioso de la astronomía, fue testigo de una de las tantas ceremonia. De ella contó que antes de sorprenderse con la aparición de la ciudad de Erks en otra dimensión, Acoglanis-Sarumah les señaló la estrella Sirio, y sostuvo que Sirio era en realidad una Nave que eclipsa a una estrella. Y cuando le pidió a la nave que respondiera a su saludo, con no poco desconcierto de parte del testigo, Sirio se apagó y encendió tres veces.

Sarumah y Terrera

También en 1985 Sarumah visitó al Profesor Guillermo Terrera en su casa de San Isidro, en la Provincia de Buenos Aires. En esa oportunidad el portero de Erks lo invitó a llevar a los Terrones el Bastón de Mando o Piedra de la Sabiduría, sin embargo, Terrera siempre sostuvo con énfasis que Sarumah y Acoglanis eran personas distintas.

Incluso aseguró que Sarumah le presentó al Doctor Acoglanis en Córdoba. Y cuando se le pide a Terrera que describa la fisonomía de uno y otro, son tan distintos los detalles que aporta que todo resulta confuso.

Más allá de este extraño dato, Terrera, accedió a realizar el viaje, acompañado por la profesora Elsa Tear, quien años después, relató esta experiencia en la revista Yoga Integral:

“De pronto Sarumah pidió a Terrera que se adelantara hacia las luces con el Bastón de Mando. Las energías que Sarumah denominaba las Naves debían cargar, mediante una ceremonia, a la Piedra de la Sabiduría con las Tablas de la Ley para la nueva humanidad”.

A todo esto el lugar se encontraba poblado “de raras luces que se elevaban en la sierra, el cielo y la vegetación. A la distancia que nos encontrábamos parecían tener unos veinte centímetros de diámetro”.

La profesora Tear refiere que luego de esa noche tuvo una serie de visiones y, al día siguiente, Sarumah-Acoglanis, -ella no duda que se trata de la misma persona-, le reveló que ella era de otro planeta, un remanente, que debía cumplir una misión. Sorprendida le pidió que se manifestara tal cual era, a lo que Sarumah contestó: “Por ahora no puedo mostrarme ante usted como soy realmente porque usted se desmayaría. Por su vibración actual no lo podría soportar. Yo soy iridiscente. Soy un ser de luz”.

La profesora Tear refiere también algo muy importante. “Desde el primer momento en que nos conocimos, Sarumah me dijo que debía partir muy pronto, de ahí su prisa por mi preparación espiritual. Yo suponía que su partida sería en una Nave, pero nunca supuse que fuera en forma de muerte violenta, como aconteció”

El crimen

Lo ocurrido fue tan singular y misterioso como todo lo que rodeó a Acoglanis.

En 1988 estando en su consultorio de Buenos Aires atendiendo a sus pacientes Acoglanis recibió la visita de un amigo muy íntimo. Mientras sus pacientes esperaban en una sala lo hizo pasar a la cocina, donde le sirvió un café. De improviso su amigo extrajo dos revólveres y le disparó el cargador en el pecho. Guardó el arma en el bolsillo y pasó entre los pacientes aterrorizados de Acoglanis. A unos cincuenta metros del edificio donde estaba el consultorio de Acoglanis, en Callao y Las Heras se encuentra la Comisaría 17, hacía allí se dirigió su matador.

Este, cuando el policía de guardia lo detuvo, le dijo; “vengo a entregarme, acabo de matar a un brujo, y a los brujos hay que matarlos”.

Este hombre fue considerado demente por la justicia y, tres años después del crimen, se suicidó arrojándose de una terraza. Si bien aquí parece terminar esta historia, a partir de la muerte de Acoglanis, Trigueirinho publicó sus dos libros dedicados a Erks y Sarumah: el ya citado Erks, mundo interno, donde oculta el emplazamiento de la ciudad perdida, y Señales de Contacto, obra dedicada íntegramente a esta ciudad intraterrena, y donde no deja dudas sobre su ubicación junto al Cerro Uritorco.

Muchas personas dicen haber ingresado mental o físicamente a esta ciudad, a la que describen como enorme y espaciosa, cruzada de canales secos donde transitan naves de luz o etéricas, y en cuyo centro se encuentra el templo de la esfera o de los tres espejos, con el cual se intercambian datos cósmicos y pueden seguir en detalle la vida de cada ser humano.

Existen muchas grabaciones de audio que son presentadas como el sonido que realizan estos gigantescos espejos cuando se mueven dentro del templo.

Pero dejemos a Sarumah describir este templo. Para ello transcribimos el relato que le hizo a Elsa Tear:

“Contamos con tres tipos de espejos. Los primeros, más simples, son de lapislázuli. A través de ellos podemos visualizar todo lo que pasa en el planeta. Lo que piensan y sienten cada uno de nuestros elegidos a través de nuestras naves. Los segundos espejos son de oro y a través de ellos podemos saber todo lo que pasa en la galaxia y en sus diversos sistemas solares, habitados por las distintas y variadas formas energéticas, y además hacer una instantánea conexión entre nuestras naves madres y naves de rastreo, que hay millones de ellas en estos momentos rodeando a vuestro hermoso planeta Tierra para vuestra protección. Y los terceros espejos están hechos de una aleación de minerales desconocidos por ustedes porque no existen en la Tierra, mediante los cuales con la velocidad del pensamiento nos podemos intercomunicar con todo el Universo”.

La Ciudad Perdida de ERKS

Se dice que ya en 1974 se realizaban ceremonias en las sierras de Córdoba, donde los iniciados en los secretos de Erks podían observar la Ciudad Perdida, pero los testimonios más confiables señalan que todo comenzó en 1984.

Ese año, el doctor Ángel Cristo Acoglanis atendía los lunes, martes y miércoles en su consultorio de la ciudad de Buenos Aires, mientras los miércoles a la tarde viajaba a Villa Allende, una ciudad muy cercana a Córdoba capital, donde también tenía pacientes y había constituido su domicilio legal junto a su mujer y sus hijos.

Pero los viernes a la tarde viajaba a Capilla del Monte. Allí, al acercarse la noche se trasladaba a la Quebrada de Luna o -como se la ha rebautizado en estos últimos años- Quebrada de La Luna, ubicada a menos de 10 kilómetros de Capilla del Monte, y sin ninguna compañía subía a Los Terrones para tomar contacto con los habitantes de una ciudad ubicada en un lugar impreciso bajo la superficie terrestre, o quizás escondida en una dimensión recóndita.

Esa ciudad que se había perdido en algún momento del tiempo, y Acoglanis redescubría cada viernes a la noche, se llamaba o quizá se siga llamando Erks. Aún hay muchos puntos oscuros en esa ciudad, pero nadie duda que allí reina la sabiduría y el amor. El lugar donde el doctor entablaba ese diálogo tan particular con los habitantes de Erks, Quebrada de Luna se encuentra habitada por unas pocas familias criollas que viven en casitas humildes pero confortables, esparcidas en un paisaje de suaves y ondulantes cerros.

Sin embargo esta monotonía se ve alterada por una zona de tierras rojas llamada Los Terrones, ubicada a unos cuatro kilómetros de la ruta nacional 38 y en la ladera noroeste del Cerro Uritorco. En ese sitio la naturaleza con el auxilio del viento y las lluvias ha creado un conjunto de esculturas naturales de tierra roja y piedra, que copian formas y perfiles humanos.

Este parque se encuentra elevado sobre la Quebrada, y subiendo por un camino de tierra se llega a una explanada que permite observar toda la quebrada y, en especial, el Valle del Silencio o Valle de Erks, donde estaría emplazada la Ciudad Perdida.

En 1985 las ceremonias de invocación de Erks se hicieron más frecuentes y, poco a poco comenzaron a asistir amigos y conocidos del doctor, que personalmente había elegido y preparado para vivir ese momento extraordinario. En sus mejores épocas esas reuniones llegaron a convocar a más de 40 personas por noche, y todo indicaba que ese número se hubiera duplicado con el correr del tiempo, si no se hubiesen producido los desagradables sucesos de abril de 1989 cuando todo pareció derrumbarse definitivamente.

Dr. Angel Cristo Acoglanis

Los dicípulos :

A las ceremonias asistían los discípulos que Acoglanis había congregado entre sus pacientes o amigos más íntimos. Luego el espectro de elegidos se fue ampliado hasta abarcar a personas muy distintas al grupo original. Incluso muchos iniciados comenzaron a presentar a nuevos candidatos, que previa aprobación del doctor, eran iniciados en los secretos de Erks. En los primeros tiempos las personas que participaban en la ceremonia se reunían en el Hotel Roma de Capilla del Monte.

Allí mismo el doctor atendía a sus pacientes cordobeses y se alojaba durante sus breves estadías en el pueblo. Luego el doctor compró una casa muy cerca de los Terrones y muchos elegidos ni siquiera tuvieron necesidad de conocer Capilla del Monte. Cuando oscurecía Acoglanis reunía a sus discípulos en el comedor del hotel y les pedía que no se dejaran llevar pasivamente por lo que iban a ver y, en cambio, los urgía a extraer alguna enseñanza espiritual del fenómeno.

Estas palabras las conocían muy bien los discípulos, ya que las leían periódicamente en unos documentos mimeografiados que recibían puntual y discretamente en sus casas. Por esos papeles sabían que esa ciudad misteriosa e invisible alojaba a 18.000 seres desde tiempos tan antiguos que era inútil hablar de siglos. Pero una cosa es leer y otra muy distinta es presenciar lo imposible.

El viaje :

Cuando el doctor consideraba que ya estaba todo dicho, daba la orden de partir hacia Los Terrones. Con suma discreción subían a los automóviles, cruzaban el pueblo y se dirigían por la ruta nacional 38 a la Quebrada de Luna.

Luego de recorrer unos 10 kilómetros giraban a la derecha y se internaban por un camino de tierra. A esta altura del trayecto la oscuridad sólo dejaba ver algún pequeño y amarillento cuadrado de luz que señalaba las casas de los habitantes de la quebrada. Unos kilómetros más adelante, las empinadísimas cuestas hacían rechinar los motores, y ya próximos a Los Terrones, quienes visitaban por primera vez el lugar, no podían menos que sorprenderse, al encontrar en esas sierras poco conocidas unos gigantescos monumentos de piedra, envueltos en una luminosidad rojiza y espectral, que parecía provocada por la luz de la Luna. Luego se darían cuenta de que era el lugar el que emanaba esa claridad.

El camino terminaba medio kilómetro adelante, y después de estacionar los automóviles bajo unos árboles, los expedicionarios caminaban unos pocos metros a oscuras hasta el borde de una explanada, que sin protección se asomaba al deshabitado Valle del Silencio.

La ceremonia :

Entonces alguna voz pedía silencio, y de las sombras surgía un hombre vestido con una túnica blanca. Su sola presencia provocaba una excitación tan marcada entre los convocados, que muchos se tomaban del brazo de la persona que tenían al lado para no perder el equilibrio. Sin embargo, conocían muy bien al oficiante. Su nombre era Sarumah.

Sarumah pedía entonces que formaran un círculo a su alrededor, levantaba los brazos al cielo y comenzaba a invocar en un lengua desconocida a los hermanos del cosmos y, sobre todo, a los ancianos de la Ciudad Perdida de Erks. Entonces ocurría algo extraño. Unas luces cruzaban entre las estrellas y se sumergían en el valle.

Todo ocurría con tanta rápidez que muchos se preguntaban si había ocurrido en realidad o era sólo producto de la imaginación. Pero enseguida unas esferas de luz, más grandes que las primeras, emergían de la tierra y recorrían el camino inverso. En ese momento ya nadie dudaba de lo que habían visto.

Luego Sarumah señalaba a Sirio. Muchas veces Acoglanis les había dicho que esa estrella era en realidad una nave gigantesca estacionada en los cielos desde miles de años atrás. Esa estación orbital que había logrado engañar a los astrónomos más perspicaces y burlado la tecnología del presente, era el receptáculo de esas otras pequeñas naves que acaban de ver.

En los documentos se informaba que esas naves realizaban misiones en la tierra y se refugiaban temporalmente en diferentes ciudades ocultas similares a Erks, diseminadas en todo el planeta. Las pequeñas esferas de luz que los elegidos veían sobre las sierras eran naves, igual que Sirio, sólo que ésta era una nave muchísimo más grande.

Pero Sarumah conocía la testarudez de los hombres, entonces volvía a invocar a los hermanos del cosmos, y ocurría lo imposible. Esa estación orbital, que hasta unos segundos antes muchos habían creído una estrella, ahora apagaba y encendía su halo de luz realizando destellos pausados, como si enviara un mensaje de luz."Ellos nos saludan y nos dan la bienvenida", exclamaba entonces Sarumah.

En ese momento ya nadie conservaba su lugar en el círculo que se había formado al comenzar la invocación. Dispersos y con la mirada fija en el cielo, los convocados se abrazaban a sí mismo y no podían hacer otra cosa que temblar ante la evidencia de haber espiado en un repliegue del misterio.

Zigzagueantes hilos de luz :

Llegado el momento, Sarumah les pedía que se alejaran de los bordes de la explanada que, sin ningún resguardo, se precipitaba a unos peligrosos barrancos. Recién cuando la gente estaba lo suficientemente alejada del límite, realizaba su tercera invocación.

Y el Valle del Silencio comenzaba a irradiar una tenue luminosidad que latía despaciosamente. Pero de pronto, un chispazo sorprendía a todos, y enseguida cientos de zigzagueantes hilos de luz emergían desde la superficie de la tierra dibujando algo que parecía un contorno. Y así, frente a los ojos de los que tenían fe, como también de los escépticos, aparecía una ciudad de varios kilómetros de extensión, en el mismo lugar donde unos minutos antes no había nada.

Esa ciudad era Erks. En ese mismo momento se escuchaba el gemido de alguna persona, y el ruido seco que hacen los cuerpo al golpear en el suelo. Entonces Sarumah abandonando su apostura sacerdotal corría hacía los caídos, y volviendo a su condición de médico, socorría a los elegidos que se habían desmayado. En ese momento Sarumah volvía a ser el doctor Acoglanis.

Una verdadera ciudad :

Este relato sintetiza casi una veintena de reuniones que se desarrollaron en Los Terrones entre 1984 a 1989, y donde nunca faltaron a la cita las naves y la ciudad de Erks. Cerca de 150 personas tuvieron el raro privilegio de presenciar esas apariciones.

La mayor parte de ellos habían sido elegidos y preparados personalmente por Acoglanis quien, sobre todas las cosas, les pedía que no difundieran lo visto, " hasta que llegara el momento".

Pero en abril de 1989 ocurrió algo terrible. Acoglanis fue asesinado por uno de los más consecuentes asistentes a las ceremonias.

Muy pronto las noticias sobre Erks comenzaron a ser publicadas en diarios, revistas y libros, pero a diferencia de otros hechos misteriosos que fueron aceptados sin demasiado juicio, el caso Erks se fue apagando lentamente, casi hasta desaparecer.

La indiferencia hacia Erks provoca, por lo menos, sorpresa, y lleva a sospechar que existió un intento deliberado de ocultar la ciudad sumergiéndola en el olvido. Más allá de creer o no en la existencia de la ciudad, llama la atención que habiendo sido el asesinato de Acoglanis una de las causas, presentadas por un grupo de legisladores contra la doctora Servini de Cubría, junto con el llamado Yomagate, con la intención de realizarle un juicio político que luego no prosperó, nunca se haya mencionado a Erks.

Por otra parte los discípulos que presenciaron las ceremonias de Erks no tienen dudas sobre lo que vieron. Lo cierto es que a medida que se investiga el caso Erks, se habla con los testigos, que por otra parte no siempre pertenecieron al círculo cercano a Acoglanis/Sarumah, y se analizan diferentes circunstancias, uno debe rendirse ante la evidencia de que en Los Terrones aparecía una ciudad, mientras circulaban por el lugar cientos de esferas de luz.

Trigueirinho (El escritor de la obra de Acoglanis / Sarumah) :

En la saga de Erks, el místico de origen brasileño, conocido popularmente como Trigueirinho, ocupa un rol más que destacado.

Este escritor recibió algunos documentos, que según dijo le fueron proporcionados por el misterioso Sarumah, ¿Acoglanis? acerca de la estructura oculta de la ciudad intraterrena argentina. Toda esta información Trigueirinho la fue volcando en varios libros, prolífera producción que continúa hasta nuestros días.

La obra que hoy nos hacemos eco, corresponde a Erks, Mundo Interno (1989), que da cuenta sobre Saruma, además de un valioso documento fotográfico, que lo transformaron en un referente bibliográfico imprescindible, para profundizar sobre Erks. La influencia teosófica es más que palpable en Trigueirinho, un dato para tener en cuenta.

La tierra y el cielo - El encuentro con Sarumah

Una colaboradora se acercó a mí tras la reunión grupa¡ de meditación, y me dijo en voz baja y pausada: "Un señor quiere venir a hablar con usted. ¿Para cuándo podremos citarlo?".

Le respondí que iría a consultar mi agenda, pero no lo hice de inmediato. Al día siguiente, ella volvió a decirme, con el mismo tono: "El quiere venir. ¿Verificó usted en la agenda cuándo podrá ser?".

Entonces fui a consultar las anotaciones. El único momento que había disponible era a las trece horas de un miércoles, algunos días después, puesto que todos los demás horarios ya estaban reservados para otros trabajos.

Después supe que el miércoles a las trece horas era para aquel señor el momento ideal y, tal vez, uno de los únicos posibles. Llegó momentos antes de la hora establecida, y luego que entramos en la sala de trabajo nos miramos en los ojos. Percibí que nos conocíamos desde siempre. Tanto es así que ninguno de los dos preguntó nada sobre el otro. Sarumah estaba al lado del escritorio y muy cómodo.

Traía consigo algunos papeles y un gran sobre, que colocó ante mí. Era como si aquel encuentro se hubiera estado preparando hacía miles de años. Impresiones como esa son posibles y, debido a una certidumbre intuitiva se tornan confiables, seguras, y tan claras que no dejan margen a las dudas. Por ello, al estar ante un ser que conocemos desde siempre, podemos identificarlo, sin necesidad de fenómenos comprobatorios en el nivel de la consciencia común.

La conversación empezó directamente en el punto esencial para el trabajo que se iniciaría. Sabíamos que las cosas no tienen principio ni fin, según llegó a verbalizarse en cierto momento de nuestra conversación; ellas existen desde siempre, no empiezan ni terminan: sencillamente son.

Aunque conociendo ese estado de consciencia que está fuera del tiempo normal humano, experimentábamos, allí, esta interesante forma de ilusión: nos parecía que se evidenciaba un nuevo ciclo. Prestándonos alegremente a ese juego de las formas y del tiempo, nos dimos por felices; una ola de energía de Amor se apoderó entonces de nosotros de inmediato, y así conversamos con claridad sobre todo lo que nos parecía necesario.

Yo sabía de la existencia de individuos parecidos a aquel que estaba ante mí, pero no tengo consciencia de haber estado, hasta entonces, físicamente, con uno de ellos. Lo que Sarumah me transmitía, como impresión, era su perceptible seguridad interna respecto a todo. Nuestro "ser", en sus aspectos interno y externo, estaba allí, presente y participante.

Tras ese encuentro, tuvimos otros dos más, aún en aquel mismo mesa concertamos la entrevista siguiente para seis meses después y volví al Brasil donde otros sectores del trabajo me aguardaban con una serie de tareas. Este libro comenzó a ser escrito dos meses después de esos encuentros iniciales, y fue terminado en 48 días, teniéndose en cuenta la necesidad de que se divulgara su contenido.

Sarumah me trajo fotos, anotaciones y un pequeño manual ilustrado, conteniendo ejercicios básicos. Ese material me fue siendo puesto ante los ojos, que al verlo ni por un momento se admiraron pues hacía mucho que lo conocían interiormente.

Empero, estaba claro que era la primera vez, en esta encarnación, que ese rubro del trabajo evolutivo, representado por Sarumah, era traído de aquella forma a mi yo consciente. Parecía necesario comprobar y vivir esa experiencia también en los planos físico, emocional y mental.


El acompañamiento de lo que ocurre en la tierra y de lo que sucede con los individuos "autoconvocados" es un hecho, en este período actual. Lo que pude observar con el contacto con Sarumah y también en otros momentos es que los yoes superiores de los "autoconvocados" están en perfecta sintonía con la colaboración que los seres de otros sistemas planetarios y hasta de otras galaxias dan a la tierra. Un trabajo interior ha de hacerse con apoyo mutuo, y de él no siempre están conscientes las personalidades terrestres.

"Soy el portero de ERKS", me dijo Sarumah con aire de broma. "Mi tarea es conducir a ERKS a los que deben entrar allá." Al respecto, desde el punto de vista terrestre, ese nombre -que, por otra parte, es una sigla- puede significar: "Encuentro de los Remanentes Kósmicos Siderales", aunque no sea sólo ese su significado, y ERKS no tenga solamente esa función.

"¿Quién va hacia allá?", le pregunté; "¿Cuál es el criterio de esa elección?" "No somos nosotros quienes escogemos", me dijo; "quien tiene que ir allá ya está escogido. A nosotros sólo nos corresponde reconocerlo. Aquellos que irán están listos para recibir el nuevo código genético."

La respuesta a mis preguntas no provenía en aquel momento sólo de Sarumah sino también de lo profundo de mi ser, que me decía: "Entre los ,llamados, están los escogidos, que son los que optan libremente y bajo la propia responsabilidad, por seguir una evolución consciente. Así, salen del ritmo natural de la mayoría". Otra vez sentí que Sarumah y mi yo profundo estaban en perfecta sintonía, o mejor dicho, que eran para mí una realidad única.

En cierto modo, las informaciones que se me estaban dando eran, como ya dije, conocidas. Sin embargo, me puse a leer los escritos, anotando los puntos que necesitaban estudiarse mejor cuando me encontrase nuevamente con Sarumah, y cuando estuviese en mis momentos de mayor recogimiento.

Hubo algunas conversaciones telefónicas entre Sarumah y yo. A través de esas comunicaciones él me dio noticias sobre futuros libros que, por lo que comprendí, estaban "listos" en los niveles superiores de la consciencia: yo sería usado como canal para su materialización.

Sentía la presencia de Sarumah en mi interior. El desarrollo del centro energético de su corazón me ayudó a "comprender" muchas cosas a distancia, pero no lo sé decir en términos racionales, cómo ocurrió eso. No existe posibilidad de explicaciones en ese campo. Lo que puedo afirmar a ese respecto es que mis contactos con Sarumah me llevaron a ver al planeta Tierra como si yo estuviese, en ciertos momentos, fuera de él.

Llegué a percibir, desde un nuevo punto de vista, lo que antes me parecía normal. Los hechos relativos al presente desequilibrio ecológico, al igual que situaciones humanas desarmoniosas, cuando se las encara a partir de ese nivel de consciencia más amplio nos llevan a comprender por qué un ser como Jesús, en aquella encarnación suya hace dos mil años, jamás sonrió.

Sarumah es miembro de un grupo encargado de la evacuación masiva de millones de seres humanos que se efectuará cuando llegue el momento correcto. La evacuación de un número reducido de personas ya viene ocurriendo, según las informaciones que él me dio. Durante el último gran terremoto de la ciudad de México, por ejemplo, me dijo Sarumah que fueron llevados hacia ERKS 5.000 individuos entre los considerados "desaparecidos".

Las fotos de las astronaves y, principalmente, la foto de la red de iluminación de ERKS materializada para que quedara documentada su existencia, estaban allí frente a mí. Interiormente, yo sabía que no se trataba de fraude fotográfico, y las vibraciones que sentía venir de ellas indicaban que Sarumah omitía muchas informaciones, al hacer rápidamente la síntesis de todo aquello para mí. "Volveremos sobre el tema", nos decíamos uno al otro.

"Tenemos tiempo, hasta que llegue el momento". La evacuación masiva se está preparando poco a poco en los días actuales, y para ella yo ya estaba siendo convocado. Puede preguntarse qué sucederá con aquellos que no fueron recogidos.

En un proceso de crisis planetaria como éste que estamos ahora viviendo, se producen muchos reencauzamientos, siempre en sintonía con la evolución del Todo Mayor. Por tanto, parte de los seres que habitan esta Tierra desencarnará y no volverá a reencarnar aquí, sino que pasará a otro sistema planetario.

Esas almas ya se aprontan para esa transmigración, cuando sean conducidas a un lugar "ya preparado para ellas", según una amorosa frase que llegó a mi conocimiento. Allá, en un planeta que aún no es físico, recomenzarán a partir de la vida primitiva, teniendo todas las oportunidades de aplicar la experiencia anteriormente hecha en la Tierra. Los seres que pueden acompañar el ritmo de la nueva consciencia planetaria terrestre permanecerán aquí, encarnados o no, viviendo en un estado de consciencia superior al actual.

La presencia física de Sarumah cambió la atmósfera del recinto en el que me encontraba, y las fotos, que guardé en sobres pero que quedaron siempre allí cerca, irradiaban mucha energía positiva y curativa. Eso lo usufructuaron personas que vinieron al departamento luego de nuestros encuentros.

Poniendo la palma de mi mano sobre las fotos, pude distinguir claramente la diferencia de vibración que existe entre una nave espacial proveniente de Júpiter y una de Marte; entre una de Saturno y una de Venus. Una de ERKS, que se dejó fotografiar en cuatro velocidades al mismo tiempo, irradiaba un calor característico, y con ella se experimentaba profunda afinidad.

Pero no terminaremos este capítulo sin registrar otra función importante de los seres extraterrestres que, en todos los tiempos, aparecen bajo el ropaje de yoguis o instructores de la humanidad. Su presencia irradiante transmuta la atmósfera psíquica de este planeta, en los planos de consciencia en los cuales se organizan las encarnaciones. Incluso, debido a esa irradiación especial, almas evolucionadas pueden venir hasta la tierra y encarnar aquí, porque existe la calidad de magnetismo adecuada para atraerlas.

Ese magnetismo, sin el cual sólo encarnarían almas de nivel evolutivo mediano, es alimentado continuamente por Seres que están en cuerpos físicos, irradiando la energía inclusive del amor cósmico. Sabemos, aunque eso no puede ser comprobado concretamente, que no habría posibilidad de que ciertas almas más evolucionadas descendieran hasta la encarnación terrestre, si ciertas presencias no estuviesen aquí, abriéndoles el camino entre la densidad general.

Uno de los secretos de los "maestros escondidos", que en el pasado vivían en grutas o en los desiertos, era el de estar aquí en la tierra no en función del propio progreso o del propio desarrollo espiritual, sino en beneficio de la humanidad. Babaji, conocido principalmente en el Oriente y vinculado internamente con Yogananda, es un ejemplo de esos Seres de rara capacidad de sacrificio.

Pueden estar en cuerpos físicos o etéricos, entre nosotros, participando en civilizaciones visibles o invisibles. Sin embargo, no son accesibles a través de contactos parecidos a los que seguimos teniendo en nuestra vida común.

Muchos campos de conocimiento serán abiertos al Hombre, en un futuro próximo. Lo que en el pasado estaba reservado para una minoría, tras los próximos y significativos acontecimientos mundiales será claramente anunciado desde lo alto de los tejados.

Betty Acoglanis “Bajo la sombra de Erks”

Hoy vamos a presentar la figura de Graciela Beatríz Mühn, más conocida como Betty Acoglanis, y que como los lectores ya habrán adivinado, fuera esposa del malogrado Angel Acoglanis, el portero de ERKS.

De esta mística tuve conocimiento hace un año a través de Fernando Díz, quién le organizó su primera presentación pública en Capilla del Monte, con récord de asistentes donde presentó su libro, Erks … camino de retorno.

Personalmente durante mi estancia en el lugar el verano pasado, tuve oportunidad de leer el flamante material, aunque no llegué a comprarlo.

Sin embargo a través de una rápida lectura, pude darme cuenta que mucho de los capítulos tenían cierta sintonía con el trabajo del escritor de origen brasileño José Trigueirinho Netto, personaje citado en más de una oportunidad por Crónica Subterránea, en cuanto a la saga ERKS. Además de Trigueirinho, se advierten algunos pasajes que remiten al profesor, ya fallecido, Guillermo Terrera, otro destacado dentro de esta historia.

Como muestra de nuestra percepción citamos un capítulo de esta publicación que remite a muchos lugares comunes, y criticados en más de una oportunidad desde nuestro blog, por considerar que no éste el camino, en base al contactismo que llevará a la resolución de enigma que representa la ciudad perdida. Y esto hace que preguntemos cual es el valor de esta mística que por ahora solo parece refritar datos ya conocidos, sin aportar demasiada información nueva.

No obstante antes de emitir una opinión definitiva, esperamos ampliar la información, y no perderle la pista a las que muchos señalan como la heredera de Acoglanis, quién la habría iniciado en los misterios de ERKS.

ERKS …Camino de Retorno

ERKS es un centro energético de interconexión cósmica. Ubicado en los niveles suprafísicos de la formación montañosa denominada "Los Terrones", Quebrada de Luna, Capilla del Monte, Córdoba, Argentina.

Su despertar reveló y preparó las condiciones necesarias para que a través de su Espejo Mayor se manifestase el Propósito Divino. La Hermandad otorga así el impulso necesario para que el Ser Humano se abra al contacto e interacción con la Jerarquía Espiritual que es parte de su origen, de su familia cósmica.

Está esfera de luz dorada, contiene dentro de sí la gran ciudad de ERKS, llamada también "Ciudad Dorada". Por el profundo proceso alquímico que se origina al contacto con su fuente .

Conduciendo al hombre al despertar de su mundo interno, de su esencia Divina. La vida en su interior está regida por códigos de vibración, escalas sutilísimas que acompañan la evolución de los seres que allí habitan.

Seres intraterrenos y extraterrestres. Los primeros son los guardianes que protegen las entradas físicas a dicha ciudad, los secretos a ser revelados en el tiempo del despertar y la unidad alcanzar por la interrelación con toda la hermandad. Los seres extraterrestres, lo conforman las hermandades planetarias, solares y cósmicas convocadas por el Gobierno Celeste Central, son representantes de distintos linajes jerárquicos que acompañan la evolución de un sistema planetario, ya que el proceso a vivir será micro y macrocósmico. Dentro de esta inmensa ciudad que abarca un radio aproximado de 80 Km cuadrados, existen Siete Templos relacionados a los siete rayos y los siete planos, son los que generan por frecuencia electromagnética el despertar de la conciencia del hombre y lo conducen a la fusión que ejerce el Templo Mayor de la Esfera. Este Templo contiene las nomenclaturas que conducen a la fusión, integración y trascendencia macrocósmica.

Los planos de actividad en que actúan son: físico, emocional, mental y espiritual dentro de la realidad tridimensional y dentro del nivel superior son búdico, átmico y monádico, conduciendo dos corrientes energéticas de relevancia, La Redención y la Revelación.

Ambas se complementan para el renacimiento espiritual de la humanidad. En mi primer viaje he podido conocer la biblioteca de ERKS, allí se encuentran nuestros libros, nuestra historia, nuestro caminar en el pasado y en el presente, como también las hojas en blanco que determinan nuestro continuar hacia el cumplimiento que no se revela en totalidad, pero que si existe como información en los Espejos.

Los tres Espejos unen los mundos internos, los de superficie y los cósmicos. Revelan y generan las corrientes que conducen el proceso gradual de interrelación y síntesis. Estos Espejos cumplen distintas funciones, transmutación, revelación e integración. Los mismos se encuentran, en los Templos, en las salas de los Consejos y en las naves. Las naves tienen áreas de descenso. Existen la Naves Madres Mayores enormes ciudades flotantes, sirven a su vez como bases o estaciones de interconexión macrocósmico.

En ellas se trasladan los grandes representantes del Plan evacuación o Rescate. Es el Comando Asthar. Dirigido por el Cristo Cósmico "SAMANA". La Nave Alfa, es una ciudad estelar, un inmenso laboratorio sideral, la Jerarquía de Cura de Soind viaja en ella, son los seres curadores, ellos no solo se ocupan de los planos internos del hombre sino del Planeta y el sistema. Son parte del Grupo de unidad con el centro de Cura de Aurora. La Nave Alfa Omega, conducida por el comandante Mianuk, es quien traslada a Samana. La Nave de Sikuma, Saruma y Taykuma son Naves Mayores, ellas pertenecen a la tríada energética que conduce al hombre a su origen y que se encuentran dentro de ERKS.

Sí bien es cierto que al activar ERKS el comandante Mayor fue Witaykon y la comandante de contacto fue Maia, hoy ambos comandantes con sus respectivas Naves Mayores pertenecen a los dos centros de redención. Iberá Océano y Laguna. Cuando llega al área interna de ERKS, el comandante Mayor Sikuma, representante Solar, asume la misión que se le confiere hacia el plano de la materia dede los mundos suprafisicos y Cósmicos. Hoy Sikuma y Saruma son los dos representantes mayores del programa que conduce ERKS hacia el retorno al hogar.

Hay Naves pequeñas, con capacidad para tres seres, vehículos de menor porte que viajan a gran velocidad entre los planos internos conectando los distintos centros activados. La estructura social se constituye por los representantes del Consejo de Ancianos de ERKS, el Consejo Alfa Omega y los representantes Solares y Planetarios pertenecientes al grupo álmico de los Uma. Cumplida la misión o propósito divino, ellos también retornarán a su planeta de origen. Se habrá instaurado un nuevo mundo pleno de luz y hermandad.

Sus representantes

TAYKUMA: fue la madre de Jesús en su ciclo anterior. Hoy es la gobernante Mayor de los Espejos del Kosmos. Los espejos conforman la red de comunicación planetaria y cósmica.

NAGUALKUMA: es la máxima jerarquía Sacerdotal del Templo Mayor de la Esfera. Es el representante directo de Shamballa. Fue convocado para crear dentro del mundo interno la resonancia del despertar Crístico Espiritual de la especie humana.

ADONAISEN: es la máxima jerarquía Sacerdotal Femenina del Templo Mayor de la Esfera, es el complemento de unidad Crística que aporta el conocimiento y la formación del Ser al despertar de su conciencia superior. Es la representante del Espejo Mayor de Anu Tea, y quien revelará en su momento la integración con la fuente de origen.

SIKUMA: Sacerdote Mayor del linaje jerárquico Solar, representa a los autoconvocados conduciendo dentro del área la tarea de contacto y despertar. Se ocupa del rescate de conciencia y la integración con la fuente de Luz mayor. Es el conector de los grupos y las escuelas internas. A su vez como comandante Mayor del plan Rescate, realiza la tarea de anclajes energéticos dispuesto dentro de la ley de Retorno.

ASTHAR ASGRAN: Pertenece a la quinta jerarquía Crística. Es el comandante que revelará al hombre la identidad de su unidad álmica consagrada a la voluntad divina.

KALKANTIN: Cacique Guerrero de Máxima jerarquía Espiritual, su tarea consiste en proteger los grandes portales que conducen al mundo interior. Fue nuestro guía en el sendero marcado por la ley de integración del plan divino.

SARUMA: Es una conciencia estelar con diversas responsabilidades y actividades a su cargo a nivel intergaláctico. Como miembro de la jerarquía cósmica se encuentra al servicio de la órbita terrestre. Por su misión dentro del plan Rescate se autodeterminó portero de ERKS.
Como integrante de los denominados Jardineros del Espacio su morada es la estrella Taygeta, ubicada en las Pléyades, constelación de Tauro, dentro de nuestra vía láctea. Como Jardinero del Espacio y miembro del Consejo Alfa Omega , Saruma trabaja en cooperación con la Jerarquía de Cura Soind, a bordo de la Nave Alfa.

Por esta razón comprenderán que el llamado de convocatoria realizado desde el centro de Aurora integró la tarea que oportunamente asumiera Acoglanis como cuerpo físico y Saruma como ser cósmico. Ambas se integraron al plan establecido por el gobierno celeste central. Saruma sigue siendo el puente entre la Humanidad y la Jerarquía intergaláctica. A través suyo la humanidad llegó a conocer la existencia de los centros energéticos hoy activos.

GUATUMA: Es sacerdotisa Mayor del Espejo de Erks y comandante que representa la tarea de integración y revelación con los misterios iniciáticos del camino de Retorno.

Existen muchos seres que comparten la tarea, forman parte de los siete planos y actúan dentro de un sistema de interacción con la fuente que desarrolla ERKS en la convocatoria.

"ERKS ES EL CAMINO DE RETORNO, ES EL ENCUENTRO CON HERMANDADES PLANETARIAS, SOLARES Y CÓSMICAS. ES LA UNIÓN ENTRE EL MUNDO INTERIOR, LOS SERES DE SUPERFICIE AUTO CONVOCADOS Y LOS MUNDOS SUBJETIVOS"

Fuentes consultadas :

- Crónica Subterránea - Débora Goldstern



Video documental “Uritorco, el cerro que truena”