sábado, 20 de octubre de 2012

SALIDA A MONTE SHASTA. 21, 22 Y 23 DE SEPTIEMBRE, 2012
Conversando con los Guías de Venus
Enrique Villanueva
ANTECEDENTES

22 años atrás ocurrieron eventos que realmente cambiaron mi percepción de la realidad. 1990 fue el año en que tuve en Perú mi segundo y último encuentro con los guías en una experiencia corta pero significativa, la que me mostró que no estaba tan preparado como yo creía para afrontar lo extraordinario. Fue también el año en que perdí la memoria de 4 horas en una experiencia de contacto en el desierto de Chilca; pero sobre todo, 1990 fue el año en que la 4ta dimensión de conciencia mencionada por nuestros instructores extraterrestres pasó a ser una experiencia concreta para mí, la que solo 10 años más tarde conseguí al fin plasmar en el libro: "Yo Viví 4 Días en la 4ta Dimensión".
Desde entonces y si bien esporádicamente seguí difundiendo lo vivido con el Grupo Rahma, mi actividad se concentro más en el lidiar con la cotidianeidad del trabajo y la familia, para de vez en cuando apoyar a los amigos del grupo de contacto que habían hecho de la difusión del mensaje extraterrestre una misión de vida y a quienes admiro profundamente por su gran trabajo y sacrificios.
Recientemente sin embargo, evento singulares y visiones de familiares y amigos del grupo apuntaban a que algo importante podía vivirse en el Monte Shasta. Mi esposa Naomi había soñado que Luis Fernando Mostajo, Ricardo González y yo, teníamos un encuentro con los Guías en lo alto de una montaña. En las semanas sucesivas ocurrirían las experiencias de contacto que tanto Luis Fernando en Bolivia como Ricardo aquí en US vivieran durante el 28 y 29 de Agosto de este año 2012.
En lo personal no sentía ningún llamado especial y más allá de haber efectuado una salida de trabajo a Shasta (Agosto 8, 2012), no había recibido mensaje alguno relativo a un encuentro con los guías por lo que tome la posibilidad de que esto llegara a ocurrir como algo poco probable.
Ricardo sin embargo, luego de su estadía por el norte de California, hizo una corta visita a Los Ángeles, y con la excusa de verlo otra vez y conocer a la encantadora Sol, nos reunimos para compartir unas horas y ponernos al día de los últimos acontecimientos en nuestras vidas. Fue en este contexto también en que conversamos con nuestra querida amiga Eva Guzmán, actual instructora de los grupos Rahma en Los Ángeles, quien nos compartiera que varios miembros del grupo habían estado recibiendo la invitación a un viaje a Shasta para el 21 de Septiembre del 2012. Ricardo a su vez nos dijo que sentía que el 21 deberíamos estar trabajando en la montaña pues de acuerdo a lo que el viviera en su experiencia de contacto, poderosas energías estarían activas en el planeta en esa fecha.
Aquella noche Eva, pediría mentalmente a los Guías que si estaban preparándose las condiciones para una nueva experiencia de contacto en Shasta, dieran la confirmación a través de Ricardo; y sin nosotros conocer acerca de su solicitud, tanto él como yo tuvimos por la madrugada un sueño sincrónico en el que caminábamos juntos por un bosque hablando de la importancia de estar en Shasta el 21 de Septiembre, y mientras Ricardo señalaba mi responsabilidad en este viaje, yo veía una luces anaranjadas que formaban luego las siluetas azuladas de varios guías rodeando al grupo que se encontraba a cierta distancia de nosotros. Al despertar por la mañana nos hablamos de inmediato para confirmar lo recibido, ahora sí con la inquietud de que algo importante podría estar gestándose.
Ricardo y Sol partirían en vuelo internacional pocas horas después, no sin antes aconsejarnos mantener la calma y una gran apertura frente las posibilidades que esta nueva exploración a la montaña pudiera presentarnos.
El día previo a nuestra salida a Shasta nos enteraríamos que el 21 de Septiembre se daría una cadena de oración mundial por la Paz de la que participarían innumerables agrupaciones a nivel internacional, en simultáneo varios grupos Rahma en otras partes del planeta estarían también trabajando.

RUMBO A SHASTA
La tarde del jueves, ya de camino a Shasta y mientras Naomi manejaba, tuve una extraña visión en la que observaba al planeta cayendo el interior de un cuadro o rombo oscuro por cuyas aristas, poderosas corrientes de aire soplaban, mi impresión era que el planeta podía ser fragmentado y esparcido en 4 direcciones por esas fuerzas, pero mientras preguntaba de que se trataba la visión, una voz en mi mente decía: "No temas"
Llegamos a Shasta la noche del jueves, y agotados por las más de 10 horas de travesía que hicimos, apenas salimos unos minutos a observar el firmamento mágico del lugar y luego retornar al auto para descansar hasta la llegada del día.
La mañana del viernes 21 encontramos a los grupos de San Francisco y San José ya instalados con sus tiendas de campaña y haciendo prácticas desde muy temprano. Fue realmente emotivo re-encontrarnos con viejos amigos como Pilar, Ignacio, Mary y Javier, así como con hermanos con los que si bien no habíamos tenido oportunidad de convivir mucho, de cualquier manera sentíamos muy cercanos y ciertamente vibrábamos en la misma frecuencia.
Esa mañana 13 personas nos sentamos a compartir alrededor de un 8 formado con piedras en el terreno. De ese grupo inicial dos amigos: Mary y Carlos habían estado con Ricardo durante la experiencia de contacto del 29 de Agosto y pasaron a compartir sus impresiones de aquel día tan especial, dejándonos saber que en esa fecha también habían sido 13 los participantes y percibían ellos una continuidad entre aquella experiencia y lo que se preparaba para este fin de semana.
Poco después se nos uniría el grupo de Los Ángeles que llegaba con un poco de retraso. Avanzamos entonces internándonos en el bosque hasta llegar a un claro, allí iniciamos los trabajos haciendo una recepción de energía solar a través de la práctica ya conocida de formar un triangulo con las manos para dejar pasar la Luz directo a nuestros ojos y así activar la glándula pineal. Luego de ello hicimos otro ejercicio en el que activábamos la glándula Timo que es la más cercana al corazón, y luego pasamos a hacer el trabajo de conexión con el Retiro del Lago Titicaca, pues sabíamos que varios grupos estarían trabajando en esta misma fecha en la región.
Luego de plantear la intención de recibir pautas de los guías a través de psicografía, pasamos a inducirnos a una meditación en la que conectaríamos con el Retiro del Lago en Bolivia. Visualizamos dos pirámides de base triangular entrecruzándose y formando una estrella de David tridimensional en medio de nosotros, luego de lo cual nos proyectamos por el entrecejo al interior de esta forma geométrica que de inmediato nos transportó en un viaje mental hacia Bolivia y a las orilla del lago Titicaca.
Observamos un monolito a corta distancia de las edificaciones como cúpulas, a través de las cuales pasamos para llegar a una cámara interior en la que apreciamos una cruz escalonada en el suelo, la que luego se abrió para dejarnos ver un acceso circular descendente que nos llevó a lo que sentíamos era el Retiro Interior bajo las aguas del lago.
Allí, majestuoso se levantaba el Disco Solar a manera de un enorme plato de metal dorado y cóncavo, dispositivo cuya función sería la de crear una red energética capaz de trasladar la Tierra a una nueva frecuencia, y cuya vibración lo hacía lucir ya no metálico sino cristalino, o quizá hasta liquido por la manera en que sus vibraciones se emanaban distorsionando el entorno del recinto.
Nos aproximamos con reverencia y de inmediato vimos salir del disco, como si de un portal se tratase, a varios personajes vestidos de blanco que se aproximaban a cada uno de nosotros; fue entonces que sentí como si estos seres se encontrasen simultáneamente en Shasta, pues podía ver el circulo que habíamos formado en el bosque y a estos personajes acercándose a cada uno y entregándonos un cristal blanquecino y alargado. Y como si aquellos cristales fuesen el soporte de un archivo de información, supe que estaban vinculados en significado al monolito pétreo que observaramos a las orillas del lago.

DEL TIEMPO HORIZONTAL AL TIEMPO VERTICAL
"Amados, el retiro del lago abre sus puertas y se les recibe en cada ocasión en que os predispongáis con Amor al servicio"
Una sutil voz que se identificó como el anciano Soromez, guardián y custodio del retiro del lago, nos informaba que la recepción de estos cristales era una importante iniciación que demarcaba una transformación del estado de conciencia, pues habíamos estado por milenios atrapados en la percepción de un tiempo horizontal que avanzaba moviéndose al nivel del suelo, determinado por la gravitación planetaria e imponiéndonos la percepción de la línea temporal de pasado, presente y futuro.
La presente iniciación en cambio, instalada en nuestro plexo cardiaco, propiciaba la conexión con un tiempo vertical generado por la influencia del centro galáctico, lo que a su vez demarcaba una nueva orientación espiritual y nuestro ingreso colectivo a la Hermandad Blanca Cósmica como representantes de la Hermandad Blanca de Superficie en la Tierra.
No pude evitar preguntar por el cuadro o rombo oscuro a través del que la Tierra pasaba y que observé en la visión del día anterior, y la respuesta llego de inmediato a través de visiones sucesivas…
Observé el mito incaico del héroe civilizador Manco Capac llegando a la zona del Cuzco en donde según la historia se hundiera su `báculo' para dar origen al corazón del imperio que posteriormente se extendiera en 4 direcciones o "suyos" (regiones). Esto correspondía con el plan de la Hermandad Blanca de sentar las bases de un nuevo tiempo en un proceso que tomaría cientos o quizás miles de años. Vi la manera como el imperio se extendía desde el Cuzco imitando la forma de la cruz andina escalonada o Chakana la que a su vez describía un mapa o plano energético en proceso, el que sin lugar a dudas señalaba algo más que la simple expansión territorial, muy probablemente apuntando al momento paradójico de nuestra conexión con el Tiempo Vertical señalado por el báculo del Inca, el monolito a las orillas del lago y el cristal alargado que ahora se nos entregaba.
Comprendí que el rombo oscuro apuntaba a las mismas 4 direcciones señaladas por la cruz andina, y la Tierra pasando a través de él como si de un portal galáctico se tratase, señalaba la llegada de un nuevo tiempo y estado de conciencia a insertarse en el colectivo humano desde el Retiro del Lago y en las 4 direcciones del planeta.
Surgió naturalmente la pregunta de por qué la activación planetaria desde el Lago Titicaca y no desde el Cuzco que fuera el corazón del imperio de los Incas, y la respuesta que sentí fue que si bien Cuzco representa al corazón físico, el lago Titicaca sería el corazón espiritual, pues es el espejo de luz cósmica más alto del planeta y por lo mismo el primer acceso al mundo subterráneo.
Este lago en la tradición andina era el lugar en el que el Hanan-Pacha (El mundo de arriba, habitado por los Dioses) y el Uku-Pacha (El mundo de abajo habitado por los ancestros y los Dioses ligados a la Tierra) se unían. La serpiente representa el mundo subterráneo, el puma el mundo de superficie o Kay Pacha y el cóndor el mundo de arriba, por lo que no es casual el hecho de que el primer espejo de agua del planeta en el que el mundo de arriba y el de abajo se tocan tenga la forma de un puma como lo demuestran las fotografías tomadas por satélite.

Asimismo, la ciudad imperial del Cusco seguía en su distribución urbana la forma del puma como símbolo de protección y unidad de los 3 mundos.
La información que la voz del anciano iba conectando me llevaba a recordar experiencias previas, cuando a principios de los 90's tuve el encuentro con un sacerdote andino que nos revelara la existencia de 33 grados de iniciación en la tradición mística de los andes en donde animales como el topo, la lechuza, el ratón, el cóndor y otros, representaban diferentes estadios de la conciencia, y el puma en la posición 33 señalaba el ultimo nivel de iniciación.
Vino súbitamente a nuestra pantalla mental la imponente imagen de la Puerta del Sol de Tiahuanaco, con la figura central de un rostro solar cuadrado; representación iconográfica por demás extraña, pues naturalmente el sol en la mayoría de culturas es representado con un círculo y no con un cuadrado.
El Dios Solar de Tiahuanaco representaría a Wiracocha, el personaje civilizador blanco y barbado de la tradición andina, y en la visión que sosteníamos en ese momento, su aspecto cuadrado encajaba perfectamente con la visión del día anterior: El cuadro a través del cual la Tierra pasaba a otra vibración.
Wiracocha representaba la llegada de un Nuevo Sol, una nueva humanidad regida por la conciencia Crística y recordé que en algún momento, durante nuestra conversación previa con el grupo, algunos amigos habían mencionado la necesidad de sintonizarnos con la energía de Cristo, representado por este héroe solar que ahora observábamos en la pared de piedra.
El Cristo, el cristal alargado y la cruz señalando la unidad de los 3 mundos e intersección del tiempo horizontal y el vertical, cobraban ahora todo su sentido.
Aun inmersos en la meditación, sentimos la necesidad de un trabajo en las alturas de la montaña para conectarnos con el Retiro Interior de Shasta y muy probablemente activar el Disco Solar que se encontraría en las profundidades; y la hora que la voz del anciano Soromez sugería era las 6 de la tarde. Vi que Ignacio González, quien había participado de la activación de los Discos en varias regiones del planeta (entre ellas el Valle de las 7 luminarias, Egipto y El Paititi) sería la persona idónea para dirigir ese trabajo, y estaba ya listo para llamar al grupo de regreso de la meditación cuando un pequeño y poderoso mensaje se dejo sentir en mi mente:
"Aquí, con ustedes Anitac y Sampiac. Predispónganse a trabajar a las 9. Conéctense a la energía del Cristo. Estaremos con ustedes como había sido previsto…"
El numero 9 era destacado una y otra vez lo que me obligo a trazarlo muchas veces en el cuaderno de notas. Al llamar de regreso al grupo todos habían sentido algo y si bien durante la meditación el cristal alargado había sido percibido de diferentes colores y tamaños, todos estábamos de acuerdo en que los niveles de energía en el lugar habían cambiado, y algunos sentían incluso la presencia de los guías y cierta presión en la cabeza.
Carlos confirmaría que durante la mañana había recibido una comunicación de Sampiac y Anitac que sugería que tanto Ignacio como yo estaríamos a cargo de los trabajos a desarrollarse.
Alex y Eva visualizaron durante esta meditación el pie de un bebe en sus pantallas mentales, lo que simbólicamente nos sugería el inicio de algo importante, la necesidad de experiencias nuevas y la búsqueda del equilibrio. Otros visualizaron serpientes y algunos más un portal formado por arboles, lo que el grupo de Los Ángeles secundó, pues por semanas habían estado viendo un portal a manera de un arco formado por arboles más allá del cual se abría un vórtice o pasaje a otra dimensión.
Carlos comentó entonces haber observado ese arco formado por pinos en alguna región cercana y alta del Sand Flat (la zona en la que ahora acampábamos), y nos hicimos el propósito de buscar más tarde el sitio para ver la posibilidad de desplazar a todo el grupo hacia allá para el trabajo de las 9pm.
A las 5 de la tarde todos se prepararon para subir a la montaña y para las 6 ya estábamos en las alturas de Shasta formando un circulo y listos para iniciar el trabajo de conexión con el Retiro Interior de Shasta y la activación del Disco Solar.
Ignacio González invitó a la participación de la energía femenina, y Pilar apoyó con algunas prácticas que nos conectarían con las energías planetarias generándose en esta fecha tan especial, luego de lo cual cedió la dirección a Ignacio, quien continúo con el trabajo de conexión con el retiro Interior de la montaña (sección esta que será narrada en el informe de Ignacio).

EN BUSCA DE LA PUERTA
Regresamos a la zona del campamento cuando el sol caía, y pensando en el trabajo pendiente de las 9 mi esposa Naomi, Carlos y yo, caminamos hacia la parte alta del Sand Flat buscando "la puerta" formada por arboles que varios habían percibido en distintas experiencias.
A los 10 minutos de caminata y ya a oscuras llegamos hasta un pequeño claro en donde se apreciaba un arco formado por arboles, sin embargo no se sentía como que fuera el lugar adecuado para el trabajo grupal. Pedimos un avistamiento confirmatorio pero luego de esperar unos minutos decidimos continuar un poco más arriba, sin embargo el terreno se hacía cada vez más difícil y oscuro por lo que decidimos regresar. Recién en ese momento pudimos apreciar un lucero cruzando lentamente sobre nosotros lo que a mi parecer era la señal de que debíamos retornar.
Ya en el campamento y listos para continuar con lo sugerido por los guías, confirmamos que el resto del grupo también había visto el lucero, por lo que reunidos todos nos dispusimos a iniciar los trabajos a las 8:20 pm. En ese preciso instante otro lucero aun más brillante paso lentamente sobre nosotros dejándonos sentir el apoyo de los hermanos mayores y elevando también las expectativas de que algo importante podría estar preparándose para las 9.
Procurábamos no hablar de eso pero se sentía la tensión mientras se acercaba la hora, sin embargo, a unos minutos de haber iniciado los trabajos, observamos las luces de unos autos acercándose y se nos sumo otro grupo que recién llegaba de San José. La energía entonces cambió súbitamente y nos percatamos de que esto podría interferir con el encuentro esperado.
Luego de elevar vibraciones con mantras y meditar por unos minutos procedimos a anclar la energía Crística compartiendo entre todos lo que comprendíamos del mensaje del Jesús histórico. Fue un intercambio muy bello en el que la mayoría participó tanto hablando de su comprensión espiritual como planteando sus interrogantes acerca del llamado Señor del Tiempo.
Las 9 de la noche llegó casi imperceptible para la mayoría, y si bien algunos nos percatamos de una pequeña luz cruzando el firmamento lentamente frente a nosotros, el avistamiento no llegaba a la magnitud que pudiera señalar un evento mayor, por lo que continuamos con la plática acerca de Cristo hasta casi las 10 de la noche.
Sintiendo el cansancio del grupo, nos dimos las buenas noches, sugiriendo que todos se levantaran temprano el sábado para iniciar a las 9 am con ejercicios psicofísicos.
Extrañamente no me sentía decepcionado de que las cosas hubiesen salido así y creía firmemente que habíamos conseguido anclar el espíritu Cristico, por lo que sin más nos retiramos a las tiendas de campaña a descansar.
Visualizaba mientras me preparaba para dormir, una corriente de luz, fluida y liquida ingresando al planeta por el Lago Titicaca y extendiéndose en las 4 direcciones para activar todos los centros de luz o lugares de alta energía y desde allí esparcirse como un nuevo nivel de conciencia al resto del mundo. El portal galáctico oscuro había absorbido al planeta, y ahora el planeta anclaba y absorbía estas nuevas energías reactivando todos sus vórtices, mientras mi cuerpo se hundía en el sueño profundo…

UN ENCUENTRO INESPERADO
El sábado 22 de septiembre Naomi y yo nos despertamos como a las 8 de la mañana. Ella había tenido un extraño sueño en el que yo bebía leche del seno de una mujer rubia, luego de lo cual yo parecía entrar en una especie de trance. Ninguno de los dos supo cómo interpretar aquello, y para las 8:15 mi esposa, que es una gran amante de las caminatas al aire libre, salió a hacer hiking (excursionismo) por la montaña. Originalmente yo no había planeado hacerlo, pero a los 5 minutos de que ella se retirará sentí un deseo muy fuerte de explorar el bosque y se me ocurrió que podría darle el encuentro y quizás pudiéramos juntos hallar la zona pendiente ("en donde los arboles forman un arco") para hacer allí los trabajos restantes con el grupo.
Me cambie rápidamente y saliendo de la tienda procedí a subir el Sand Flat por la misma ruta por la que Carlos nos condujese la noche anterior, sin embargo, luego de unos 15 o 20 minutos de caminata y al ver que no encontraba ni a Naomi ni la zona buscada, decidí detenerme a descansar en un claro en medio del hermoso bosque de pinos.
El brillante sol de la mañana invitaba a hacer la práctica de recepción de energía Cilial, por lo que procedí a mirar al sol por varios minutos hasta que sin percatarme ingresé en un estado de profunda paz. No estoy seguro de por cuánto tiempo estuve haciendo esta práctica hasta detenerme a descansar los ojos, luego de lo cual la visión de mi propia sombra proyectándose alargada sobre el pasto llamó poderosamente mi atención.
Como si de una revelación se tratase supe que, en cada ocasión en que dábamos la espalda a la luz nuestra percepción era absorbida por la oscuridad de la propia sombra proyectándose al mundo, lo que no es otra cosa más que nuestro obstaculizar el paso de la verdad. Todo lo que observábamos como caos, maldad o defectos en los demás, en nosotros mismos o en nuestro entorno no era más que nuestro darle la espalda a la luz y creer en lo que no es Real. Me volví entonces para dar la cara al sol, y como si el mundo fuese nuevo me sorprendí observando todo lo que ahora la luz me mostraba con tanta claridad. Me sentía extasiado y lleno de un profundo sentimiento de Amor, y como si algo me llamara a continuar subiendo sentí el impulso de ir cuesta arriba. En mi mente recordaba que a las 9 tenía que estar con el grupo pero al mismo tiempo no creía estar tan lejos del campamento por lo que me aventuré a avanzar hacia arriba por unos minutos más. De pronto, al pasar una elevación, descubrí un claro en el bosque con un paisaje bello y por demás inusual. Frente a mí estaba un terreno abierto en el que se destacaban dos enormes pinos cuyas ramas formaban un arco a manera de una puerta natural, y más allá de ella, en el centro y al fondo, la visión mágica e imponente de la montaña sagrada de Shasta.
Aquella puerta natural me invitaba con su sola presencia a atravesarla, y sin poder contener la emoción me acerqué caminando lentamente. El lugar inspiraba paz, y sin embargo, parecía haber una sensación eléctrica en el aire. A punto de cruzar observé como varias ramas caídas se habían amontonado en el pasaje que se abría entre los pinos, por lo que procedí a limpiar pensando que más tarde regresaría con el grupo. Fue entonces que note que los filamentos de las ramas más pequeñas estaban dispersos por el suelo formando infinidad de "ochos" (justo antes del ingreso), y recordando cómo este número nos había acompañado en el inicio de los trabajos, y su significado de reconexión con el Tiempo Real o retorno a los orígenes, sentí que no debía esperar más y dando un paso atravesé "la puerta".
Una sensación extraña me invadió en el momento de hallarme del otro lado, el bosque sin lugar a dudas seguía siendo el mismo, pero algo parecía haber cambiado en cuanto a la calidad de la luz, como si ahora se percibiese todo más brillante. Pensé que quizá se trataría del efecto de haber pasado de la sombra de los pinos al espacio abierto, y observando a cierta distancia y casi en el centro del claro un asiento natural formado por el tronco de un árbol que había sido cortado, me acerque para sentarme en medio de lo que parecía un escenario preparado por la naturaleza.
Cerrando los ojos respire profundamente tratando de conectarme con la armonía del lugar y para cuando los abrí nuevamente me percate de que había alguien moviéndose en una elevación a unos 50 metros de distancia. Prestando más atención me percaté de que tras los arboles habían alrededor de 5 personas de cabellos largos rubios y vestidos con trajes blancos, enterizos y ceñidos al cuerpo.
Creo que en ese momento una parte de mi mente trató de disfrazar la situación para no salir huyendo de allí, recuerdo haber pensado que podría tratarse de un club de hikers locales, probablemente usando uniformes ceñidos como los que usan los ciclistas.
Uno de ellos, separándose del grupo y saliendo de entre los árboles, me observó y luego levanto la mano derecha saludándome. Su apariencia era la de un hombre de estatura media para baja, de cabello largo rubio y cuerpo bien proporcionado.
Levantando la mía para responder el saludo y permaneciendo aun sentado en el tronco, me sentía en shock mientras escuchaba a mi mente decir: "No puede ser tan fácil…" Ahora me doy cuenta de que ya en ese instante había identificado a nuestro hermano y guía Sampiac, aun cuando otra parte de mi quería negar la posibilidad de un encuentro con ellos en términos tan comunes.
Mire en la dirección del pasaje entre pinos por el que había ingresado al lugar, sintiendo aun aquella parte de mi que quería ponerse de pie y escapar, pero a pesar del impulso instintivo a huir, permanecí sentado repitiéndome que todo estaría bien.
Sampiac seguía de pie observándome, cuando del grupo se separó una persona que aunque vistiendo el mismo uniforme tenía una clara forma femenina. Ella empezó a caminar con seguridad descendiendo la elevación de izquierda a derecha en mi campo visual. Mientras la veía aproximarse podía escuchar sus pisadas quebrar las ramitas secas esparcidas por el suelo del lugar mientras yo me volvía nerviosamente una y otra vez a mirar "la puerta" como si una parte de mi quisiera asegurar una ruta de escape. Me sentía un poco avergonzado por mi actitud pero al mismo tiempo sospechaba que no era juzgado por mi reacción.
Cuando la mujer se hallaba como a unos 10 metros de distancia y tratando de cobrar confianza procuré enfocar mi atención en ella, y lo que vi me sacó de mi zona de comodidad, sus pies parecían no estar tocando el suelo mientras ella se desplazaba, lo que me obligó a preguntarme qué cosa estaba yo oyendo (?) Botas blancas y un traje ceñido dibujaban perfectamente su figura esbelta y femenina de cabellos rubios y ojos claros; y aun cuando no había nada amenazador en su presencia algo en mi se agitaba con violencia por lo que preferí cerrar los ojos sintiendo que de esta manera podría tolerar mejor el encuentro con ellos.
Permanecí allí nervioso escuchando esos pasos acercarse y al mismo tiempo repitiéndome que no podía estar oyendo nada puesto que ella no estaba tocando el suelo, y de pronto la energía de ellos se dejó sentir poderosa como una sensación envolvente de paz, al tiempo que se establecía el vinculo telepático con Sampiac y Anitac.
Podía percibir con claridad como la energía de ella, como la de una madre o hermana, me sostenía dándome tranquilidad y comunicándome cosas en un nivel sutil, mientras Sampiac lo hacía directamente. Era como si existiesen varios canales de comunicación en simultáneo y mientras que uno fluía comprensible en el nivel del intelecto el otro apelaba al sentimiento y la memoria emotiva.
Había trabajado en astral el año 95 con Anitac durante el incidente de la caída trágica de un avión de American Airlines en Colombia, en donde luego de "rescatar" a los hermanos fallecidos en el accidente, ella nos informara lo importante que era el mantener la vibración planetaria en el nivel más elevado posible para garantizar una transición armoniosa; sin embargo lo de ahora era muy distinto. Su sola presencia me comunicaba que habíamos estado juntos antes de mi llegada a este mundo, acompañada esta certeza de imágenes y sensaciones diversas.
En simultaneo y mentalmente yo les pedía disculpas por preferir sostener el encuentro con los ojos cerrados a lo que Sampiac aseguró que su presencia únicamente respondía al énfasis que querían hacer en lo que compartirían, pero que más allá de eso resultaba intrascendente el nivel en que se verificara nuestro encuentro.
Debo dejarles saber que lo compartido por los guías no se ciñe a la linealidad con la que describiré la conversación siguiente, pero lo hare así para respetar nuestra forma de leer el tiempo y de esta manera hacerlo comprensible, pues en la vibración en la que ellos se manejan la información pareciera fluir como paquetes y no responde a nuestra lógica de tercera dimensión.
Les pregunté el porqué de nuestra reacción adversa frente a ellos, y Sampiac respondió que era hasta cierto punto esperado que así ocurriese pues estando el nivel de energía de ellos más a tono con el llamado Tiempo Real y el nuestro en cambio en proceso de abandonar la burbuja de tiempo alternativo, nuestra "irrealidad" tiende a diluirse frente a la expresión "más real" en la que ellos se manifiestan. El sueño de nuestra existencia en la tercera dimensión, que habíamos creído era algo concreto y con el que nos identificábamos, ahora en presencia de ellos se veía enfrentado a la posibilidad de su extinción. El despertar que ellos representan sacude y amenaza nuestra ilusión como la luz revelando la irrealidad de las sombras.
Pregunte a Sampiac el porqué sostener el encuentro con ellos ahora y no por la noche como originalmente nos indicaran en la psicografía, y su respuesta fue muy directa y hasta cortante, como si me estuviese dejando sentir que habían cosas más importantes de las que hablar:
"Les dijimos que a las 9 y son las 9!"
Recién entonces me percaté de que muy probablemente ya eran las 9 de la mañana y que habíamos malinterpretado el mensaje al asumir que la experiencia ocurriría la noche pasada.
"Pero el grupo… Ellos deberían estar aquí también"
"Lo están hermano. Tu atravesaste "la puerta" en representación del grupo y el grupo en representación de la humanidad" Aseguro el guía dejándome sentir simultáneamente la verdad de lo que acababa de comunicar. Sentí con absoluta certeza como él no era una entidad aislada del sistema del que formaba parte sino que ciertamente los representaba en sintonía mental, y reconocí que el grupo estaba conmigo aun cuando no se hallaban allí físicamente. Pensé en ese momento que me hubiese encantado que mi amigo Roy de San José, quien en otras salidas tomara fotografías y videos, estuviese allí con su cámara para captar lo que estaba pasando, o mi esposa como testigo presencial del evento, pero al mismo tiempo Sampiac me dejaba comprender como esa manera de pensar nos mantenía aferrados a un orden de realidad que progresivamente iría diluyéndose y que no valía la pena prolongar más, pues aquello que es verdad no necesita de defensores.
Sampiac, señalando al tema central de nuestro encuentro, nos informaba que el planeta había ingresado a la llamada 4ta Dimensión y que una vez atravesada `la puerta' y sin posibilidad de retorno, un nuevo ciclo se iniciaba.
Aseguraba el guía que la aceleración de tiempo que hubiéramos vivido en los años previos llegaba ahora a su punto máximo para a partir de ese día y en adelante empezar a decrecer de modo que lo que experimentaríamos en el tiempo por venir serían momentos de aceleración y desaceleración alternándose hasta que nos estabilizásemos en la 4ta dimensión de conciencia.
Esto es desde la perspectiva profética el llamado Final de los Tiempos, pues pasando el umbral de una nueva dimensión quedaban canceladas todas las posibilidades de futuro que no nos condujesen al desenvolvimiento del llamado Plan Cósmico, haciendo viable únicamente la vertiente de tiempo que señala un destino común entre nosotros y la Federación de Mundos de la Galaxia.
Un destino único y común con nuestros guías era ciertamente una noticia que me entusiasmaba por lo que me anime a preguntar si esto significaría la posibilidad de encuentros físicos grupales o quizá el descenso de sus naves en algún lugar público para propiciar una apertura mayor en la conciencia colectiva.
"El nuevo tiempo estará regido no por el contacto extraterrestre sino por el contacto interior que propicia nuestro encuentro como un evento natural" Aseguro Sampiac.
"Quiere esto decir que si la preparación continua se darán más encuentros con ustedes?" Pregunte tratando de empujar un poco a la posibilidad de una experiencia grupal.
"Quiere decir que es el despertar de la conciencia colectiva y no el encuentro con nosotros lo que depende de la preparación, y que ocurrirá tan naturalmente como la mariposa que al desplegar sus alas por vez primera se descubre en un reino de luz distinto y poblado por seres igualmente alados. Hermanos son ustedes quienes están ingresando a nuestro tiempo y no nosotros al vuestro…"
Se dejó sentir entonces como existía en Sampiac la inclinación a propiciar encuentros más frecuentes con nosotros pero sin embargo la pauta marcada por la Federación de Mundos debía ser respetada. Sin poder contenerme le expliqué que realmente los necesitábamos en experiencias más cercanas, a lo que respondió dejándome saber que esta era la manera como el plan había procedido por varios miles de años de los nuestros y que si bien el protocolo continuaba, nuestro natural crecimiento y expansión en la 4ta dimensión propiciaba que las condiciones del encuentro con ellos también cambiaran favoreciendo esta posibilidad pero no determinándola.
La expresión "miles de años" me hizo sentir desolado como si realmente tuviésemos que pasar mucho más antes de que alcanzáramos el encuentro definitivo con ellos, sin embargo ambos guías al mismo tiempo me hicieron sentir la realidad de nuestro encuentro como un marcador dentro del proceso: "Estamos aquí con ustedes!"
Sampiac entonces me dejó saber que seres de las Pléyades, establecidos en Venus, habían participado de un proceso de intervención directa en América, influyendo en las antiguas culturas pre-colombinas, y que esta iniciativa había sido propiciada por la Hermandad Blanca Cósmica. De hecho nuestra genética y la de los venusinos habían sido emparentadas a través de esta intervención, y en el proceso de ingresar a la 4ta dimensión los códigos insertados en nuestra sangre durante ese periodo serían reactivados.
Pregunte también por las dificultades de todo orden por las que el grupo y la humanidad parecían estar pasando y la respuesta del guía no se dejo esperar: "Mientras se estabilizan las condiciones de un nuevo nivel de conciencia, el colectivo humano aun se agitará, y sin embargo la ruta ha sido ya demarcada. Y puesto que existe solo un sendero a ser transitado, todas las otras opciones de tiempo en las que el caos podía imperar y persistir han quedado ya abolidas. No os decimos que ya no veréis dificultades, pues en el pasado habéis sembrado semilla que aun están dando fruto, lo que os aseguramos es que ya no existe para vosotros un futuro distinto del Plan Cósmico; y que si aun observáis desarmonía no desesperéis, pues son solo los ecos del pasado que poco a poco y muy seguramente irán extinguiéndose…"
Deberíamos esperar algún cataclismo para lo que resta del año 2012?
"Los cambios que vienen no son de ese orden, y aun cuando todavía pudiesen verificarse incidentes de este tipo, no serán tan significativos como las pérdidas apreciadas en el pasado. Esperad si, grandes movimientos sociales para los próximos meses, pues esto sin lugar a dudas conducirá a la redefinición de una mente colectiva anclándose en la 4ta dimensión"
Sintiendo que nuestro encuentro estaba por concluir y pensando otra vez en el grupo, pregunté a los guías si se darían iniciaciones aquella noche, a lo que Sampiac respondió casi reprendiéndome:
"Las iniciaciones han sido ya entregadas. Es tiempo de dar buen uso a las herramientas que poseéis…"
Supe que Sampiac señalaba a la iniciación de los cristales alargados del día previo, pero también a las múltiples iniciaciones que a lo largo de los años se han ido entregando y las que muchas veces coleccionamos como si se tratase de souvenirs y olvidando que aunque sutiles, poseen una función muy específica que nos es dado descubrir y aplicar de manera práctica.
El guía aseguró que debido a la previa iniciación, se activarían parte de los códigos sanguíneos ya mencionados y llegarían nuevos datos a manera de sincronías para complementar la información que estaba ya despertando en nuestra sangre, y que no debía preocuparme por recordar pues todo se organizaría armoniosamente. Comprendí entonces que no sería capaz de articular la experiencia en un discurso lineal y me asuste un poco pensando que quizá no podría explicárselo al grupo; pero en ese momento Anitac, dejándose sentir con más intensidad, me dijo que el grupo estaba allí conmigo y que algunos ya percibían lo que estaba ocurriendo. Nuevamente los sentimientos mezclados y la impresión de que nos conocíamos de antes me envolvió, e incapaz de contenerme y sintiendo que el encuentro con ellos había llegado a su fin, estire las manos para tomar una de las suyas y despedirnos.
Era sumamente extraño que aun cuando viví la mayor parte de la experiencia con los ojos cerrados, no sintiera haber estado ciego sino por el contrario creía haberme abierto a otra forma de percepción, de hecho tengo que haber visto de alguna manera la ubicación de sus manos para haber podido tomar una de ellas, sin embargo no era la visión común sino algo más. Al soltar su mano y abrir los ojos no había señal física de los guías, lo que parecía incomodarme tanto como haberlos visto acercándose…
Poniéndome de pie me dirigí hacia el portal formado por los pinos tratando ahora si de `huir' del lugar lo más rápidamente posible, sin embargo al acercarme al arco sentí nuevamente la voz de Sampiac indicándome que la puerta que habíamos atravesado no nos permitía una ruta de retorno, por lo que entendí que una vez dentro de la 4ta Dimensión no había posibilidad de retrocesos…, tenía que buscar un camino distinto para retornar al lugar del campamento!
Me aventuré entonces a rodear la zona y guiarme por la posición del sol, pero 30 minutos después me descubrí perdido en medio del bosque y algo agitado, la voz de los guías sin embargo aun me acompañaba:
"La humanidad se encuentra frente a una ruta que le resulta desconocida, aparentemente no ha sido trazada y sin embargo usando el corazón como guía no hay posibilidad de extravíos…"
Empecé entonces a usar todos mis sentidos y descubrí entre los arboles formaciones artificiales de piedra a manera de iglús y hasta símbolos de espirales, círculos concéntricos y ochos elaborados muy probablemente por los nativos americanos locales, los que parecían impactarme y activar algo en mi, "marcadores en la ruta", activadores de la conciencia señalando que todo estaría bien.
Como a los 40 minutos de vagar sin rumbo por el bosque escuché a lo lejos voces de niños riendo por lo que empecé a caminar hacia el sonido.
"…Que la inocencia sea siempre tu guía"
A la distancia distinguí un camino y un auto estacionado, probablemente había una familia acampanado allí cerca. Bajé hasta el sendero y desde allí continúe avanzando hacia el norte hasta encontrar el campamento. Recién entonces conseguí respirar aliviado al observar a la distancia al grupo haciendo ejercicios de yoga dirigidos por Diana y Eva.
Trate de sumarme a la actividad que ya concluía y luego tomamos asiento para hacer una meditación, pero Ignacio intuyendo lo que había pasado me pidió que compartiera, sin embargo sintiéndome aun conmovido por todo lo vivido le pedí me diera un poco de tiempo para organizar mis ideas y compartir luego de la meditación. Extrañamente me sentía profundamente conectado con el grupo y ya no solo en un nivel fraternal sino también en pensamiento. Podía sentirlos a ellos como había sentido a los Guías minutos antes y aun parecía haber un vínculo telepático entre nosotros, o era quizá la impresión que yo tenía.
Cuando al fin conseguí narrar la experiencia podía sentir la emoción de la mayoría, la duda de algunos y nuestra humanidad haciendo ejercicio de su cambiante y alterado estado de conciencia, pero entonces Ignacio sugirió ponernos de pie y abrazarnos lo que ciertamente nos estabilizo a todos, especialmente a mí que sin poder contener las lagrimas trate de extenderles energéticamente lo que sintiera en presencia de nuestros hermanos mayores.
Sería mentira decirles que recuerdo con exactitud el resto del día, se que descendimos a la ciudad a comer, porque en el restaurante, y sentados en la mesa de al lado, habían niños de cabellos largos y rubios que me hacían sentir como si los guías dijeran: "Aun estamos aquí". Subimos a la montaña, caminamos un laberinto de piedra, algunos hermanos se fueron a los lagos y otros tuvieron que partir ese mismo día de regresó.
A la mañana siguiente hicimos algunos trabajos de curación con Irma y su bella familia, y luego Naomi se encargo de conducir una meditación y cadena de irradiación planetaria con los que aun quedábamos. La presencia de ángeles y otros seres de luz se dejo sentir. El viento trajo a mis manos una pluma mitad azul, mitad negra que interpreté como el planeta Tierra pasando por el portal galáctico oscuro en donde nuestra aparente ceguera invitaba a otra clase de visión, una más completa e ilimitada.

(Foto del Cielo obtenida por Naomi el viernes 21 de septiembre del 2012)

CONCLUSIONES
"Y dejando (Wiracocha), la isla (La isla del sol en el lago Titicaca), pasó por la laguna a la tierra firme, y llevando en su compañía a los dos criados que había conservado fuese a un asiento, que agora llaman Tiaguanaco, que es de la provincia de Collasuyo, y en este lugar esculpió y dibujo en unas losas muy grandes todas las naciones que pensaba criar..."
"Historia Indica" 1572 Sarmiento De Gamboa

Conforme los días fueron pasando la información que empezó a tomar forma complementaba lo que los guías habían compartido.
Se organizó en mi mente la visión completa de la llamada Puerta del Sol, con el personaje solar central que sostenía dos báculos y por cuya cabeza salían rayos proyectándose en todas direcciones.

7 de estos rayos eran destacados por terminar en cabezas de pumas. Los 4 ángulos del rostro solar cuadrado eran marcados por 4 de estos rayos terminados en cabezas de felinos, lo que traía a mi memoria las 4 fuerzas o vientos poderosos que observara en la visión del día 21.
Los 7 rayos-pumas marcando las diferentes dimensiones de la conciencia y los 4 rayos-pumas o ángulos señalando el sello de este Nuevo Sol: El paso a la 4ta Dimensión de la Conciencia.
En la puerta también podían apreciarse 3 hileras de 8 seres a cada lado y como mirando al personaje solar central. La hilera superior y la inferior estaban formadas por figuras humanoides con alas (seres que vienen de lo alto, de otros mundos u otras dimensiones) coronas en las cabezas (representación de su realeza espiritual - La Hermandad Blanca Cósmica) y sosteniendo báculos (el tiempo vertical del que ellos ya forman parte - El Tiempo Real del Universo), haciendo un total de 32 seres en donde la posición 33 era la del Dios Solar Wiracocha, la conciencia cristica instalándose en el mundo en el tránsito de un nuevo sol.
La hilera central con otros 16 seres, estaba formada por personajes con aspecto de aves y también sosteniendo báculos: ángeles o seres del universo espiritual.
Se entiende que los 32 personajes humanoides están entregando la posta (los báculos) a este Nuevo Sol o Nueva Humanidad que ahora los sostiene. El báculo en la mano izquierda del héroe solar es una vara con tres cabezas de cóndores, dos apuntando hacia arriba y una hacia abajo. En la mitad inferior del báculo 3 secciones oscurecidas (3 dimensiones cubiertas) y en la mitad superior la posibilidad de repetir el mismo ciclo en vertientes distintas. La mano que sostiene la vara y que separa la tercera dimensión de sus otras posibilidades tiene 4 dedos indicándonos que el "hacer" del Nuevo Sol es continuar hacia una 4ta dimensión. La mano sujeta las otras 2 vertientes del tiempo para convertirlas en una sola línea o posibilidad de tiempo.

El báculo de la derecha, de igual manera, muestra en su porción inferior el transcurso por la 3ra dimensión, y sujetada por la mano de 4 dedos la porción superior señala un nuevo tiempo, una vertiente única que conduce de manera segura y directa de la 3ra a la 4ta Dimensión (representados en el grabado por los tres rectángulos blancos y el sol naciente en la posición superior)
Las manos de este nuevo sol dan un mensaje en sí mismas, pues al sujetar los báculos que por naturaleza son rectos, éstos se curvan ligeramente, lo que nos indica que esas manos de 4 dedos que representaban la 4ta dimensión son capaces de doblar el tiempo!
En la parte inferior se observan otros soles o ciclos evolutivos, 16 en total, los que sumados al sol central y a los 16 seres con aspecto de aves nos da nuevamente el número clave 33!

El investigador Posnansky, tratando de equiparar la Puerta del Sol con un calendario solar, decidió aleatoriamente reducirla al análisis de las porciones mejor definidas (o terminadas pues se asume que el labrado de la puerta nunca se concluyo) para hallar de esta manera un calendario de 12 meses y 360 días en donde el Dios Sol Wiracocha ocuparía la posición del mes de septiembre, durante el solsticio de otoño (22 de Septiembre), fecha que coincidía con la de nuestra estadía en la Montaña Sagrada de Shasta y la fecha que los guías marcaran como nuestro ingreso a la 4ta Dimensión.
No dudo de que los grabados en la Puerta del Sol puedan, como lo sugiere este investigador, incluir un calendario solar, pero considerando TODA su configuración y no solamente parte de ella, la imagen apela a algo mucho más grande que las orbitas de nuestro mundo en torno al sol del sistema, señalando desde esta nueva perspectiva el inicio de un nuevo ciclo solar regido por el despertar de Wiracocha-Cristo en la posición 33, el portador del báculo de un nuevo tiempo y custodio de la herencia estelar entregada por la Hermandad Blanca Cósmica a los hijos de este Nuevo Sol.

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Una experiencia de contacto, un informe lineal sirviéndose de un lenguaje que, conforme ingresamos a territorio no explorado, es cada vez mas obsoleto a la hora de expresar la verdad, y nada mas allá de la propia conciencia colectiva para validar la información recibida.
Pero dicen que así ha sido por los últimos miles de años…!, por lo que quizás una señal de confianza en este destino de Luz que ahora se dibuja frente a nosotros sea el renunciar a nuestra visión material ya oscurecida por las ilusiones, para empezar a percibir con los ojos del espíritu aquello que sin ser del tiempo lineal es sin embargo Real, pues viene de la Eternidad en la que tenemos nuestro verdadero hogar y destino último.
Que el Profundo Amor de la Conciencia Cósmica nos haga Uno en Mente y Propósito.

Enrique Villanueva / Octubre 17, 2012

(Nota: Quienes quieran ver este informe con fotografias pueden ir a "Files" en esta misma pagina grupal y buscarlo con el nombre: Salida a Monte Shasta 21,22 y 23 de Septiembre, 2012