VIBRANDO EN HAYUMARKA
Este viaje que emprendimos con Elina, comenzó luego del encuentro con Fernando Bendezú, Nano, en Capilla del Monte, Córdoba (ver informe de Fernando “El Corazón del Uritorco” enero 2008) y SENTIR que había algo más en ese encuentro, pues todo se había dado de una manera muy armoniosa y sabíamos que algo se había despertado en nosotros.
Luego de todos los trabajos realizados percibimos que nos volveríamos a encontrar..
Así fue como unos meses después, en contacto mediante chats y correo electrónico, nos damos cuenta que por mensajes recibidos, y sueños, nos juntaríamos una vez más… pero esta vez en Bolivia y en Perú.
Partimos para Bolivia para reunirnos con Amara y Osvaldo que ya habían salido antes y con mi gran amiga Susana (gracias a ella estoy en Rahma) que llegaba de Ecuador, para de ahí salir al día siguiente hacia Tiahuanaco al encuentro con Nano y los grupos de Tacna y Cuzco.
Llegamos a Tiahuanaco a las 10 de la mañana y logramos reunirnos con Nano y todo el grupo alrededor de las cuatro de la tarde, ya que ellos se habían demorado en la frontera. La sensación inmediata que tuve al verlos fue de conocerlos a todos…de habernos reencontrado.
Nos alojamos en un hostal frente al complejo arqueológico de Tiahuanaco porque se había hecho tarde para seguir viaje a Puno por el horario de cierre de la frontera.
Entramos a última hora de la tarde a conocer el complejo y a realizar una meditación como preparación a lo que íbamos a vivir los próximos días en Hayumarka.
Se hizo de noche y nos quedamos todos sentados afuera mirando las estrellas y escuchando a Nano lo que tenía para brindarnos, enseñarnos, y para “COMPARTIR”….
Ese momento vivido fue muy importante, pero lo que más nos quedó fue su pedido de que nos abramos al sentimiento, porque ninguna acción sirve si no la sentimos desde el corazón.
Terminada la charla, porque debíamos descansar,, cinco decidimos ir a meditar a un lugar un poco más alejado de la casa bajo un cielo cubierto de estrellas.
Antes de empezar la meditación pregunté porqué estaba ahí, porqué había ido…y la respuesta fue inmediata… “RECORDAR”. Para en otro momento recibir: “RECORDAR”… “RECORDAR LEMURIA” y “APERTURAR”.
Al día siguiente salimos en dos combis para Hayumarka. La armonía en el grupo era total.
Al llegar todos quedamos impactados por el lugar… al menos en mi caso que era la primera vez que lo visitaba, sentí que era un lugar mágico…. Y a la vez sentía que me resultaba conocido…que había regresado….
Nano fue a reconocer el lugar y cuando todos pensábamos que ya podíamos armar el campamento donde nos habían dejado las combis, nos señaló que el campamento lo teníamos que armar arriba!!!! .
Gracias a la intervención de Nicola, gente de la cercanía, hombres, mujeres y algunos chicos se ofrecieron a ayudarnos a subir todo. Era complicado para subir con tanto peso y para ellos fue “sencillo”.
Buscamos los lugares, armamos las carpas y enseguida nos pusimos a trabajar.
La noche llegó rápidamente; un cielo hermoso nos empezó a cubrir mientras meditábamos. Al terminar, Nano nos dividió en grupos para intercambiar lo visualizado y recibido por cada uno.
De pronto, el cielo se cubrió de nubes o de “una gran nube” pero sólo en el círculo donde nosotros estábamos y comenzaron a manifestarse fogonazos de luces que fueron incrementándose minuto a minuto; eran flashes hermosos iluminando el cielo haciendo vibrar nuestras almas….
Círculos de luces que se unían como jugando por distintos lugares del cielo para dejarme ver sólo por un instante el contorno de la base de una nave sobre nosotros..
Nano había recibido que a la noche se iba a manifestar la Hermandad Blanca, pero no le habían anticipado de qué extraordinaria manera. No quedaron dudas que nos estaban mostrando su presencia de una manera contundente… INTENSA…conmovedora..
Terminada la meditación nos fuimos a descansar ya que había sido un día muy fuerte en todo sentido.
Al día siguiente salimos a las 9 para seguir subiendo hacia la parte más alta del lugar donde se encontraba una piedra muy especial… Fue un gran esfuerzo, pero por suerte lo logramos. El grupo ayudaba. Parábamos para descansar y recuperar fuerzas y aire.
Al ir subiendo sentí de una manera muy especial la compañía de mis seres queridos, quienes me alentaron con todo su amor para que pudiese hacer este viaje tan importante para mi alma.
De acuerdo al mensaje que Nano había recibido subimos hasta el lugar donde se encontraba la piedra en la que íbamos a hacer un trabajo muy especial de recepción de energías.. .
Al llegar descansamos un momento y luego Nano eligió a seis de nosotros para acompañarlo a un lugar aparte para recibir las pautas del trabajo a realizar mientras el resto se quedaba mantralizando para ayudar.
En esta tarea participamos Nano, Marita, Yamile, Nicola, Claudia, Elina y yo..
Nano recibió que debíamos hacer un trabajo sobre esta piedra (manifestación femenina) a las 12,30 y otro en el Intihuatana (manifestación masculina) a las 15,30.
Se recibirían cristales a las 21,30 y a las 03,30, habría un contacto individual con la Hermandad Blanca en la Puerta de ARAMU MURU.
Particularmente, yo recibí de IRZAIM que teníamos que “CONFIAR!”
Nano confirmó este mensaje explicándonos que lo que siempre pide IRZAIM es tener “FE y CONFIAR”.
También nos entregó un nombre a cada uno de los que nos encontrábamos ahí, el cual actúa como llave para conectarnos y poder recibir información de cualquier piedra.
Luego eligió a los primeros 12 que tenían que subir a la piedra, mientras el resto quedaba mantralizando más abajo, para ayudar así a sostener la energía que según nos había dicho iba a ser muy fuerte. Una vez terminado el primer grupo, se debían rotar los lugares.
De uno en uno fuimos subiendo a la piedra para recibir la energía que nos iban a entregar los Maestros de la Hermandad Blanca. Cada uno mantralizaba su nombre cósmico y los que esperaban su momento de subir sostenían con OM RAHMA OM. Fue un trabajo largo y muy fuerte! Fuerte por lo que estábamos viviendo.. SINTIENDO…VIBRANDO…
En cuanto terminamos todos, Nano pidió que nos pongamos en grupo para comentar lo vivido.
Había mucho silencio… cada uno tratando de recordar o entender lo vivido, que había sido muy conmovedor para todos.
Descansamos y seguimos SUBIENDO!! Aún nos faltaba hacer el otro trabajo en la otra piedra, la Intihuatana.
El trabajo lo hacíamos de a cuatro. Una vez que apoyáramos la cabeza sobre la piedra teníamos que repetir el nombre del símbolo que los Guías le habían transmitido a Nano cuando hicimos la meditación antes del trabajo en la otra piedra.
Emprendimos la bajada con partes más complicadas que otras…pero felices por todo lo que habíamos realizado.
Llegamos al campamento y nos empezamos a abrigar ya que a las 21,30 era la entrega de cristales.
Fue una ceremonia muy especial que llevo como muchas de las cosas que sucedieron en este viaje, grabados en mi alma.
Por un lado, por la magia del lugar, por haberlos recibido a través de Nano y por el grupo hermoso de hermanos que acompañó la entrega mantralizando cerca nuestro. Una noche de verdadera Hermandad.
Llegó la hora tan esperada, las 3.30…
Comenzamos a bajar en silencio…el sendero se iba iluminando con las linternas. Darse vuelta y ver sólo lucecitas bajando la montaña proporcionaba una imagen que hacía vibrar mi corazón…pequeñas estrellas doradas en una noche muy especial…
Al llegar a la puerta teníamos que pasar de a tres. Uno en el medio y dos a los costados para comenzar el trabajo...la percepción… la unión...la entrega...
Me tocó estar a la derecha primero mientras aguardaba para ir al medio.
Al instante que me arrodillé y apoyé la cabeza sobre la piedra, me invadió un impresionante perfume a flores y al mismo tiempo mi mente no dejaba de pensar que era imposible que ese perfume saliese de la roca!
Pero después comprobamos que muchos lo habían sentido y que además algunos de los que pasaron estuvieron en un hermoso jardín lleno de flores, algunas de las cuales no eran de las que estamos acostumbrados a ver.
Nano explicó también que era el perfume de los Maestros de la Hermandad Blanca.
Al escuchar la voz de Nano para empezar a bajar sentía ganas de permanecer allí… de quedarme un rato más. Todos quedamos sensibles y conectados a ese lugar…, quizás hasta pensamos que no podríamos despegarnos más.
Y cada uno tuvo su experiencia de una manera u otra….
Quedamos todos en un silencio muy particular… lagrimas corrían por varias mejillas… nos habían tocado en lo más profundo…nuestras almas….
Comenzaba a amanecer y seguíamos respaldando a los que faltaban… se hacía difícil por el silencio o la introspección que cada uno necesitaba para poder comprender lo que habíamos experimentado…. el silencio se iba haciendo cada vez más profundo… nos íbamos sumergiendo en nuestros corazones para atesorar todo lo recibido…para agradecer..
Al terminar Nano, que fue el último en pasar, nos comunicó que los Maestros de la Hermandad Blanca habían pedido que se cerrara la tarea subiendo siete mujeres a la puerta.
Me emocioné hasta las lágrimas…cuando sentí mi nombre para subir. Era una manera de confirmar mi entrega… Pasamos Maricarmen, Yamile, Marita, Ricardina, Elina, Susana, y yo.
Nos pusimos en línea tomadas de la mano y las últimas con sus manos apoyadas en la roca. Los hermanos más abajo nos apoyaban mientras todos mantralizábamos nuestros nombres cósmicos.
Al mirar el cielo vimos que había un arco iris alrededor del sol…. Hermoso!
Debíamos subir…volver al campamento… yo quería quedarme…no sentía que debía irme…pero llegaba la combi a buscarnos y aún quedaba desarmar el campamento.
Al terminar, bajamos con todas las cosas y nos sentamos frente a la puerta. Se alargaba la despedida... Nano nos pidió que pasáramos para contar lo experimentado por cada uno…para COMPARTIR una vez más nuestro SENTIR… y sí! Seguíamos vibrando y llorando!
Llegó la combi y aún faltaba hacer la entrega de las piedras que cada uno había llevado. Nano nos había pedido a Elina y a mí antes de viajar que fuésemos preparando un cuarzo blanco con nuestro símbolo para dejar allá.
Busqué un lugar que me resonara… que sintiera que ESE era el lugar preciso y fue debajo de una piedra grande que vi un hueco. La puse pensando que ahí quedaría, resultó ser que tenía profundidad! Y sentí como mi cuarzo descendía…. Según Nano alguien lo estaría esperando abajo… Y luego lo puso Elina. Sellamos juntas el hueco con otra piedra... Quedaron juntos... y corrimos a la combi…fuimos las últimas en subir...
Susana, Amara y Osvaldo volvían a Tiahuanaco. Seguíamos viaje los que íbamos a Puno para de ahí Nano seguir a Tacna con su grupo y nosotras hacia Cuzco…
Pero al llegar a la terminal no nos podíamos terminar de despedir!!!!! Mientras escribo siento la tristeza de ese momento y se me nubla la vista....
Gracias a Zaida en Cuzco pudimos conocer lugares muy especiales para los que estamos en estos trabajos para luego seguir viaje a Machu Pichu, un viaje que había deseado desde muy chica… pero al llegar allá sentí que lo que tenía ante mí era nada comparado con todo lo que había vivido con mis hermanos en Hayumarka .
Quizás lo vivido allá sea muy difícil de entender para muchas personas…pero esto fue todo lo que sentí y viví y que llevaré atesorado en mi alma por siempre.
Faltaría narrar las visualizaciones y los mensajes pero ya sería demasiado extenso para leer…
Gracias Nano por permitirle este viaje a mi alma!
Gracias a los Guías y a los Maestros de la Hermandad Blanca
Y los hermanos y hermanas Rahmas por haber sido parte de este viaje!
Los abrazo desde mi alma y los llevo en mi corazón.
Copito
Octubre 2009,Olavarría, Buenos Aires, Argentina.
