¿Fantasía o realidad?
Nota.- Me llega una sensación como si del otro lado alguien apostaría (risas) si somos capaces de descubrir la forma, como si fuera una apuesta.
Un juego llamado humanidad.
neurálgico de la hermandad, a la puerta de Aramu Muru, al templo de los siete rayos. Si, llego ahí como flotando, estoy precipitado en el aire, suspendido. Se encienden unas pantallas alrededor de la sala de la caverna en la que estoy.
Veo, veo personas suspendidas, esperando, humanos
(Casi), cuerpos... (Sopetón - susto).
Filas de cuerpos como con gelatina por fuera, que van a ser engendrados, codificados. Si, manipulados para un vehículo Ser, receptores y creadores de conciencia emocional.
Veo un laboratorio genético, seres trabajando, no veo caras. Es nuestra genética, la de los humanos, que una experimentación somos de entidades supra galácticas, nuestros creadores. ¡Joder, siempre he pedido saber quién soy y que he venido a hacer!
Sí, estamos acondicionados dentro de unos cromosomas, conjuntados para crear un vehículo de conexión, como un chip, dentro de una macro computadora, que es el Ser, que es la creación, pues un gran juego esto es del Creador.
Veo la manipulación genética con la que somos creados, mutilados para no alcanzar niveles superiores de conciencia y liberarnos a las ataduras impuestas. ¿Por el creador?
Sí, estamos limitados, obvio es.
Vivimos en un mundo engañados, creyendo que somos.
¿Soy Yo?, he preguntado, y al toque me han contestado un montón de Yo es con rotunda afirmación, vamos que están presentes todo el rato, esto también me ha impactado.
Varias veces me he revelado, me quería levantar al descubrir tajantemente que todo una engañufla de la mente es, que nosotros, (como viéndolo ya estoy), vehículos somos físicos, nada más, que nuestra pequeña personalidad, la que nos sirve para el contacto y desplazamiento del cuerpo físico y asumir las pequeñas cosas, es suplantado por entidades que nos visitan sin darnos cuenta.
Nos hacen sentir, nos hacen pensar, nos hacen experimentar. Tan sólo un vehículo somos, dando la capacidad de experimentar, de interactuar,
¿Peleón, no?
La vida como un gran programa de ordenador es, lleno de herramientas para aprender, lleno de carpetas para conocer, lleno de desafíos, de jeroglíficos por descubrir.
La vida, ¿la vivimos nosotros, o somos inducidos?
¿Por quién y para qué?
Difícil cuestión esta para discernir, pues cortados, mutilados estamos y no alcanzamos a ver ni siquiera el porvenir, pues enseguida olvidados somos, cambiados a otro pensamiento de otra carpeta, entretenidos para no inmiscuirnos, para no ir más allá a investigar.
¿Esto es parte del plan?, se pregunta nuestra personalidad.
Si hartas carpetas he visto. Con luz e inmensidad, con preocupaciones y desolación, mundos paralelos estos son, mundos diferentes a los que acceso tenemos, sí, a este juego presente en el que incluidos estamos, sin el consentimiento de esta personalidad, en los que inmersos y perdidos también estamos.
Sí, acceso con este vehículo tenemos a otras suprarealidades, a otros espacios vibracionales, ¡claro, todo un intercambio es!, pues el Ser así lo ha decidido y a través de nuestra conciencia se ha expandido.
Difícil cuestión esta, incluso de imaginar para una mente abierta, vaya película que invitado he sido a ver, a sentir y experimentar, pues esta la idea era, que esto, nuestra vida, un programa un juego del creador es, ¿para qué?, tan solo como una manera de conocer, de experimentar para poder estar con conciencia en todos los planos y a la vez. Esta es la cuestión, este es el desafío que la humanidad como tal trae, creada para ello fue, para descubrir los códigos que en su interior guardados están, esperando conocidos, despertados y buscados ser, mas para ello, hartos entretenimientos tenemos, hartas vidas he información que desplegada constantemente está, hartas energías mal cualificadas, que buscando su parte de experimentar, a través de nuestros cuerpos, de las emociones, llegando a la corporeidad están, experimentando la materia, experimentando el hacer están.
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Sí, complejo juego, en el que por obra y gracia ¿de quién?, de ¿nuestra conciencia? inmersos estamos sin saber porqué, pues para nuestra pequeña personalidad, todo esto le supera, tan solo busca los aspectos más básicos de toda corporeidad, sentirse arropados y amados, y poco más.
Sí, se me ha hecho ver que somos un vehículo, por donde nuestra consciencia ES, experimenta, y con ello nuestro SER, nuestros Yo es, nuestros parientes estelares, intraterrenos y otros seres que dentro de nuestros universos creados son. Harta variedad hay de seres, de energías, de conciencias que pululando por nuestro cuerpo están, obviamente, sin conciencia en lo que a nosotros respecta, pues todos nuestros creadores llaves de casa tienen, para acceder, para hacernos creer, para en nosotros crear, pues el código de acceso tienen, a nuestro ordenador personal.
¿Fantasía o realidad?
Nota.- Me llega una sensación como si del otro lado alguien apostaría (risas) si somos capaces de descubrir la forma, como si fuera una apuesta.
Un juego llamado humanidad.
